Francisco Caffaro integra la lista previa de los 15 basquetbolistas que se preparan para representar a Argentina en los Juegos Olímpicos de este año. Tres se quedarán afuera. Nacido en Piamonte, con 2,14 metros de altura y 21 años asoma como un jugador que podría vestir la camiseta nacional muchos años. Estudiante de la Universidad de Virginia, integra el equipo de básquetbol que disputa los campeonatos de la liga universitaria estadounidense (NCAA). Después de años de lesiones, en la temporada 2020/2021 pude agarrar ritmo y fue citado por Sergio Hernández previo a Tokio.

Caffaro habló con Mirador Provincial vía Zoom desde Las Vegas, donde el seleccionado jugará tres partidos amistosos, sobre los días previos al certamen en Japón y su esperanza de poder quedar en el grupo. “Tengo ganas, confianza en mí mismo y voy a seguir haciendo lo posible para poder estar entre los 12”, comentó.

Las lesiones le quitaron continuidad a su carrera en los últimos años. En este 2021 ha podido jugar más. “El nivel lo vengo retomando desde que me recuperé de la última lesión. Día a día me voy sintiendo más cómodo. Después de tres años sin mucha participación y sin muchos partidos es muy difícil saber en dónde está uno. Desde que terminó la temporada pasada estoy entrenando mucho y no tuve que parar por lesiones”, comentó el basquetbolista.

El pívot viene de una 2020/2021 en la Universidad de Virginia con contratiempos producto del coronavirus. “La temporada pasada fue rara, sin fans. En la NCAA las tribunas están casi siempre llenas. Nosotros tenemos capacidad para 16.000 personas y los dos años anteriores a eso llenamos la cancha todos los partidos. El año pasado no había nadie en las tribunas”, aseveró Francisco.

Afirmó que está dispuesto a dar todo en el combinado nacional: “Soy un jugador que puede aportar un 100 por ciento en los pocos minutos que me toquen. Asegurar que voy a rebotear, que voy al box out, que voy a meter una cortina y enrolar. Si estoy abierto, tratar de terminar”.

Francisco integra una familia de grandes jugadores de básquet. Su hermano Agustín es profesional y formó parte del plantel subcampeón del mundo en China 2019. Su otro hermano, Esteban, juega en Trebolense y ya fue citado para seleccionados argentinos juveniles. “Tenía muchas ganas de poder estar acá con Agustín, pero no se dio. Él está más que contento de la situación en la cual estoy yo ahora”, comentó.

- ¿Qué pudiste aprender de Luis Scola en estos días? Vos tenés la suerte de estar con él.
- Él tiene la suerte de estar conmigo... no, mentira. Luis es un referente y una persona a la cual siendo argentino admiro y trato de aprender de él y de seguir pasos que él tomó para llegar a ser Luis Scola. Está muy bueno aprender con él y que te c... a p..., y que diga qué hacer en ciertas situaciones. Si me tiene que c... a p... y me dice “ahí tenés que estar vos en el aro”, lo tomo como que Luis quiere que yo mejore.

El jugador universitario no tiene planeado hacerse fotos con ningún deportista de poder estar en Tokio 2021. Sí le gustaría jugar contra Estados Unidos (el martes 13), Australia (el sábado 10) en los amistosos previstos próximos y ante Eslovenia, rival en la fase de grupos de los Juegos Olímpicos.