Ignacio Pellizzón
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La crisis económica va pegando cada vez más fuerte en instituciones que son pilares de la sociedad, como los clubes de barrio de Rosario. “Disculpame, pero no puedo pagar” es una de las frases más comunes que está escuchando últimamente la presidenta de Atalaya.

Atalaya es uno de los clubes de barrio que se encuentran en pleno corazón de República de La Sexta, en calle Juan Manuel de Rosas 2.555. Al igual que otras instituciones de la zona, sus socios son personas a las que nos les falta nada, pero tampoco les sobra.

Cuando el bolsillo aprieta, “lo primero que tienden a hacer las personas es reducir los gastos superfluos o extras, en pos de equilibrar la economía familiar y, claramente, los clubes son un gasto mensual que, producto de lo que se está viviendo, muchos socios deciden dejar de estar al día”, explicó a Mirador Provincial, la dirigente de Atalaya, Sol Nieto.

Las boletas de luz y gas en el club oscilan entre los $60 mil y $70 mil mensuales, “y eso que todavía no climatizamos la pileta para el invierno”, agregó Nieto, quien está muy preocupada por las tarifas que siguen aumentando y no le permiten mantener las finanzas equilibradas, al punto de que “estamos pensando en abrir la pileta menos días para que no gastemos tanto gas durante el invierno”, mencionó la presidenta.

Sol Nieto contó que, si bien durante 2018 no hubo muchas personas que se desasociaron, “sí empezaron a decirnos: ‘Disculpame, pero no puedo pagar’; entonces, uno los escucha y trata de ayudarlos y, así, se van generando moras en las cuotas que nosotros necesitamos para pagar los impuestos, pero en este lío estamos inmersos todos y tratamos de apoyarnos”.

Atalaya fue uno de los clubes que estuvo al borde de que le cortaran la luz por no poder pagarla hace un par de años. Desde ese momento, se convirtió en uno de los tantos clubes que resisten los embates de la crisis, que golpea cada vez más duro y “se hace insostenible, por momentos, seguir así”, aseguró Nieto y cerró: “Vamos a seguir luchando, pero así nos están matando”.

Ayuda, pero no alcanza
El gobierno de la Provincia de Santa Fe subsidió durante 2018 en servicios de luz y agua a 1.100 clubes, invirtiendo más de $ 45 millones para reducir el impacto de las tarifas en las instituciones deportivas de toda la provincia. Estrictamente se ayudó con el 50% del consumo de luz y agua (hasta 5.000 centímetros cúbicos).

La quita de subsidios a los servicios por parte de Nación y el sustancial aumento de tarifas que provocó este hecho, resultó en que el gobierno provincial modificara y mejorara un decreto existente (1651/16) para ampliar los beneficios a todos los clubes de Santa Fe, sin importar cantidad de socios o nivel de consumo.

“Desde el gobierno provincial venimos trabajando a través de distintas acciones concretas para fortalecer el trabajo institucional vital que tienen los clubes en los barrios, comunidades y localidades de todo el territorio de la provincia. Por eso impulsamos diferentes iniciativas y programas en los clubes que, solo durante 2018, significaron una inversión de $ 160 millones”, destacó a este medio el ministro de Desarrollo Social, Jorge Álvarez.

Son varios los programas provinciales que tienen como objetivo financiar obras de infraestructura o compra de equipamiento que mejore y amplíe las posibilidades de todos los clubes de la provincia.

Además de subsidiar hasta en un 50% los servicios de luz y agua, se destaca el plan Abre, en las ciudades de Rosario, Santa Fe, Villa Gobernador Gálvez, Pérez y Santo Tomé, donde más de 100 clubes pudieron llevar adelante grandes proyectos de infraestructura desde el 2015 a la actualidad.

Los clubes reciben, además, apoyo desde Lotería de Santa Fe y del Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado para eventos deportivos y otras actividades; y desde la secretaria de Desarrollo Deportivo se realiza asesoramiento legal y técnico para acompañarlos en la normalización y actualización de papelería.

Subsidio

Para acceder al beneficio, que llega desagregado directamente en la factura, es necesario tener la personería jurídica y estar dentro del censo que realizó el Ministerio de Desarrollo Social provincial junto a la Universidad Nacional de Rosario y la Universidad Nacional del Litoral, el cual está abierto permanentemente.