06-08-2019 Juegos Olímpicos Universitarios Sanos de cuerpo y mente La 30ª edición de las Universiadas puso en acción a 12 deportistas entrerrianos que cursan en altas casas de estudio. Representando al país, compitieron con pares de todos los continentes en la cita ecuménica que tuvo lugar en Nápoles (Italia). El maciense Sergio Pandiani fue uno de los destacados de la delegación argentina. Luis Gómez Siendo referentes de una camada de jóvenes que se impone diariamente elevados desafíos, una docena de entrerrianos intervinieron en los XXX Juegos Olímpicos Universitarios, que se desarrollaron el mes pasado en Nápoles (Italia). Se midieron con jóvenes de similares caracteres, que apuestan al alto rendimiento en el estudio y en la práctica deportiva, en una reunión que aglutinó –entre el miércoles 3 y el domingo 14 de julio– a unos 8.000 estudiantes deportistas de 17 a 25 años. Representantes de 127 países se dividieron en competencias de 18 disciplinas y estuvieron en juego medallas en 222 pruebas. Solo un selecto puñado de argentinos estuvo cerca de subirse al podio y uno de ellos fue entrerriano. El más completo El maciense Sergio Pandiani finalizó sexto en la final de decatlón y obtuvo uno de los seis diplomas para el país. Sumó 7.204 puntos, tras competir en 100 metros llanos, salto en largo, lanzamiento de bala, salto en alto y 400 metros llanos (primera jornada); 110 metros con vallas, lanzamiento de disco, salto con garrocha, lanzamiento de jabalina y 1.500 metros llanos (segunda). “Muy contento, salí sexto en los Juegos Universitarios. Diploma olímpico. Muchas gracias a todos los que me alentaron todo este tiempo”, escribió escuetamente, a poco de finalizar su intervención. Así, llevó su alta performance regional al primer plano mundial, tras consagrarse campeón argentino de Mayores en abril (en Concepción del Uruguay) y medallista de bronce en el Sudamericano en mayo (en Lima, Perú). Meritorios Otro de los diplomas lo conquistó el seleccionado de básquetbol masculino (séptimo puesto), que volvieron a integrar los paranaenses Matías Solanas, Erik Thomas y Ayan Núñez de Carvalho (nacido en Brasil), además del uruguayense Santiago Rimoldi (entrenador). Los otros entrerrianos olímpicos universitarios integraron juegos de conjunto. La paranaense Rosa Reinoso y la colonense Sabrina Germanier contribuyeron al undécimo lugar del seleccionado de vóleibol femenino, mientras que el basavilbasense Franco Cáceres fue protagonista en el masculino, que finalizó 15º. Misma ubicación que éste tuvo el combinado de básquetbol de mujeres, que integraron las uruguayenses Yanina Mercancini y Ornella Pag, la paranaense Sofía Chelini y la mariagrandense Maribel Barzola. Estudio y deporte Las Universiadas (mix de los términos universidad y olimpiada) son organizadas cada dos años por la Federación Internacional del Deporte Universitario (FISU) y constituyen una de las mayores concentraciones deportivas del planeta, solo superadas por los Juegos Olímpicos de verano. El saldo de la participación argentina en Nápoles 2019 fue altamente positivo y las estadísticas lo marcan: sus 252 integrantes marcaron el record de participantes en el historial y compitieron en 14 de los deportes en escena. En total, 88 instituciones de educación superior de 19 provincias estuvieron representadas. En la casa de D10S La realización de los XXX Juegos Olímpicos Universitarios en Nápoles tuvo un tinte diferente para la delegación argentina, que no dejó pasar ocasión para revalidar el fuerte vínculo con los lugareños generado tras el paso de Diego Maradona por la península del Sur italiano. El 10 argentino lideró las formaciones napolitanas que llegaron a la cima del fútbol de ese país y Europa entre 1984 y 1991 y, aunque ellos nacieron años después, no están ajenos a esos logros deportivos. En la ceremonia inaugural, el paso de la delegación Albiceleste con una réplica de la camiseta que usó Maradona en la selección de fútbol encendió la llama de sus fanáticos y desde entonces se repitió el favoritismo ante cada intervención de un argentino. Dos días después, las efemérides recordaron el 35º aniversario de la llegada de Pelusa a la tierra donde fue endiosado. Una de las más identificadas con esta valoración fue la colonense Sabrina Germanier, integrante de la selección de vóleibol, quien asimiló de modo especial su paso por la “Casa de D10S”, como definió en pleno desfile por el estadio San Paolo. Luego, en paseo por la ciudad anfitriona, la reciente campeona de la Liga Argentina con el club Xeneize, eligió uno de los murales que evoca a Maradona para posar con una camiseta del Gli Azzurri y evocar las pasiones heredadas: “Como me enseñó mi abuelo Cuquito: Argentina, Boca y el Diego”.