José Prinsich
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Desde que Karl Freiherr von Drais sacó a relucir su alucinante creación por las calles alemanas en 1817, las formas de trasladarse cambiaron considerablemente. El inventor había lanzado la “laufmaschine” o máquina de correr, aunque nunca se imaginó que aquella simple unidad –sin pedales ni frenos– iba a revolucionar el transporte. La bicicleta logró ocupar un lugar preponderante en la cotidianeidad de las personas, haciéndolas más libres en su andar y mejorando la salud de quienes la emplean. Un invento que cambio poco en los últimos 100 años pero que, actualmente, forma parte de la visión de futuro de ciudades sustentables y más amigables con el medio ambiente.

En 2016, casi dos siglos después de aquella notable construcción, la Municipalidad de General Ramírez puso en marcha el “Plan de Movilidad Sustentable”. El objetivo de esta propuesta fue fortalecer y consolidar la movilidad con criterios de sostenibilidad, integrando generadores de viajes con eje en equipamientos: industriales, educativos y recreativos. Además, a través de esta novedosa propuesta se propició un estilo de vida saludable y compatible con la geografía urbana.

La utilización de la bicicleta se transformó en la columna vertebral del programa, siendo el único de estas características en ciudades demográficamente similares de la Argentina. La incorporación de una red de bicisendas y ciclovías –cuya extensión supera los 4,7 kilómetros y que integra de norte a sur la ciudad– marcaron un punto de inflexión en la comunidad ramirense ya que se trató no sólo de una nueva forma de apropiación del espacio público sino también la posibilidad de generar conciencia ambiental desde un medio de transporte económico, ecológico y saludable.

Dicho proyecto fue encarado por la secretaria de Obras y Desarrollo Urbano, Arq. María Laura Ceballos, y el secretario de Gobierno, Dr. Pablo Omarini, quienes tuvieron la oportunidad de presentar la experiencia en el Congreso Argentino de Vialidad. Más allá de las obras de infraestructura que se dispusieron en la localidad, se desarrollaron diversas acciones para poder cumplir con los objetivos planteados del Plan de Movilidad Sustentable, entre los que se destacan: celebración por el Día Mundial Sin Auto, campañas de concientización, carreras barriales recreativas, regulación de la normativa vigente, red de vías protegidas, incentivos de acceso a la bicicleta, pintada de murales y reuniones con vecinos.

Asimismo, se participó en concursos de educación vial, donde la Capital Provincial de la Juventud obtuvo excelentes resultados y durante tres años consecutivos logró quedarse con los primeros lugares, lo que significaron 90 bicicletas para los ganadores.

Dar es dar

No se equivocaba el escritor uruguayo Eduardo Galeano al decir que “mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”. Esa fue la premisa del programa “Rueda Solidarias” que tenía como objetivo que los vecinos pudieran donar bicicletas en desuso para que fueran entregadas a niños y niñas de la localidad.

La iniciativa de la Secretaría de Gobierno fue muy bien aceptada por la comunidad y en los últimos días se entregaron las bicicletas a los gurises ramirenses, quienes con mucha alegría y emoción recibieron la sorpresa.

En diálogo con MIRADOR ENTRE RÍOS, Omarini expresó que “el programa lo que hace es insertarse desde una mirada social fomentando el acceso a la bicicleta como bien necesario para fortalecer el plan de movilidad, es decir, que todos puedan tener acceso a una bicicleta. La Municipalidad ya viene trabajando en otras herramientas que tienen que ver con descuentos y convenios con bicicleteros. Esto trabaja con otro costado y que tiene que ver con la posibilidad –a través de la solidaridad social– de que quien no pueda acceder a una bicicleta tenga la oportunidad de adquirirla”.

A su vez, el funcionario destacó que “el municipio hizo un convenio con los bicicleteros de la ciudad, a partir del cual ellos aportaron la mano de obra ad honorem para arreglar las bicicletas. Nosotros brindamos los repuestos y herramientas necesarias para la reparación. El otro eslabón del programa son los beneficiarios, que son elegidos por los establecimientos educativos de nivel primario de la ciudad. Se articula con cada escuela para ver quiénes tienen mayores necesidades para acceder a la bicicleta”.

–¿Cuáles han sido las repercusiones de programa?

–Las repercusiones han sido excelentes. El programa se va retroalimentando solo. En la medida que la gente ve que esto empieza a funcionar, la cadena de solidaridad se va ampliando. Es muchísima la gente que se contacta con el municipio para traer su bicicleta en desuso. Actualmente hemos entregado 14 bicicletas y hay algunas más en reparación. Este año vamos a cerrar el programa con la entrega de unas 40 unidades. Ya tenemos en stock una buena cantidad de bicicletas para el inicio del ciclo lectivo escolar del año que viene.

Proyecciones

–¿Cómo sigue “Ruedas Solidarias”?

–El programa vino para quedarse y la proyección para el año que viene es continuarlo. La idea es seguir trabajando en esto y también en otros canales de acceso a la bicicleta que tienen que ver con diversas líneas de acceso como créditos blandos para comprar bicicletas o descuentos. El compromiso de la Municipalidad de General Ramírez es seguir trabajando para fortalecer la movilidad sustentable.

–¿Qué balance se hace del uso de las bicicletas en la ciudad?

–La bicicleta hace mucho que es un medio de movilidad importante en Ramírez. Tenemos asociaciones –como la Roberto Breppe– que fomentan el uso de la bicicleta y es algo que venimos trabajando desde hace mucho tiempo. El plan de movilidad sustentable es muy amplio y comprende la ejecución no sólo de una red de bicisendas y ciclovías –que hoy tiene casi cinco kilómetros en toda la ciudad y que la conecta de sur a norte– sino también un montón de trabajos que tienen que ver con esto.

Relevamiento

Al ser consultado por el balance que se hace de las bicisendas y ciclovías en General Ramírez, el secretario de Gobierno, Pablo Omarini, indicó que “en primer término, visibilizaron al que ya estaba usando la bicicleta, que es mucha gente. Nosotros hemos hecho un relevamiento de su uso y estamos cerca de las 800 personas que las utilizan con periodicidad. Hay gente que ocasionalmente las utiliza y que no está contabilizada en este relevamiento. Trabajamos para que la mayor cantidad de la población aproveche el uso de bicicleta como la propiciación de un estilo de vida saludable y compatible con la geografía de la ciudad, que nos hace bien a nosotros mismos y es una mirada inteligente de cómo movilizarnos de manera económica, ecológica y saludable.