Lucía Torres | [email protected]


Mario Reniero, empresario del turismo en Chajarí, se refirió al anuncio del presidente Alberto Fernández, “era algo que se podía esperar, pero realmente teníamos la esperanza la gente que estuvimos un año sin trabajar, de que no íbamos a llegar a esto”. El empresario advirtió además que la única actividad a nivel nacional que se prohibió fue el turismo, “lo de más se restringió horarios o modalidad pero de una manera u otra pueden seguir trabajando, nosotros no”.


En este sentido remarcó, “a nosotros nos cortaron las alas directamente, no alcanzamos a levantar vuelo después de lo del año pasado que ya nuevamente nos dejan quietos”. Durante el corto período que pudieron viajar, en el caso de su empresa realizaron sólo dos viajes, “quisimos hacer las cosas bien, esperamos, nos asesoramos e invertimos en consecuencia, y demostramos que se puede viajar, cuidándose. No conozco grupos que hayan venido con gente contagiada”.


Las empresas de turismo de la provincia y región mantienen contacto por grupos de redes sociales donde se iban informando el panorama previo y durante los viajes. Sobre esto contó por ejemplo que en ningún recorrido a puntos turísticos se registraron controles. “No hubo controles en ninguna parte de la República Argentina, nosotros viajamos a Mar del Plata y Córdoba, pero conozco quienes viajaron al Norte argentino, otros a la zona de Bariloche, también a Cataratas y nadie se encontró con controles, por eso indigna más que ahora nos corten nuevamente”.

Rubro manso

Esgrimiendo una opinión de por qué nuevamente el rubro más afectado es el turismo dijo que “creo que es porque somos muy mansos, si uno ve qué paso el año pasado, somos los únicos que no salimos a cortar una ruta o manifestarnos de alguna manera, por eso lo más fácil es agarrarse con el que menos lio hace”.
Al respecto de lo que pueda suceder en esta nueva medida no pudo precisar si tomarían nuevas medidas para expresarse, “lamentablemente falta unión en nuestro rubro, no hay alguna entidad que vele por nuestros derechos y que nos convoque, es lamentable pero es así”.


Los colectivos de larga distancia debieron ponerse en condiciones luego de un año de estar parados, “todo lo que significa cambiar aceite, filtro, correas, los acondicionadores de aire, porque un vehículos se rompe más estando parado que funcionando, reactivar los seguros y habilitaciones, hemos gastado fortunas para que todo salga bien, y ahora nos encontramos con el colectivo en el galpón nuevamente”.


La gente de nuestra zona, el departamento Federación y parte de Corrientes, “no tienen miedo, se cuidan, saben que tenemos que estar con el alcohol en gel en la mano, y el barbijo todo el tiempo, pero quieren viajar, cuando habilitamos enseguida cubrimos los cupos, la gente le tiene respeto al Covid, pero quiere viajar”.


Además de las empresas de turismo, este rubro genera movimiento económico en muchos puestos de trabajo, “en Mar del Plata el año pasado se cerraron definitivamente ciento cincuenta hoteles, en Carlos Paz otro tanto, y ahí tenés las mucamas, el servicio de lavandería, los que hacen el mantenimiento del hotel, los comedores en las rutas que tenían las mismas expectativas que nosotros, los artesanos, los guías de turismo, es muchísima la gente que queda sin trabajo al cerrar el turismo” expresó indignado Reniero, dejando entrever también la poca visibilidad que se le dio en los medios nacionales al freno al turismo.