Belén Fedullo | [email protected] 


Lucas tiene 17 años, comenzó las clases el 1 de marzo, ilusionado por volver a ver a sus compañeros durante el último año del colegio. El viernes 5 decidió salir a andar en bicicleta con una amiga. Se hizo de noche, había poca gente porque refrescó, por eso fueron a la costanera, un lugar concurrido.


Cerca de las 21 llegaron a una de las rotondas del paseo concordiense, y allí los sorprendieron dos hombres que les exigieron sus bicicletas y otras pertenencias. Sin mediar muchas más palabras, uno se acercó al adolescente por detrás y le dio una puntada en el pecho.


A partir de allí, lo que era un paseo se convirtió en un infierno. Ambulancia, hospital, cirugía, coma farmacológico. Afortunadamente, Lucas hoy puede contarlo "por unos centímetros la puñalada no llegó al corazón, el elemento punzante entró de manera lateral, sino tal vez la historia era otra", dijeron desde el hospital.


A ese hecho, en pocas semanas se sumaron robos a mano armada a motociclistas que trabajan como cadetes, arrebatos en las calles y entraderas. Todo terminó en una marcha multitudinaria en la zona céntrica, que finalizó con un reclamo en tribunales. Luego de eso llegaron las promesas, la ministra de Gobierno y Justicia de la provincia, Rosario Romero, quien dijo que había tomado conocimiento de lo que sucedió en la costanera, y que se reuniría con el Consejo de Seguridad de la ciudad, pero eso demoró más de lo esperado. "Llama la atención el nivel de violencia", había dicho desde Paraná y también aseguró: "Pondremos más cámaras y entregaremos otros elementos para reforzar la labor policial".


Tras la recuperación del joven agredido, dos personas fueron detenidas y la causa sigue en la Justicia. Hubo algunos días de calma, pero fueron pocos. Después, nuevamente empezaron los arrebatos, robos de motos, bicicletas y entraderas, incluso en la zona céntrica, en donde desvalijaron una casa mientras sus ocupantes dormían en el interior.


La gota que colmó el vaso fue lo que sucedió el domingo 19 de abril. A poco más de un mes de la agresión al joven de 17 años, María Delcia Blanc de Galeano, profesora jubilada, de 80 años, fue hallada sin vida y maniatada. La mujer, que había estado con su familia durante la tarde, no contestaba las llamadas y por eso su hija decidió ir a ver qué sucedía. Triste imagen la que se llevó.


Su vivienda está ubicada en calle Rivadavia, entre Carriego y Roque Sáenz Peña. Es una zona transitada, cercana a la costanera, pero también al centro. Al lado de la casa está el Museo de Antropología y Ciencias Naturales, cerca la Central de Tránsito, pero allí nadie había visto nada durante una jornada que parecía tranquila.


Otra vez llegó la preocupación, la sensación de desprotección, y el recuerdo de un asesinato de características similares ocurrido a fines de junio del año pasado, cuando otra profesora jubilada fue asesinada en su casa, en la zona céntrica.


Seis días después capturaron al presunto asesino, que solamente había robado un celular en la casa, y fue trasladado a otra localidad para cumplir con la prisión preventiva.


Ese hecho llenó de preocupación a la comunidad que, una vez más, comenzó a manifestar en redes sociales su desencanto con la inseguridad. Además piden más presencia policial y más controles.

Una reunión con anuncios

El asesinato de la docente jubilada tuvo mucho eco. A eso se sumó la creciente ola de robos que hubo sobre fines de abril y nuevamente los ciudadanos comenzaron a organizar protestas para reclamar que se tomen medidas.


El 28 de abril, casi 10 días después del crimen de Blanc, la ministra Rosario Romero estuvo en Concordia, acompañada por el Jefe de Policía de la provincia, Gustavo Maslein. Se reunieron con el intendente, Alfredo Francolini y, tras el encuentro, llegaron las promesas.


"No hemos visto un crecimiento del delito", aseguró la ministra al contar que las estadísticas de denuncias se sostienen en el mismo nivel que años anteriores, y dio cuenta del presunto motivo por el que los robos son más violentos: "No quiere decir que no nos preocupe el alto nivel de violencia que a veces ocurre en algunos delitos callejeros, nosotros lo vinculamos al consumo de sustancias. Por eso hay que seguir bregando por el combate ante el narcotráfico, el narcomenudeo ya que el consumo de sustancias hace que algunos delitos que antes eran menores, tornen más violentos si las personas consumen algunas sustancias".


Romero también hizo mención al proceso de licitación para comprar camionetas, patrulleros e incorporar personal (en Concordia hay cerca de 950 policías). Dijo que este año no están en condiciones de crear nuevos cargos debido a la situación generada por la pandemia. Pero eso piensan hacerlo en 2022.


Maslein, por su parte, indicó que "hay un proyecto que contempla la instalación de más cámaras de seguridad para la ciudad. Además, la ministra de Gobierno entregó algunos vehículos que habían sido secuestrados por la Justicia y además se dispuso la compra de otros para la fuerza policial".


Entre otras cosas, también habló sobre el 911. Hace 7 años, precisamente el 21 de abril de 2014, el ex jefe de Policía de la provincia, Héctor Massuh, había prometido para Concordia "el mejor 911 de Sudamérica". "El 911 de Concordia va a ser el más moderno, porque justamente todas aquellas cuestiones que notamos en el 911 de Paraná las ajustamos para que Concordia tenga el mejor sistema del país y no sé de Sudamérica", había dicho textualmente. Esa promesa había llegado luego de la sedición policial que terminó en saqueos y juicio. Ahora Maslein volvió a tomar la posta, recordó que hubo una licitación que quedó caduca en esa oportunidad y contó que hay un llamado a licitación para el 911 en la ciudad de Paraná y se tiene previsto extender la red digital a otra ciudad como Concordia.

Diagnóstico

Desde otros sectores, hacen análisis sobre la situación y encuentran algunas respuestas a lo que está sucediendo. El concejal Luciano Dell ´Olio, representante de Juntos por el Cambio, contó a Mirador Entre Ríos: "La ministra Romero estuvo en Concordia y en el marco de esa visita se hizo una convocatoria del Consejo de Seguridad. Por lo que sabemos, la visita de autoridades provinciales fue una reunión con poco contenido de las estrategias para reducir el delito que tiene el Ministerio para con la ciudad", dijo.


Además, contó: "En las diferentes reuniones los miembros de la Policía que han sido convocados a encuentros que solicitamos nos dieron algunos datos precisos. En lo que va de la gestión hemos tenido 3 o 4 reuniones con ellos y el común denominador que expresan es la falta de inversión por parte del gobierno provincial en la Policía, con elementos muy precarios y escasos, sin presupuesto necesario para hacer una buena prevención del delito".


Por su parte, el Juez de Garantías número 2, Germán Dri, analizó: "Es palpable el crecimiento de la inseguridad. Es complejo", y agregó que "hay múltiples factores. La situación económica, las cuestiones socioculturales, la educación y el flagelo de la droga", sentenció. Entre otros factores indicó que "la educación es una cuestión muy importante, porque soy un convencido de que en cuanto más educación hay, se disminuyen los delitos y aumenta la posibilidad de brindarle a la sociedad un futuro distinto".


Los diagnósticos están hechos, la situación está a la vista y las promesas, a la orden del día. Mientras tanto, los ciudadanos siguen reclamando y esperan decisiones firmes que cambien la realidad violenta que genera miedo e incertidumbre.