El 25 de febrero de 2023 quedó marcado para siempre en los calendarios de concordienses y salteños. Después de al menos dos décadas jugadores “leyenda” revivieron el clásico internacional que une las dos orillas.

En el año 1900, con el comienzo del Siglo XX comenzaron los encuentros entre deportistas argentinos y uruguayos. En aquel momento decidieron formar una selección con los mejores de Concordia y otra con los mejores de Salto para enfrentarse entre sí, poniendo en juego una copa internacional.

En el primer partido jugaron el Concordia Athletic Club y Defensores de Salto en tierras uruguayas, y el trofeo viajó a Argentina. Luego hubo varios encuentros durante los años que siguieron, uno, incluso, fue en 1902 por las fiestas de la coronación inglesa.

Se volvió una tradición y en las décadas siguientes no solo combinados de futbolistas en actividad se enfrentaban, sino que también personal de hospitales, escuelas o empresas de ambas márgenes del río Uruguay se medían en una cancha de 11.

La camaradería y organización de partidos llegó hasta 1998. Preparándose para el nuevo siglo, y haciendo más fuertes sus ligas, los jugadores dejaron de encontrarse. Pero con el comienzo del 2023 eso cambió y fueron los veteranos mayores de 50 años los que decidieron revivir ese clásico.

El estadio designado fue el Parque Mitre, la cancha de Libertad para quienes asisten asiduamente. Allí se vieron las caras nuevamente los combinados de ambas ciudades en un partido en el que no faltó la diversión, camaradería y el buen juego.
Del lado concordiense se distinguieron Eduardo Burruchaga, Marcelo Pavese, Carlos Coitiño, Ramón Quiróz, Sergio Barrios, Luis Fernández, Roberto Pellegrini, Cristian Riquelme y Alfredo Benítez, que aportaron gambeta, toques y goles; aunque fueron más de 22 los que pasaron por cancha, en dos tiempos.

Por el lado de Salto, Marcelo Soria, que anotó en dos oportunidades, se llevó las miradas, pero también ofrecieron buen juego Claudio Valverde, Gustavo Legorburu, Miguel Araujo, José Machado, Víctor Rodríguez y Carlos Machado.

“El cuerpo tiene memoria”

Como si el tiempo no hubiera pasado, Concordia presentó, a pesar de los cambios, equipos ordenados defensivamente y dinámicos en ataque. Salto, en cambio, salió a esperar y cedió la iniciativa a los locales.

El primer tiempo terminó con los concordienses en ventaja por 1 a 0. El gol llegó tras una buena jugada entre Coitiño y Barrios, quien dio un exquisito pase para asistir a Pellegini que le pegó de puntín y dejó sin opciones al arquero salteño.

El segundo tiempo llegó cargado de goles y emociones. A los 11 minutos, tras un quite de José Suárez, Cristian Riquelme dio una asistencia a Luis Fernández que hizo el segundo para Concordia. A los 24, con un exquisito tiro libre, Marcelo Soria logró el descuento para los visitantes, pero no duró mucho la alegría porque Alfredo Benítez a los 27, tras una asistencia de Fernández hizo el tercero para Concordia.

Salto presentó un equipo competitivo, aunque faltaron figuras. 

Aunque jugaron solo 30 minutos, el árbitro adicionó y a los 31 nuevamente Benítez convirtió el 4 a 1 para Concordia. Cuando moría el encuentro, Soria se iba solo hacia el arco y le cometieron una falta dentro del área. Intercambió el penal por gol y el encuentro terminó 4 a 2.

Cristian Riquelme, jugador que pasó por varios clubes de Concordia y se sumó ahora al representativo local frente a Salto, dijo post partido: “Para nosotros es una alegría ser parte de este momento. Este tipo de reconocimientos nos vienen bien y además jugar contra otros jugadores de nuestra edad también”.

Acerca de cómo vivió el encuentro y cómo se sintió dentro de una cancha que lo vio ser campeón cuando era jugador de Liga, mencionó: “Lo vivimos intensamente porque nosotros jugamos sabiendo que hay una copa. Usualmente nos encontramos y ahora damos un puntapié para que se animen también los más jóvenes. Si bien jugamos casi todos los fines de semana con los veteranos, esta cancha es grande y nos cansamos un poco más, pero el cuerpo tiene memoria y a eso lo demostramos”.

Alfredo Suárez, otra de las figuras de Concordia, habló de las emociones que sintieron. “Antes de entrar nos emocionamos. Nosotros amamos nuestra ciudad y siempre estuvimos ligados al fútbol. Ahora seguimos en la competencia de veteranos, y lo hacemos porque la pelota nos da ganas de vivir”, expresó.

En tanto, Marcelo Soria, la figura de Salto dijo. “Nosotros nos conocemos, nos llevamos bien y queríamos darnos y darle a la gente este encuentro. Nos divertimos mucho y esto no va a quedar así, queremos la revancha y los vamos a esperar en Salto para volver a jugar por otra copa”, aseguró.

Luego del encuentro, los dos equipos terminaron la noche con una cena en la que aprovecharon para formalizar la invitación y poner algunas fechas tentativas para el encuentro de revancha, que tendrá lugar en Salto en los próximos meses.

Homenajes y emoción

Además de la entrega de premios para quienes participaron, los organizadores del evento reconocieron a Víctor Godoy Suárez, jugador uruguayo que formó parte de Ferrocarril en la década del 70 y Santiago “Chanta” Fernández, que tras un exitoso paso por Chaco For Ever -en el que jugó en la máxima categoría de AFA e hizo un gol a San Lorenzo- también integró el plantel de Ferrocarril.

También distinguieron a Hugo “Costilla” Pérez y José “Ratón” Sosa, que formaron parte de Juventud Unida de Benito Legerén durante el Regional 1971/72 y jugaron por el ascenso ante Unión de Santa Fe, con Leopoldo Luque entre sus jugadores.
Oscar “Pata” Piñeyro, DT del equipo y organizador del evento dijo a MIRADOR ENTRE RIOS: “Siento mucha emoción.

Además del buen juego de los jugadores +50, estos homenajes eran algo que Concordia le debía a estas leyendas. Hacerlo en una cancha con tanta historia fue un plus”.