Rodrigo Pretto


Los Bomberos Voluntarios de la ciudad de Sastre, cabecera del departamento San Martín, vuelven a ser noticia. Y no es casualidad que cada gestión que asume al gobierno provincial lo destaque y coloque como uno de los más importantes de Santa Fe. A las constantes obras en su cuartel, con mejoras y ampliaciones, la renovación de herramientas y equipos, ahora fueron por un proyecto más ambicioso: cambiarán una de sus autobombas americanas por otra 20 años más nueva que compraron directamente en Estados Unidos.

“Si no pasa nada, entre 60 y 90 días contaremos con el nuevo vehículo”, se ilusionó Matías Reccia, presidente de la institución, en contacto con este medio.

Pasaron 14 años de la adquisición de la autobomba americana Land Pierce modelo 1989 que había llegado a Sastre en 2008, importada por Bomberos Voluntarios de Sastre desde los Estados Unidos. “Estaba destinada a incendios de vehículos y estructurales -viviendas y fábricas- por su capacidad de bomba. La utilizamos en siniestros sobre molinos de cereales o frigoríficos, por citar algunos ejemplos”, recordó Darío Almada, jefe del cuerpo activo.

Pero desde hace un tiempo, en el cuartel de la cabecera del departamento San Martín comenzaron a amasar un proyecto ambicioso para dar un salto de calidad. Así, pusieron en marcha su intención de renovar dicha unidad. “Empezamos con las tareas para generar y gestionar recursos. Y cómo poseemos ciertos beneficios con precios especiales para adquirir herramientas y nos encontramos exentos de impuestos a la hora de importar productos, decidimos dar el paso. Pusimos en venta este camión, recibimos varias ofertas y ahora logramos comprar una unidad 2009 mucho más moderna y equipada”, remarcó orgulloso Reccia.

Con la nueva compra, el cuartel sastrense saltará 20 modelos con su flamante autobomba, contando esta última con mayor tecnología y equipamiento. La nueva unidad se trata de un camión Pierce dotado con un tanque de 2.000 litros de agua, equipos de espuma, ocho grupos de respiración autónoma con sus respectivos tubos, monitor y generador fijo.

En estos días concluirán la documentación para entregar en entidades bancarias y en las oficinas de Comercio Exterior. Finalizado eso, que será esta semana, se realizará la transferencia y, a mediados de octubre, saldrá el embarque desde Estados Unidos para tocar tierras santafesinas en el lapso de entre dos y tres meses.

“Hacemos un seguimiento del barco que trae la unidad. Una vez arribado, comienzan las gestiones ante la Aduana por parte del despachante para luego liberarlo”, explicó el jefe del cuerpo activo. Desde ese momento, Bomberos ya tendrá la posibilidad de viajar a puerto a retirarlo. “Antes de traerlo a Sastre, lo vamos a llevar a la vecina localidad de María Juana para que lo revisen en taller y, a partir de ahí, quedará operativo”, indicaron.

Así, ante cada siniestro, el cuerpo activo acudirá con otras unidades disponibles en el cuartel hasta la llegada de la nueva autobomba. “Estamos acomodando todas las herramientas que llevábamos arriba del Lance, que eran muchas”, contaron.

Destino Villa Allende

La vieja autobomba fue vendida a un Cuartel de Bomberos Voluntarios de Villa Allende, provincia de Córdoba, y en estos momentos se encuentra fuera de servicio aguardando su traslado. Ahora, desde la institución sastrense avanzan con todos los trámites de rigor para la próxima transferencia.

Para la nueva unidad, los fondos que rondaron los $ 11 millones salieron de la venta de la actual unidad, de otro vehículo transferido en el último tiempo, más recursos que llegaron del gobierno provincial y de la propia caja de la institución.