La salida de alumnos de una escuela de zona sur de Rosario, que habían asistido a una clase de educación física, se vio alterada por el paso de varias personas en motos, que iban intercambiando disparos, sin importarle nada. El hecho generó pánico entre los chicos, que volvieron a ingresar al establecimiento educativo ubicado en un extremo de barrio Tablada. Afortunadamente no hubo heridos.

Los hechos de violencia no dejan de sorprender en la ciudad gobernada por Pablo Javkin. Poco después de las 16 del jueves 13 de abril, varios alumnos salían de la escuela N° 114 ‘Justo Deheza’, ubicada sobre bulevar Seguí al 100 (a metros de avenida Grandoli). Pero debieron volver rápidamente a ingresar al edificio ya que por la calle pasaron varias personas tiroteándose.
 

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Los alumnos habían asistido a una clase de educación física, dictada en contra turno. Algunos entraron en la escuela y otros en el Centro de Capacitación Laboral para Adultos (Cecla), ubicado a pocos metros.

La escuela está emplazada en una zona que ya ha sido escenario de múltiples hechos de violencia, incluidos varios homicidios. Si bien en esta oportunidad no se registraron heridos, algo a lo que la comunidad rosarina se ha acostumbrado a poner como ‘lo bueno’ de lo que ocurre en forma cotidiana en cualquier lugar de la ciudad, el episodio generó gran preocupación en la comunidad educativa y en quienes residen en las inmediaciones.

A esa altura de bulevar Seguí, no hay cantero central ni tampoco los característicos palos borrachos que la distinguen entre la flora de la ciudad. Ese sector de la calle es angosto y está incluido en un plan de transformación social (que incluye apertura de calles, corrimiento de viviendas y obras de infraestructura).

Tras conocerse el hecho, en la mañana de este viernes estuvieron en el lugar policías y gendarmes, que luego recorrieron la zona. Los vecinos esperan que dicha acción continúe, a toda hora.
 

La zona de bulevar Seguí y Grandoli es lugar de balaceras frecuentes.
Marcelo Manera.