Ariel Gustavo Pennisi


El libro cuenta con el apoyo del Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe, La Dirección Provincial de Salud Mental y el Ministerio de Cultura de la Provincia de Santa Fe. Letra propia es el sello editorial que brindó su apoyo a la edición e impresión.

Desde Mirador Provincial nos adentramos al espíritu de la obra en un profundo diálogo con Laura Peretti, una de las coordinadoras del dispositivo literario junto a Pablo Carcovich.

Un pensar, un resonar
“Los dolores que quedan son las libertades que faltan” reza el Manifiesto Limirar a través de la pluma de Deodoro Roca, aunque por aquel 1918 el por entonces joven de 27 años no quiso hacerse cargo de la autoría del documento.

Rebelde letra que puede leerse con claridad: donde hay un dolor hay un deber que falta. Las letras del libro “Las Bastardillas son Nuestras” no son producto de un beneficio, sino de un derecho y bien lo deja leer su solapa resumiendo las voces del colectivo de escribientes: “mi libertad de expresión no es mi beneficio sino mi derecho”.

Algo que suena muy lógico cuando hablamos de escritores, pero que se torna utópico si esos escritores son personas privadas de su libertad, entonces aquello tan cotidiano parece volverse un beneficio naturalizando por el imaginario colectivo. Eficaz trampa lingüística, siempre oportuno es esclarecer si la oportunidad amerita.

Laura Peretti y Pablo Carcovich coordinan el taller literario que hoy dan a conocer a la comunidad por medio del presente producto cultural que es esta antología de cuentos, relatos y poesías. La letra es subversiva, la letra estalla, denuncia, es revolución (o acaso nuestros revolucionarios no se formaron leyendo Rousseau, Montesquieu, Voltaire, pero esto es letra para otro cantar). Pablo Carcovich y Laura Peretti hicieron y hacen algo esencial por la libertad de algunas personas, poniendo la letra a su alcance. Salud a ellos.

Encuentro con Laura
Nos cuenta Laura que “el dispositivo interdisciplinario de salud es un equipo de la dirección de salud mental del Ministerio de Salud que tiene incidencia en cárceles”, son equipos de cárceles que trabajan dentro de distintas unidades penitenciarias dependiendo del Ministerio de Salud, entonces “es como una tercialidad que tiene como fin garantizar el derecho a la salud de las personas privadas de libertad ambulatoria”. Al preguntarle sobre las raíces nos historiza ubicando su origen “a partir de la ley de salud mental provincial (ley 10.772, decreto 2.155 del año 2007), que reglamenta la creación del equipo de salud mental en cárceles. Tiene sus inicios en Coronda en el año 2005 con el cierre de del pabellón psiquiátrico”.

Pero no todo fue de forma creciente, hubo un degaste estructural de los equipos: “Los equipos que están en las cárceles de las provincias en su momento comenzaron con mayor cantidad de profesionales y ahora se sostienen, pero con mucho menos relación entre la cantidad de personas privadas de su libertad y los profesionales que asistimos a las unidades”.

Sin darse por vencida construyó a pesar de las complejidades: “En este marco en el año 2016, comenzamos a ofrecer un espacio literario en el interior de una cárcel de la unidad número 6 con Pablo Carcovich, que también el psicólogo y yo. Nos convocaba la posibilidad de ofrecer este espacio, no solo porque nos gusta la literatura y la escritura, sino también porque era la intención de habilitar un espacio colectivo con variedad y construcción de lazos tiernos desde la grupalidad que no es una construcción que potencie la institución penitenciaria, entonces esta apuesta a la salud, salud mental, grupalidad y ternura tienen como la misma base la creación del taller literario”.

El taller
El taller se sostiene hasta el momento, con cierta pausa por la pandemia, semanalmente: “los viernes esta la convocatoria de los escritores que asisten voluntariamente y que producen cada encuentro bajo la consigna que proponemos. Las temáticas se abren al diálogo, se arma una escritura singular y al final de cada encuentro una escritura colectiva, que le llamamos escrito colectivo que son las resonancias con ciertos versos, palabras que circularon y se arma un escrito común que va rotando el creado quien hace cada encuentro esa voz común colectiva”.

La apuesta y el desafío por medio del libro es que haya lectores que lean lo producido, afirma Laura: “si bien tenemos un Facebook (Las Bastardillas Son Nuestras), el libro como objeto cultural también convocaba. Que el material de la unidad circule afuera de una forma justamente cultural y artística. El libro era una materia pendiente que se va a materializar ahora y sale a la luz con la contratapa de César González y también con el epílogo de Rocío Muñoz Vergara. Entonces tenemos ahí el ensamble de dos escritores que tienen trayectoria en el conocimiento de la literatura carcelaria y haber transitado estos espacios, en el caso particular de César González”.

Aquel derecho humano. Perforando muros
El mensaje de Laura es claro, nos recuerda y educa en lo esencial: “Nosotres también como apuesta a la apertura al interior de las cárceles y de la cultura como derecho, como un derecho humano, apostamos a que la circulación afuera de la unidad pueda darse con la asistencia de distintos personajes de la cultura. Con esta posibilidad hemos invitado a muchos escritores, músicos, músicas, bailarinas, personas que han transitado por las bellas artes que cuenten, compartan su arte y también escuchen y sientan la literatura que se produce en el interior de un espacio que habitamos y proponemos. Entonces esa idea de perforar el muro la hacemos con los invitades que circulan y ahora la publicación del libro también es otra perforación, otro intersticio por el que algo de la resistencia aparece. La posibilidad de la escritura genera subjetividades de resistencias y no de sumisión. Subjetividades que apuestan a la expresión, al sentir, al emocionarse”.

El espacio artístico no solo se reduce a las letras, “la música es también un arte que se vincula mucho con la escritura y el ritmo, la poesía y su tiempo, hemos invitado a músicos y músicas” (…) “dentro de los mismos músicos que también eran escritores que asistían al taller, se ha armado otro espacio que se llama Los Propios que es una banda de cumbia que ya está circulando, porque muchos de sus integrantes salieron en libertad y están transitando distintos escenarios. El lunes en la presentación del libro van a estar presentes en la sala Lavardén a las 19 horas” concluye la coordinadora.

Sobre el taller Las Bastardillas son nuestras

Se lleva a cabo desde el año 2016 en la Unidad Penitenciaria N°6 de Rosario. Está a cargo de la psicóloga Laura Peretti con quien tuvimos la oportunidad de dialogar para el presente artículo y del psicólogo Pablo Carcovich.

Tanto el nombre del taller literario como del libro producto de su trabajo, es una alusión que remite a las citas que hacen sus participantes con intervención propia de otros autores asumiendo la posibilidad de intervenirla.

“Las bastardillas son nuestras” es un octosílabo ofrecido a que el lector construya su propia versión a partir del encuentro con este primer libro presentado.

Red social del grupo (Facebook): Las Bastardillas Son Nuestras.

Un prólogo de César González

Como bien dijo Laura Peretti, César González tiene profundo conocimiento de haber transitado los espacios carcelarios y lo deja ver en la narrativa del sincero prólogo: “más estremecedor y novedoso es la escritura que no pide perdón, que no necesita autorización, que huye de la falsedad. En una sociedad henchida de injusticia, en una sociedad con gula de opulencia y desigualdades absurdas, pedirle a lxs pibes detenidxs que sean lampiños de moral o exigirle una escritura resiliente no es más que un discurso cómodo y fácil de ensamblar entre la bandera de la buena gente. Cuando cada cuerpo de esxs pibes es una reserva incalculable de historias para contar, pero que siempre se ven censuradas y abroqueladas por una moral ridícula, que le solicita a quien no tuvo nada desde que nació que encima se postre y escriba bien”.

Bio

Laura Peretti es psicóloga egresada de la Facultad de Psicología (U.N.R). Integrante del dispositivo interdisciplinario de salud en instituciones penitenciarias.

La invitación

La Dirección Provincial de Salud Mental invita a participar de la presentación del libro Las Bastardillas Son Nuestras, antología realizada por 14 escritores que han participado del taller de escritura homónimo que lleva adelante el Dispositivo Interdisciplinario de Salud en la Unidad Penitenciaria n° 6 de Rosario.

Se realizará el día 25 de Octubre a las 19:00 hs en el Gran Salón de la Sala Lavardén y contará con la presencia de la Directora de Salud Mental, Ps. Celina Pochettino, la Jueza Dra Dolores Guarrochena, los autores y compiladores. Acompañará el evento la música de #los propios rosario.

Actividad gratuita con retiro previo de entradas en:
entradasculturasantafe.com.ar
https://entradasculturasantafe.com.ar/detalle/Presentacion-del-libro-Las-Bastardillas-son-nuestras/