Que se viene denunciando la paralización y la falta de trabajo en las obras públicas de nuestra provincia desde fines del año pasado y al día de la fecha la situación es mucho peor y más preocupante.

Que no existe ni el menor atisbo o signo de reacción por parte del Gobierno provincial que nos haga esperanzar en un futuro inmediato mejor, sino todo lo contrario.

El pasado mes de noviembre este gremio se reunió en Santa Fe con integrantes de la Cámara Argentina de la Construcción haciendo notar la crisis del sector y la ostensible pérdida de puestos de trabajo por la paralización de la obra pública, remarcando que volver a poner en funcionamiento la “rueda” no es automático y que requería la atención inmediata.

Que lejos de obtener respuesta a nuestros reclamos, la situación empeora día a día perdiéndose muchos más puestos de trabajo y encontrándose nuestros trabajadores en la calle sin poder llevar a su casa el sustento necesario para su familia.

Que a la fecha las diferentes obras públicas llevadas a cabo en nuestra provincia como la repavimentación de avenida 27 de Febrero (con innumerables quejas de vecinos y comerciantes), las más de 300 viviendas de Ciudad Universitaria, Centro Convenciones de la Ex Rural (Parque Independencia), ampliación del Museo Castagnino, todas las obras viales (interurbana entre Capitán Bermúdez y San Lorenzo, por ej.) como así también la repavimentación de calles de nuestra provincia, acueducto Fray Luis Beltrán-Cap. Bermúdez, entre otras, se encuentran todas totalmente paralizadas.

Es por ello que los trabajadores constructores reclamamos a las autoridades provinciales que atiendan de manera urgente las necesidades impostergables de los trabajadores constructores, no podemos aguantar un día más esta situación y no podemos esperar a que se apruebe o no determinada ley o leyes salvadoras de nuestros destinos y suerte, sino que requerimos la inmediata atención de quienes gobiernan a fines de poder continuar con nuestros trabajos dignamente.

Los trabajadores constructores no queremos subsidios, ni ayudas piadosas, queremos trabajar y sentirnos orgullosos de nuestro trabajo y esfuerzo para mantener y alimentar a nuestras familias.

La Unión Obrera de la Construcción seccional Rosario por lo tanto manifiesta que se encuentra en estado de alerta y movilización permanente hasta tanto se resuelva la situación de la obra pública y los puestos de trabajo de los trabajadores constructores, sin descansar en nuestra lucha hasta obtener tal digno objetivo.