Marcelo Tortul

El equipo paranaense finalizó su participación en la temporada 2018-19 del básquet de ascenso sin lograr el objetivo mínimo de clasificar en la Zona Norte a los play offs. El director técnico, Oscar Cachi Bonell, quien lo dirigió en la parte final del torneo, realizó un balance y se refirió a distintos temas.

La campaña

La temporada 2018/19 de la Liga Argentina, segunda división en el básquet argentino, no fue buena y pasó sin pena ni gloria para el Atlético Echagüe Club. Luego de apostar en la parte inicial del certamen a la continuidad de un director técnico foráneo -Daniel Beltramo- y donde los resultados no fueron los mínimamente esperados (17 derrotas y solamente 5 triunfos) la dirigencia apostó por un entrenador de la casa: Oscar Cachi Bonell. Tampoco y como el entrenador también lo asegura se logró el objetivo que se había propuesto de clasificar a los play offs. Y quizás lo más positivo en el último tramo es que se abandonó el último lugar de la tabla en la Zona Norte. De estos y otros temas habló el coach paranaense.

Dificil de analizar

El análisis y balance fueron los primeros puntos de los que Bonell aseguró: “Es difícil analizar la temporada completa de Echagüe en la Liga Argentina de la cual formé parte solamente en la última instancia del torneo. Igualmente como aficionado al deporte y además porque trabajo en el club la seguí con atención. Lo que puedo decir es que Echagüe tuvo una temporada irregular. Nunca se pudo acomodar como equipo para afrontar la competencia en una Zona Norte que para mí sin dudas es mucho más competitiva que la Sur. Echagüe desde la conformación misma del plantel tuvo muchos inconvenientes. No pudo lograr que el equipo se amalgamara en la cancha”.

Su momento

Acerca del momento en que se hizo cargo como entrenador principal del plantel profesional, el DT manifestó: “Mi objetivo era clasificar al equipo a los play offs. Objetivo que no se pudo cumplir y que lamentablemente es el punto negativo que ya es imposible de cambiar. Pero también debo destacar lo positivo y es que no quedamos en el último lugar, posición que ocupó Echagüe en casi toda la Liga Argentina. Quizás no significa mucho, pero en el caso que hubiera existido el descenso no tendríamos que disputar la permanencia con un equipo de la zona Sur”.

Las lesiones

El rendimiento fue otro de los aspectos que Bonell hizo referencia: “En la temporada mostramos que pudimos jugarle de igual a igual a todos. Inclusive a equipos más fuertes en presupuesto y de arriba en la tabla de posiciones. Las lesiones nos limitaron mucho y eso que teníamos uno de los mejores en juego interior del certamen. Con ausencias importantes se nos debilitó mucho el perímetro. Quedamos en un promedio muy bajo de altura y de edad. Y la situación fue aprovechada por los rivales principalmente en los cierres de los partidos. Fuimos emparchando situaciones que no nos llevaron a competir de igual a igual. Tuvimos un buen partido de local con Unión de Santa Fe donde jugamos suplementario. Hicimos un buen partido en Villa San Martín perdiendo por 4 puntos. Le ganamos a Sportivo América y fuimos derrotados por poco margen con Independiente. Y a esa altura con bajas que se sumaban o jugadores en inferioridad física”.

“Apostar a un jugador líder”

De los cambios a corto plazo que debería realizar Echagüe para apostar a una campaña acorde a su historia y prestigio, el DT aseveró: “De las experiencias que he tenido en Liga Nacional considero que es clave la conformación del equipo. Es el primer y principal paso que da la institución de acuerdo al presupuesto, con el entrenador que está a cargo y con el objetivo que se proponga. Es fundamental como se conforme el equipo. Por ejemplo tener un líder que es algo que nos faltó en los cierres de los partidos. Un jugador que tomará decisiones que es muy importante para definir un pleito. A esto sumarle la preparación en los meses anteriores al comienzo de la competencia. Porque la forma de competencia te castiga y mucho en el tema de poder practicar. A veces tenés dos compromisos en apenas tres días y estás constantemente pensando en el rival y los ajustes y no en un entrenamiento que siempre es necesario. Y otro de los puntos es tener un plantel largo. En el caso que el presupuesto no alcance se debe completar con Juveniles o Sub 23 oriundos que te ofrezcan minutos de calidad”.


¿Sigue como DT?

El entrenador habló de su situación y de la posibilidad de seguir al frente del equipo: “Mi situación quedó planteada en el momento que me contactaron para dirigir el equipo y fue que cuando finalizara la Liga Argentina terminaba mi contrato con el club. Sigo trabajando en el básquet femenino de Echagüe. Con la parte que está ligada al básquet profesional todavía no he tenido contacto. Supongo que está la posibilidad de continuar y eso seguro dependerá de la confianza que tengan los dirigentes en mi trabajo. En lo personal ya lo charlé con mi familia y creo que estoy en condiciones de dirigir en la Liga Argentina o un Torneo Federal. Ojalá que sea en Echagüe porque es mi club y estoy muy cómodo. Y si no analizaremos lo que pueda surgir. La prioridad la tiene Echagüe y me encantaría dirigir una temporada más y con un equipo ensamblado en base a mi experiencia y por supuesto de acuerdo a las necesidades y objetivos que tenga el club”.

Al rescate de la gente

La considerada nueva Liga Argentina de Básquet (ex Torneo Nacional de Ascenso -TNA-) por lo que se puede observar en los distintos lugares del país donde se desarrolla no consiguió el resultado esperado.

La merma de público es cada vez más notoria y es sabido que la asistencia de gente es fundamental en cualquier disciplina deportiva. Y esto no es solamente por el apoyo a su institución y equipo y al deporte. Está claro y demostrado que más allá de la importancia de cada uno de lo que aportan de alguna u otra forma para que se mantenga el deporte se debe tener en claro y pensar que el crecimiento y futuro sin la presencia del hincha o el simpatizante -principales protagonistas- será casi imposible. Cuando prácticamente el interés en el común de la gente que le gusta un deporte no existe es porque el cambio debe ser profundo y pensando justamente en el motor principal. La solución no está en buscar culpables y responsables sino que cada uno desde su lugar piense en el bien común con el siempre objetivo de rescatar a la gente que ama un hermoso deporte como lo es el querido básquet.