Foto:Gentileza.
Un pequeño ataúd presuntamente de un niño fallecido en noviembre de 2022, fue encontrado junto a una virgen ubicada en el ingreso a la ciudad de Rufino, por Ruta Nacional 33. El macabro hallazgo se registró en la noche del jueves, y en el lugar trabajó personal de la Agencia de Investigación Criminal siguiendo instrucciones de la fiscal Rafaela Florit.
Fuentes consultadas por El Litoral confirmaron el hecho y lo calificaron como un episodio “desagradable”. Al mismo tiempo indicaron que están constatando si el pequeño ataúd fue robado del cementerio de Rufino.
La llamada telefónica ingresó a sede policial a las 23:45 horas del jueves. Los agentes se dirigieron en forma inmediata al acceso que tiene la ciudad por Ruta 33.
Una fuente del caso precisó que personal del Comando Radioeléctrico fue el primero que observó sobre los escalones del sitio donde se encontraba una virgen, un ataúd pequeño o urna para cenizas, con su respectiva tapa y con una cruz.
Es de material platico de unos 20 centímetros de largo por 5 centímetros de ancho de color marrón oscuro con una chapa metálica impresa en uno de lados, con el nombre en de la persona fallecida y la fecha 27/11/22.
A esto se suma una inscripción con la frase “que en paz descanses”.
La fiscal del caso solicitó relevamiento de cámaras en inmediaciones del lugar, y que el sumariante en turno realice entrevista con el encargado del cementerio local a los fines de determinar si dicho cajón pertenece a algún difunto de Rufino.
Posteriormente personal policial procedió a examinar el cajón, constatado que el mismo estaba vacío.
Fuentes consultadas por El Litoral confirmaron el hecho y lo calificaron como un episodio “desagradable”. Al mismo tiempo indicaron que están constatando si el pequeño ataúd fue robado del cementerio de Rufino.
La llamada telefónica ingresó a sede policial a las 23:45 horas del jueves. Los agentes se dirigieron en forma inmediata al acceso que tiene la ciudad por Ruta 33.
Una fuente del caso precisó que personal del Comando Radioeléctrico fue el primero que observó sobre los escalones del sitio donde se encontraba una virgen, un ataúd pequeño o urna para cenizas, con su respectiva tapa y con una cruz.
Es de material platico de unos 20 centímetros de largo por 5 centímetros de ancho de color marrón oscuro con una chapa metálica impresa en uno de lados, con el nombre en de la persona fallecida y la fecha 27/11/22.
A esto se suma una inscripción con la frase “que en paz descanses”.
La fiscal del caso solicitó relevamiento de cámaras en inmediaciones del lugar, y que el sumariante en turno realice entrevista con el encargado del cementerio local a los fines de determinar si dicho cajón pertenece a algún difunto de Rufino.
Posteriormente personal policial procedió a examinar el cajón, constatado que el mismo estaba vacío.
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