Belén Fedullo
[email protected] El concejal concordiense Esteban Benítez propuso, en su última sesión como edil, que Concordia tenga una ordenanza anti espera. Mediante el expediente 24476 llamó a hablar y legislar sobre las prácticas abusivas a consumidores y/o usuarios. El proyecto pasó a comisión y será discutido y tratado por los nuevos concejales que ingresan en el próximo período.
En varias provincias y ciudades del país se han sancionado leyes y ordenanzas que limitan el tiempo de espera en las entidades de cobro y pago, así como también en las filas de locales comerciales. Lo que buscan es que el usuario o cliente no pierda más tiempo del que debería en la realización de trámites ordinarios. En Concordia, de momento, aunque hubo discusiones y planteos en varias ocasiones, aún no se ha legislado sobre el tema y ahora quieren dar el primer paso.
El exceso en los tiempos de espera va en contra de artículos del Código Civil y Comercial y también de la Constitución Nacional. Es por eso que corresponde hacer denunciar o actuar de oficio en caso de conocerse lugares en los que esto suceda.
Sobre el proyecto
En diálogo con Mirador Entre Ríos, el concejal Benítez, comentó: “Básicamente el proyecto va en contra de prácticas abusivas de instituciones, tanto públicas como privadas, que dejan a los usuarios y consumidores mucho tiempo esperando en una fila o a la intemperie o cuando estando mucho tiempo no tienen baños o asientos. Lo que regula esta ordenanza es la posibilidad de establecer sanciones contra estas instituciones por ser violatorias en su accionar a artículos del Código Civil y Comercial de la Nación y por realizar prácticas abusivas”.
“Básicamente, la mayoría de las instituciones violan los artículos 1097 y 1098 del Código Civil y Comercial de la Nación, que hablan de trato digno y del trato equitativo y no discriminatorio. También va en contra del artículo 42 de la Constitución Nacional en lo que respecta a la libertad que tienen las personas de decidir sobre su tiempo. Al no informar a la fila sobre los minutos que tendrán que esperar y al disponer del tiempo del usuario están violando ese artículo”, indicó.
Lo que establece la ordenanza —según explica entre los artículos que la conforman— es la facultad de los organismos de contralor, en este caso defensa al consumidor, que podrán sancionar a las instituciones que realicen este tipo maltrato a los usuarios.
“Podrían actuar de oficio o por denuncia de parte. Puntualmente allí se pone el acento porque creo que es únicamente aplicando sanciones como se va a lograr un cambio de actitud, es decir, si tiene un costo el hacer esperar a los usuarios las acciones de este tipo no se verán repetidas”, ejemplificó el concejal.
Según está establecido en leyes a nivel nacional, el tiempo límite de espera estando una persona parada o en fila es de 30 minutos y será de hasta 60 en caso de que hubiera asientos. En todos los casos se debe informar al usuario de cuánto es la demora. Además se debe dar un número de orden y durante el tiempo de espera debe haber baños disponibles y accesibles a todo el público.
“En la ordenanza mencionamos que tampoco sería posible permanecer en filas a la intemperie, como vemos en los bancos, en donde en ocasiones hay cuadras de cola durante los días de cobro. En la medida en que esto no se sancione, las instituciones no tomarán las medidas que corresponden para cuidar al usuario, por eso es necesario que el Estado intervenga para aplicar un castigo. Aclaramos que no necesariamente se hará solo en el ámbito privado, sino también en el ámbito público”, explicó Benítez.
En detalle
—¿El proyecto nace a partir de una necesidad o lo plantearon los usuarios?
—Obviamente lo he observado innumerables veces y eso me motivó a empezar a pensar en modos para solucionarlo. También he visto como muchos municipios avanzan en legislaciones de este tipo, como el municipio de La Plata, que aplicó sanciones a entidades bancarias que primero fueron apeladas, pero luego tuvieron curso y creo que ese es un ejemplo suficiente para saber que acá también podemos hacerlo.
Creo que está dentro de la órbita municipal el poder regular esto y creo en la defensa de los derechos de los usuarios, que son poco reconocidos y es tan difícil poder hacerlos valer. Dar el instrumento legal a través de una ordenanza es una herramienta para quienes lo necesitan y en el fondo, todos lo necesitamos alguna vez. Da una sensación muy fea pasar un día de invierno o verano y ver a la intemperie en el frío o calor cómo una persona espera en una fila de una cuadra, eso se tiene que terminar.
—¿Las sanciones serán solamente económicas?
—Las sanciones que están previstas según la la ley de actuaciones de Defensa al Consumidor son económicas, pero también las hay educativas. Están destinadas al mejoramiento de la atención al público, pero lo que creo es que se tienen que empezar a aplicar. También la ordenanza prevé la obligatoriedad de poner carteles en los lugares en los que justamente hay filas largas e informar a los usuarios que tienen derecho a ser atendidos en 30 minutos en caso de que estén de pie y 60 en caso de que estén sentados. Si se aprueba la ordenanza deberán ser colocados de manera obligatoria.
—¿Es posible que la ordenanza comience a regir para el verano así se evita ver filas en el sol?
—Cerramos el período de ordenanzas y es un tema que queda para lo que viene, obviamente tengo confianza en que será aprobado y comenzará a regir. Hablé con los concejales y creo que será sujeto a análisis y perfeccionamiento.
Hay un camino hecho en otros lugares, que justamente lo he observado y veo un gran avance en materia legislativa. Cuando asumimos en 2015, en La Plata ésta ordenanza ya estaba entrando en vigencia y por lo que ví, primero fue resistido, pero luego se hizo un largo camino para poder cobrar las multas y lo lograron. Así que eso me dio la idea de poder aplicar lo mismo en Concordia siempre pensando en el ámbito privado y en el público por igual. Solamente se busca defender derechos ciudadanos, que es lo que da sentido a la ordenanza.
—¿Creés que en Concordia también habrá resistencia?
—Creo que todos reconocemos que existe un maltrato a los clientes y usuarios, por eso es necesario dejar de mirar al costado, pero en la medida en que no tengan sanciones y tengan una actitud monopólica, ya que no se puede elegir el agente de cobro para los empleados estatales por ejemplo, más necesario será el control del Estado y la aplicación de sanciones. Hasta que no demos el paso de hacer lo que la comunidad reclama y necesita, las entidades no cambiarán esta costumbre. Es eso, una costumbre, claro que será resistido como casi todo lo que se ha legislado en esa materia, pero cuando el Estado toma la posta las cosas se ponen un poco más sencillas.
Existen muchas herramientas para que, como dicen las frases hechas, el cliente tenga la razón y justamente en el caso de la espera siempre la tiene, así que por más que haya resistencia tarde o temprano se cambiarán los modos y haremos del respeto por el tiempo del otro una costumbre.
