Newell’s Old Boys perdió este domingo por la tarde ante Villa Mitre (Bahía Blanca) por 2 a 1 en un partido por los 32vos. de final de la Copa Argentina que se disputó en el estadio 15 de Abril de la ciudad de Santa Fe.

En el final, los hinchas del equipo rosarino comenzaron a arrojar objetos al campo de juego y el partido se suspendió.

En medio de los incidentes se registraron policías heridos y roturas en el alambrado de la cancha de Unión. Según informó a Mirador Provincial Fernando Peverengo, subsecretario de Coordinación de Políticas Preventivas, son cuatro los efectivos lesionados: dos en la cabeza y dos en las piernas. En ninguno de los casos se tratan de heridas de gravedad.

Esta fue la primera vez, tras 29 partidos, que se registran incidentes en un encuentro de Copa Argentina disputado en la provincia de Santa Fe.

La situación no le dio chances al árbitro Lucas Novelli, que dio por finalizado el partido a falta de minutos de juego por orden de la fuerza policial.

La bronca de Newell’s, cuya permanencia en primera división para la próxima temporada estará comprometida, demoró unos minutos la celebración de la gran victoria de Villa Mitre, que en 16avos. de final tendrá como rival a San Martín (San Juan).

El partido
El equipo bahiense sacó una ventaja de dos goles en la primera parte con los tantos de Carlos Herrera y Leonardo López, ambos de media distancia, que establecieron una gran diferencia ante un Newell’s que solo dispuso de un disparo alto de Maximiliano Rodríguez por encima del travesaño.

El técnico de Newell’s, Héctor Bidoglio, dispuso cambios ofensivos para el segundo tiempo que modificaron la estrategia y actitud de su equipo, y como consecuencia de ello Alexis Rodríguez logró el descuento en el peor momento de Villa Mitre.

Newell’s estuvo muy cerca del empate en una tapada de Facundo Tavolieri ante Alexis Rodríguez y luego Héctor González evitó sobre la línea el gol del ingresado Mauro Formica.

El dominio de Newell’s duró poco, porque Villa Mitre restableció su apego a la marca y el orden y dejó sin opciones a su rival, hundido en la decepción que también sufrió la reprobación de sus hinchas, quienes generaron la intervención de la policía local por disturbios con intento de ingreso a la cancha.