Un innovador proceso desarrollado por un grupo de investigación de la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Litoral (FIQ-UNL), en colaboración con el Instituto de Investigaciones en Catálisis y Petroquímica (INCAPE, UNL-Conicet) y el Instituto de desarrollo y diseño (INGAR, UTN-Conicet), está revolucionando la manera en que se aprovechan los residuos agroindustriales en la región. Este proceso, inédito en la zona, se centra en la valorización de la cáscara de arroz para la producción de sílice de alta pureza y energía térmica, representando una importante oportunidad de desarrollo productivo y sostenibilidad ambiental.

La planta piloto, ubicada en las instalaciones de la empresa Risiera SRL al norte de la ciudad de San Javier, es el epicentro de esta innovadora iniciativa. Gracias al financiamiento obtenido a través de la línea SF Innovar de la Agencia Santafesina de Ciencia, Tecnología e Innovación, estos proyectos han recibido un total de .500.000 para su desarrollo.

El primer proyecto, titulado "Valorización de las cáscaras de arroz para la producción de sílice de alta pureza", recibió financiamiento en 2020 por un monto de .500.000. Este proyecto se centró en el diseño y construcción de una planta piloto para la producción de sílice amorfa de alta pureza a partir de cáscaras de arroz. Este material, obtenido en grandes cantidades como subproducto de la industria arrocera, se utiliza como materia prima y aditivo en diversas aplicaciones industriales, desde pinturas y lacas hasta cosméticos.

El segundo proyecto, denominado "Desarrollo de tecnología para el aprovechamiento de cáscaras de arroz como combustible masivo en la producción de sílice de alta pureza", obtuvo financiamiento en 2023 por un monto de .000.000. Este proyecto se enfoca en el uso de cáscaras de arroz como combustible sostenible y renovable para la generación de energía térmica en el proceso de producción de sílice. Esta innovación no solo contribuye a la mitigación del cambio climático al reemplazar fuentes de energía no renovables, sino que también optimiza el aprovechamiento de los recursos naturales disponibles en la región.

El éxito de estos proyectos es el resultado de la colaboración entre el ámbito académico y la industria, destacando el compromiso de Risiera SRL y el apoyo del gobierno provincial. La articulación entre la Universidad y la empresa ha permitido no solo la generación de conocimiento científico, sino también su aplicación práctica en el desarrollo de soluciones innovadoras y sostenibles.

El gerente de Risiera SRL, Pablo Bode, resaltó la importancia de esta colaboración y los resultados obtenidos hasta el momento. Además, anticipó futuros desarrollos en el campo de la valorización de subproductos agroindustriales, demostrando el potencial de esta iniciativa para impulsar el crecimiento económico y la competitividad regional.

Este proyecto pionero no solo representa un avance significativo en la valorización de los residuos agroindustriales, sino que también sienta las bases para futuras investigaciones y aplicaciones en el campo de la economía circular y la sostenibilidad ambiental.