Diego Montejo
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Pablo Lavaca (38) llegó desde Capital Federal a la provincia de Santa Fe cuando era apenas un niño. Como muchos, la oportunidad de una mejor calidad de vida, fue la decisión para que sus padres se instalaran en el Cordón Industrial en la localidad de Capitán Bermúdez, donde pasó su infancia y parte de su juventud. Desde hace dos años su vida transcurre a muy pocos kilómetros, en Pérez, otra localidad del Gran Rosario, donde echó raíces junto a su mujer e hijos.

Lavaca cuenta a Mirador Provincial que entró al mundo de la música con tan solo 3 años, que le atraía mucho y sentía una fuerte necesidad de expresarse. Fue su madre quien advirtió sobre su talento y lo importante que era para él, entonces decidió llevarlo a tomar clases de piano. A los 11 años inició sus presentaciones en casamientos, cenas festivas, peñas y ferias. Posteriormente, durante su adolescencia, comenzó su práctica con la guitarra. El género musical por el cual se inclinó con este instrumento fue el folclore, luego de comenzar a tocar canciones, empezó a cantarlas.

"A los 18 años se me cruzó por la mente la idea de grabar un disco, sueño que pude cumplir a fines del año 2015. A principios del 2016, algo que estaba postergado, despertó en mí de manera repentina e hizo que volviera al camino de la música, el cual estaba relegado", relata. Dicho material se llamó Entre zambas y chacareras y fue grabado en un estudio de Capitán Bermúdez, acompañado por Diego Leguizamón en violín, Walter Benedek en bandoneón Martín Imperatrice en teclados, Marcelo Donadello en bajo y Miguel Sánchez en bombo. "Este disco es una selección de temas que interpretaba habitualmente. Fueron incluidos luego de una cuidadosa selección representando una lista con la cual se siente más atraído a la hora de interpretarlos".

En octubre del 2019 dio a conocer su segundo disco al que llamó Canto a la vida. Con una gran variedad de ritmos folclóricos, se suma al trabajo la presencia de Cuti y Roberto Carabajal, dos históricos e indiscutidos pilares de nuestra música popular. "En este trabajo la idea fue ir por más y salir de las zambas y chacareras y comenzar a incursionar en otros ritmos como la canción del litoral y la huella pampeana. También quise apostar a canciones inéditas de nuevos compositores", explica. Asimismo lamenta no poder presentar el disco durante este año y dice: "Había preparado una fecha para el mes de abril e íbamos a apostar por algo distinto en el sentido de la instrumentación, con sonidos más eléctricos y no tan tradicionales de bajo, batería y guitarras eléctricas".

"Suelo tocar en peñas y festivales de la región. También tuve la posibilidad de presentarme en Cosquín en los espectáculos callejeros, en el Fogón Criollo. También en Baradero, en Entre Ríos", enumera y agradece a cada uno de los espacios que le dieron la posibilidad de llevar su música. "La idea es seguir creciendo, sumando, es un sueño que quiero cumplir y que lleva mucho tiempo", añade el artista que tiene como fin en corto plazo dedicarse a pleno a la música. "Es complicado establecerse en este rubro", reconoce.

A la hora de definirse como músico dice: "Soy una persona que está en constante aprendizaje que le gusta recibir consejos y dispuesto a escuchar a los que saben. Me pasa que escucho cosas que hice los primeros años y me gustaría volver a repetirlas, soy autocrítico de lo que hago de las canciones, las melodías y las letras". En tanto, al momento de elegir una vertiente dentro le folclore sostiene que está más cerca de lo tradicional con un mensaje ligado a la familia y el amor.

Impronta propia
Por otro lado manifiesta que un artista comienza a construir un camino cuando hace su música propia: "Este año comencé a escribir canciones, fui muy tímido en ese sentido, por muchas cosas, en principio por no conocer la materia, pero con esfuerzo se aprende. Hoy tengo cuatro canciones propias donde traté de reflejar vivencias mías y de otras personas. Hoy nos toca vivir una situación que cuando hablas de la realidad enseguida te lo relacionan con lo político, no hay término medio, te relacionan con un lado con el otro".

En consonancia agrega luego: "Yo aprendí a tocar la guitarra y cantar escuchando a Los Nocheros que fueron todo un boom para el folclore. Aparecieron con algo totalmente novedoso y atrás de ellos vinieron varios. Otro que me gusta es Facundo Toro, Sergio Galleguillo, Jorge Rojas. Y Obviamente en grupos vocales Los Carabajal".

"La idea es seguir creciendo, sumando, es un sueño que quiero cumplir y que lleva mucho tiempo".
Pablo Lavaca
Músico