Arrebato musical

Paseo lanza su nuevo disco titulado El Palacio de la Burla

La banda presenta su nuevo álbum titulado El Palacio de la Burla, que aborda diversos géneros como rap, funk, techno, candombe, folklore. El disco nos invita a burlarnos de nosotros mismos, manteniendo el lema de “lo ridículo tiene que cambiar”.
05-11-2022 | 9:34 |

“El Palacio es aquel hogar que nos invitan a conocer estos personajes, simbolizados por máscaras, muecas delirantes o melancólicas” asegura Tomás Contreras.
Foto:Gentileza.
Gisela Mesa


El grupo musical e interdisciplinar Paseo acaba de lanzar su nuevo disco titulado El Palacio de la Burla. El mismo nos invita a burlarnos de nosotros mismos, manteniendo el lema de “lo ridículo tiene que cambiar”. Toma a la risa como algo sanador y transformador. En el mismo se pueden encontrar géneros muy variados como el rap, funk, techno, candombe, folklore, reggaetón, entre otras sonoridades. Sus letras son relatos que narran historias de amor y desamor, de superación personal, de aprendizaje y sentimientos vividos.

Las 13 canciones que componen al Palacio de la Burla fueron lanzadas individualmente una por mes desde el año pasado, y completan el álbum al final de este año. Cada portada de los sencillos cuenta con un personaje de este palacio, donde vive y habita. Una criatura que se muestra absurda y ridícula. Están dibujados y animados digitalmente y cada uno de ellos simboliza algún estado anímico del alma, como ser la melancolía, la templanza, la mugre de la rabia, la magia del error, entre otras.

A cada integrante de la banda se le compuso un personaje individual, con su estética, vestuario y caracterización de su personalidad. Suelen tener atributos mágicos y diversos entre sí. Por ejemplo está el Rufián Melancólico, que puede desdoblar al tiempo y a la nostalgia a su voluntad. El Brujo que nos condena a la magia del error. El Conde Salamandra con el poder del fuego primigenio y la Cetácea que habita las profundidades marinas del Palacio de la Burla. Estos son algunos ejemplos detallados de las caracterizaciones de los personajes reales interpretados por les músicos.

El proceso de diseño, construcción y composición escénica nace a raíz de la necesidad de unificar criterios estéticos que reflejen el corazón del proyecto. Sus presentaciones toman recursos escénicos como el circo y el teatro para potenciar la experiencia y representar al palacio. Por lo que sus shows suelen ser interdisciplinarios, al haber monólogos teatrales, performances y danza. Es en ésta línea que surge la cualidad barroca de la puesta en escena que conjuga una serie de decisiones estéticas integradas por el diseño de luces y visuales, escenografía, caracterización e interpretación de les músicos.

Creando una atmósfera y narrativa particular para cada espectáculo conformado por dos formatos distintos, conectados entre sí a través de un concepto transversal que define el tratamiento artístico de cada uno: la burla. Ella se encarga de distorsionar el cuadro y otorgarle nuevas perspectivas a la estructura convencional de un espectáculo, impactando críticamente en la mirada de les espectadores.

El Palacio de la Burla
-Hablennos de su nuevo álbum titulado El Palacio de la Burla, ¿cómo nació esta idea?

-A raíz de la composición de las 13 canciones que iban a conformar el álbum, aún nos quedaba encontrar un concepto que aúne todas las narrativas y melodías. Nuestro tecladista, Tomás Contreras, es dibujante y venía trabajando una estética de personajes burlones y caricaturescos, o fellinianos, que hasta el momento nada tenían que ver con la música. Cuando estábamos por terminar de mezclar el primer single “Ya me di cuenta”, nos preguntamos qué diseño gráfico íbamos a utilizar para simbolizar nuestra música. En ese momento, en largos debates y reuniones, llegamos a la conclusión ineludible de que la producción gráfica tenía que ser tan original como la música. Por eso es que elegimos los diseños de Tomás, que casualmente o no, se hicieron bajo el mismo techo, en el barrio de San Telmo, donde los tres fundadores de la banda, Tomás Contreras, Tomás Blanda y Dario Boryszanski, dieron vida al proyecto.

El Palacio de la Burla era el concepto gráfico que envolvía a todos estos personajes nacidos del desesperado trazo de Tomás. Era el hábitat, la casa, la intemperie y lo caótico donde nacieron y viven estos personajes. Parecía coincidencia pero tanto los dibujos como las letras y la música se desarrollaron para generar un concepto completo. El Palacio es aquel hogar que nos invita a conocer estos personajes, simbolizados por máscaras, muecas delirantes o melancólicas. Se fusionaron con el mensaje de las letras, caracterizadas por estados anímicos antagónicos como lo es el espíritu, que se disfraza de máscaras constantemente para manifestarse a la luz del día.

Ese es el verdadero mensaje del Palacio de la Burla, un mensaje que nos invita a burlarnos de las máscaras para poder reconocerlas y trascenderlas, para superar los ánimos y aprendizajes del alma. Como dice nuestro primer single Ya me di cuenta: “Transformo los días con mi rostro”, una clara imagen de la transformación y el devenir de la máscara. El Palacio nos invita a burlarnos de nosotros mismos, manteniendo el lema de “lo ridículo tiene que cambiar”, aquel ridículo que nos impide avanzar o creer en nosotros.

-¿Cómo fueron los inicios de Paseo?

-El proyecto empezó a partir de la mudanza de los tres fundadores hacia el barrio de San Telmo. Todos atravesados por una misma situación de ruptura amorosa y la necesidad de disponer de un lugar para crear y seguir desarrollando la música, para sanar sus respectivas situaciones afectivas y canalizar todo su dolor a través de la composición. Allí engendraron sutilmente la energía creativa que caracteriza a la casa en la cual vivieron en 2019 y 2020, y la cual sigue siendo portal de creatividad para muchos artistas. El primer año la banda tenía un estilo más típico y arrabalero, abarcando el tango y el folklore. Luego de la gira en verano de 2020 en el sur del país, en la que la banda viaja y se nutre de escuchar artistas pop, indie, trap y reguetón, dan un giro de estética hacia algo más moderno y actual. Al volver de la gira a Buenos Aires, se decretó cuarentena obligatoria y a los tres los encontraba bajo el mismo techo y atónitos. En poco tiempo las canciones que formarían parte del álbum ya estaban diseñadas, en las noches de ensayos nocturnos de composición y fusión de ideas.

-¿Cuesta acceder al mercado musical?

-Claro que sí. Hay mucha oferta y muchos empresarios ocupando grandes lugares hace tiempo en los medios principales que mueven a la gente…y es solo la otra parte de la influencia en diarios, tv, radios, cine y publicidades que enferman a la gente de rollos y necesidades. Contra eso es muy difícil hacerse lugar, donde la guita es lo que define tu lugar en la escena contradiciendo muchas veces con la calidad artística y completamente desfasada.

-¿Cómo es la composición de las letras?

-Es muy variada, pero la mayoría de las veces parten de momentos de hilar a solas escribiendo, y después llevadas a la banda que la reinterpreta y las distribuye de formas inimaginadas, con variaciones melódicas y rítmicas y experimentadas bajo ensambles una y otra vez. A veces quien escribe la barra no es quien la canta y viceversa. Estas infinitas combinaciones entre Daro y Tom permitieron crear la voz narrativa de Paseo. Una voz que cualquier cantante del grupo puede encarnar y servir, a las imágenes, trasmutaciones y emociones de cada personaje-tema. Por eso también vemos a los géneros musicales como elemento para darle mayor alcance y efecto a las palabras y discursos. Los sonidos dándole vibración y cuerpo al lenguaje y a los personajes.

-¿Su tipo de música favorece de alguna manera la idea de distenderse de la realidad y poder reírse de uno mismo?

-No creemos que favorezca a distenderse de la realidad, sino a afectarla y modificarla mediante el poder de la risa y lo ridículo como algo poderoso y transformador. Algunos sentirán que la burla es algo humillante o despectivo, o hay quienes creen necesario una víctima. Nosotros no la usamos así, y creemos que parte de trascender es poder ser objeto de nuestra propia risa y así conciliarnos con nosotros mismos, igualarnos, despersonalizarnos para conocer nuestra propia humildad y sencillez, y derribar la frontera del pedestal hecho por un ego que no nos permitiría vernos ridículamente.

-¿Cómo ven el sector musical en estos momentos?

-Muy variado y rico. Hay muchos artistas interesantes y hermosos que descubrir y siempre los habrá. Estamos en una era de fácil acceso a trabajos under, comerciales, profesionales o amateur por descubrir. Todos esperando generarnos cosas y nosotros seducidos, los buscamos
toda la vida, para alimentarnos, celebrar e invocar. Lo triste es lo que pasa con las leyes que no nos abrazan a los artistas, o la distribución de la música y todas las chanchadas con las que nos toca lidiar día a día con una profesión totalmente desprotegida. Mantenerse en pie como productor de contenido artístico independiente, siendo autónomo y luchando por un mensaje genuino en un mercado hostil y banal no es fácil. La banda se nutre de mucho arte callejero y entre otras cosas, ese un pilar clave de financiación que nos permite tener las riendas y el timón de nuestro rumbo.

-La inmediatez, lo vendible o prever lo que le va a gustar al seguidor, ¿se resiente el arte?

-Sí que puede si es forzado. El arte identifica cuando hay una entrega verdadera o interesa, y la gente también. Cualquier delimitación puede ser inspiradora en la mente de un artista. O sea que si hay reglas o tendencias en el mercado, nos podemos servir de ellas, de lo instalado, jugar con elementos actuales para desvirtuarlos del mensaje hegemónico y repetitivo al que nos sumergen los artistas mainstream, producto de fácil consumo. Mucho de la música popular tiene la dosificación y amalgama de elementos justos para también hacer de las canciones no solo algo comercial, sino de fácil acceso y una llegada irresistible. Creemos que se puede hacer buena música, divertida y reflexiva, dentro de las reglas de lo que consume la gente, sin militar un mensaje vanidoso ni aparente.

-¿Cómo es la dinámica de sus shows? Dicen que hay teatro, monólogos, danza…

-Los vivos son una experiencia aparte del disco, mucho más efervescente y alocada. Al encarnar los personajes del palacio, cada integrante sufre una metamorfosis, gracias al trabajo de maquillaje, vestuario y escena a cargo de la directora de escena y arte Angie Zapata, la asistencia de Bernarda Parra y la maquilladora Mica Watson. Así es que a partir de este personaje es más fácil narrar las historias, e interpretarlas desde un monstruo, una amplificación de alguna ínfima parte de cada uno, y salen a convidarnos de las habitaciones de este palacio, llenas de luz y sombra donde Conde Salamanca, La muerte o Domingo Perenne, El brujo, La cetácea, El rufián melancólico, La luna, El sol, y la lechuza meteorológica nos revelan mensajes encriptados bajo los candelabros de este palacio, de este show. Hay fechas en las que nosotros invitamos al público a nuestra casa, a un paseo completo por esta experiencia. Y para festivales, conciertos más breves, llevamos otro concierto en el cual migramos del palacio. Este es mucho más potente y conciso, que el otro que guarda mayores sutilezas y admite recónditos monstruitos e historias de desaire.

-¿Dónde quedó la idea del amor en tiempos de crisis?

-El amor es ineludible, y una fuerza que se expande. Habita siempre y en todos los contextos socio- políticos. El amor es un acontecimiento político. Por eso en momentos de crisis, además de padecer los devenires del destino es cuando más comprensivos tenemos que ser. Nosotros aprendimos a querernos y a detestarnos mucho. Convivíamos en la misma casa, con una pandemia que nos envolvía a nosotros y al mundo. Pero el choque nos formó. Sin miedo al cruce de ideas incómodas que logró nutrir y reafirmar nuestro vínculo. El amor muestra lo más vulnerable en nosotros, miedos e inseguridades y eso es justamente su piedra filosofal, su herramienta de transformación. Une se muestra vulnerable especialmente frente a quien ama, y eso es porque permitimos mostrar nuestra mugre sabiendo que de la otra vereda estarán los brazos tendidos. De todas estas aventuras, en lo que se está transformando Paseo es la más grande de ellas, una productora independiente con potencial expansivo, tanto en cantidad y calidad de artistas de diferentes disciplinas.

-¿Qué es lo que viene para este 2023?

-Este 2023 vamos a empezar con una segunda gira en el sur por Bariloche y El Bolsón, presentándonos en teatros y en la carpa de circo. La banda ya está encarando una dinámica cooperativista, dividida en áreas (prod. De fechas, escénica, musical, redes, etc.) Y asambleas generales. En el transcurso de la grabación del disco fue creciendo el proyecto en cantidad de músicos que se sumaron a grabar, y de otras disciplinas como la danza, el teatro y el diseño audiovisual que pasaron a formar parte de su esencia, y, en este momento, de todas las tomas de decisiones de cada una de sus áreas.



Temas: EN RESUMEN 
Mirador Provincial en

Además tenés que saber:


+ Noticias

Unión: 117 años de fidelidad y sueños inquebrantables

Una historia de amor que nace en la cuna y no tiene vencimiento. Defender al club y ese lugar de privilegio en Primera es una obligación que excede divisiones internas, banderías políticas u ocasionales disconformismos.



Dejanos tu Comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
En Portada / Santa Fe
En Portada / Entre Ríos