Víctor Ludi
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El día tan esperado está cada vez más cerca. El debut como boxeadora profesional de Cinthia González está a la vuelta de la esquina, por lo que ella continúa con su puesta a punto para llegar en óptimas condiciones a este importante compromiso. La Camionera tendrá su estreno en el deporte rentado el viernes 18 de noviembre, ante la mendocina Rocío Gordillo, con quien se medirá a en una pelea pautada a cuatro rounds, en la categoría Supergallo.

La velada se desarrollará en el Camping “15 de Diciembre” del Sindicato de Choferes de Camiones de Entre Ríos, institución a la que González representa, lo cual será un condimento extra en el aspecto emocional.

La pupila de Wenceslao Mansilla afronta este desafío entrenándose en tres turnos diarios. Luego de finalizar su jornada preparatoria, Mirador Entre Ríos habló con la pugilista, quien dio sus sensaciones sobre lo que se le viene.

-Estoy muy ansiosa y no veo las horas de subir al ring. Con mi equipo venimos trabajando desde hace mucho tiempo, con una carrera amateur de casi siete años, y decidí a pasarme a profesional. Estoy enfocada en trabajar duramente y dar el ciento por ciento de mí para llegar de la mejor manera a la velada de 18 de noviembre, cuando me enfrentaré con una rival muy dura. Quiero demostrar todo lo que trabajé estos meses.

- ¿La conoces a Rocío Gordillo?

-La conozco del seleccionado, pero nunca peleamos. Será una pelea áspera, porque ambas tenemos características similares y nos gusta ir al frente. Teníamos ganas de enfrentarnos desde febrero, cuando las dos todavía éramos amateurs, pero no se dio. Entre nosotras hay muy buena onda, pero tenemos la pica de querer pelear, de medirnos. Va a ser un combate duro y será una linda propuesta para el público de boxeo.

- ¿Es especial que tu debut sea en Camioneros, por lo ligada que estás a la institución?

-Camioneros es una gran familia. Me apoyaron desde un principio y cuando necesité una mano siempre estuvieron. Tanto el club como el sindicato apoyan mucho a sus afiliados y a sus deportistas. Debutar en Paraná, en el camping de Camioneros, con mi gente es un sueño. Si llego a ganar por nocaut sería la noche perfecta. Espero y tengo fe de que el clima nos va a acompañar.

- ¿Es distinta tu preparación con respecto a lo que venías haciendo antes?

-La preparación fue distinta. Antes metía un turno o dos de boxeo por día y no trotaba todos los días, sino que especulaba de acuerdo a si tenía peleas programadas. La nutrición y la suplementación también varió. Ahora trabajé con un plan bien estudiado que Wency (Mansilla), a pesar de que estaba de viaje, planificó. Yo tenía que cumplir lo que él me había asignado. Ahora se vienen desafíos más difíciles, en los que el riesgo es mayor ya que los guantes son más chicos y no usaré más cabezal, por lo que tengo que estar bien preparada física y mentalmente.

- ¿Cómo te sentiste estos meses que no lo tuviste a tu entrenador cerca, teniendo en cuenta que te preparabas para el debut?

-La cabeza del equipo es Wenceslao. Él dejó a cargo a Alejandro (Coronel) y Mateo (Villagra) como nuestros entrenadores. No sentí su ausencia porque nos comunicábamos constantemente y los chicos hicieron un muy buen trabajo, pero ahora tengo una sensación de que necesito que esté en mi rincón. Por suerte él regresa de Estados Unidos y estará conmigo.

- ¿La fecha se pautó sabiendo que Mansilla ya volvía?

-Sabía antes de mandar los papeles para la licencia, en julio, que tenía una fecha en noviembre o diciembre. Una vez que los mandamos se confirmó la fecha, pero no quisimos hacerla pública todavía por si había algún problema de demora con los papeles y eso. Si él no hubiera estado yo iba a pelear igual, pero no era lo mismo que el técnico con el que trabajé desde mi primera pelea no estuviera en mi debut profesional.

-Ya casi estás en categoría y faltan unos días para la pelea. ¿Es difícil mantener el peso?

-Una vez que llegas al peso, mantenerlo es igual o más difícil que bajarlo. Pero cuando uno tiene un objetivo y está mentalizado en eso, se trabaja a conciencia para que no sea un problema. Si el sueño es subirse al ring, no tiene que importarte lo que se te ponga adelante.

-Años atrás te acercaste al boxeo para bajar de peso y estás a días de ser profesional. ¿Lo hubieras imaginado?

-La pasión por el boxeo la tuve siempre. Ningún deporte me llenó tanto como el boxeo. Cuando arranqué fue para bajar de peso, pero una vez que me calcé los guantes le dije a Wency que quería pelear. Pero de ahí a llegar a hacer la primera pelea faltaba muchísimo, por lo que realicé un proceso de adaptación y aprendizaje. Siempre estuve al lado de Wenceslao y, si bien tuve obstáculos en mi camino, pude superarlos. Estoy segura de que andaré bien en el campo rentado y llegaré a la meta que me propuse.

- ¿Cuál es esa meta?

-Mi meta es llegar a ser campeona del mundo. Sé que no será fácil, por lo que tendré que trabajar a consciencia y prepararme de la mejor manera. En este deporte muchas veces la constancia vence al talento. Podes tener mucho talento, pero si no te entrenas como se debe existe las posibilidades de que quedes en el camino.

La familia

Cinthia formó una familia antes de iniciarse en el deporte de los puños. Está casada y tiene dos hijos, por lo que debe organizar bien sus días para que todo funcione bien, tanto a nivel familiar como deportivo. “Mis gurises están acostumbrados a mi vida como boxeadora, para ellos es normal que esté mucho tiempo afuera entrenando o comiendo distinto por la dieta. Mi marido me apoya y ayuda muchísimo. En mi vida lo principal es el apoyo de mi familia, lo cual siento constantemente. Por ahí el día a día se complica, porque es un rompecabezas que tiene que encajar perfecto o se me despelota todo, pero es un esfuerzo que vale la pena. Ahora que seré profesional, quiero darle cada peso que gane sobre el ring a mis hijos. Se vienen los regalos para ellos, que hacen un sacrificio enorme junto a mí y son mis pilares”, contó.

Se ve como DT

Paralelamente a su carrera, González está incursionando como entrenadora, dando clases de boxeo en la sede del Club Atlético Social y Deportivo Camioneros Entre Ríos y en el Centro Marcial Sin Límite. Al respecto, sostuvo: “Mi idea es seguir ligada al boxeo hasta el final de mi vida, porque siempre seré feliz en un gimnasio. Quiero desarrollar mi carrera profesional de la mejor manera posible y, una vez que esa etapa culmine, seguir como entrenadora”.