Desde hace unos años, el sello Pi Ediciones, con Guido Barsi a la cabeza, ha sabido aprovechar al máximo el fervor y la popularidad que despierta el fútbol en nuestro país. A través de distintas historietas no solo ha plasmado el amor hacia la camiseta, sino que también indagó en muchos de los sentimientos y temas que giran en torno de la pelota: amistad, sacrificios y segundas oportunidades.
Su camino comenzó con la antología de 2018 “La pelota no dobla: historias de y sobre fútbol”, compuesta por once relatos autoconclusivos; y sobre el cierre de 2020 continuó con “La pelota no dobla: la naranja mecánica”, una suerte de segundo tomo individual centrado en la vida de “El Mago” Ledesma, un padre de familia que volvía a calzarse los botines con la intención de saldar cuentas con su pasado.
La frutilla del postre llegó tras la obtención, por parte de la selección argentina, de la tercera Copa Mundial. En 2023, la editorial publicó “La Asombrosa Scaloneta”, trabajo a cargo de Damián Flores, que recogía en forma ilustrada el camino del combinado nacional, desde la derrota frente a Arabia Saudita hasta su consagración ante Francia.
Este último tramo de 2025 encuentra a Pi Ediciones promocionando “El Fuego Sagrado”, historieta que además se constituye en el segundo lanzamiento de su colección “Punto rojo”, dedicada al manga de autoría local. Con guion y arte a cargo de Guillermo Valiente, el trabajo retrata la pasión de una gran final entre dos clubes de barrio.
La sinopsis del tomo reza: “En el ambiente del fútbol, muchos hablan de jugadores cuya sola presencia en el terreno logra afectar a los demás. Intimidan a los rivales, llevándolos al error, y motivan a sus propios compañeros, empujándolos a sacar lo mejor de ellos. Lo llaman ‘El Fuego Sagrado’. Estrellas Doradas, la gran revelación del torneo gracias a su arquero Marcos, se enfrenta en la final al actual campeón: Unidos Juniors, que tiene a Damián, un jugador tan aguerrido como antipático. Las tribunas vibran esperando el silbato inicial ante la promesa de un gran encuentro. Los gritos de la hinchada esconden los deseos de León por estar dentro de la cancha, disputando cada pelota como si fuera la última”.
“El Fuego Sagrado” cerró hace apenas unos días su etapa de preventa y puede adquirirse en comiquerías y librerías especializadas, así como mediante contacto directo con la editorial a través de su sitio web.
La obra
El trabajo se presenta completamente en blanco y negro, adopta un formato de 17,5 x 14,5 cm —frecuente en los tomos de manga— y cuenta con una extensión de 108 páginas. Tanto el letrado como el maquetado corresponden a Darío Reyes.
Guillermo Valiente, como artista integral, da forma a un manga deportivo que recuerda, sin lugar a dudas, a “Captain Tsubasa”, obra de Yoichi Takahashi adaptada también como serie animada. A mediados de los noventa, esos dibujos animados fueron un verdadero éxito no solo en nuestro país, sino en toda Latinoamérica bajo el nombre de “Los Supercampeones”. La referencia no es casual, ya que más de un lector se sentirá familiarizado con algunos de los personajes y situaciones presentados en el tomo de Valiente.
De hecho, los dos protagonistas de “El Fuego Sagrado” son, tal como ocurría en Supercampeones, un arquero y un virtuoso jugador, aunque con rasgos y características notablemente opuestas. Marcos, arquero de Estrellas Doradas, está lejos de la arrogancia y seguridad que demostraba Benji Price en el manga japonés; en cambio, esas cualidades pertenecen a Damián Darone, figura de Unidos Juniors y dueño de un virtuosismo similar al de Oliver Atom. “Darone es tan agrandado como egoísta; hasta sus compañeros lo detestan”.
La historia se despliega a lo largo de cuatro capítulos, de extensión dispar: “Un sueño lejano”, “El fuego sagrado”, “El grito del campeón” y “Desilusión y esperanza”. El tercero, donde se plasma el grueso del partido, es el más extenso, mientras que el último apenas ocupa un puñado de páginas y se desarrolla tras la finalización del encuentro. Funciona como una suerte de epílogo destinado a sentar las bases de una posible continuación.
“Inicialmente iba a ser un fanzine de no más de 20 páginas para presentar en los eventos, pero a medida que avanzaba me iba divirtiendo cada vez más con la historia y las páginas que dibujaba. Así fue que decidí no limitarme en lo que quería contar y llegué a superar las 100 páginas. Mientras la iba realizando separé la historia en dos partes para presentarla y gustó mucho entre los lectores. Luego me contactaron de Pi Ediciones para lanzar el libro completo”, explica el autor.
Guillermo Valiente presenta una historia sencilla donde prima la acción. Retrata la final entre los dos mejores equipos de una provincia nunca especificada, con buenos condimentos. El autor maneja con soltura las particularidades narrativas y visuales del manga: expresiones exageradas, líneas cinéticas —para indicar movimiento rápido— e iconografía específica como gotas de sudor y venas vibrantes. Por si fuera poco, hay páginas completas muy bien trabajadas; no es, claramente, un amateur. Da forma a un relato frenético, que no pierde tiempo y se lee con fluidez.
En cuanto a la narrativa, aparecen secundarios importantes como Valeria, amiga de Marcos y hermana de León, un joven amante del fútbol, con buena técnica pero escasa autoestima y constancia. También se incorporan ingredientes interesantes como los penales definitorios y la presencia del famoso cazatalentos D’Angelo, que llega con la intención de representar al vencedor del encuentro.
Más allá del despliegue técnico y la fidelidad al lenguaje del manga, “El Fuego Sagrado” también apuesta por la emoción. La obra se toma el tiempo de mostrar el peso de las expectativas, los miedos y la presión que atraviesan Marcos, León y Damián, logrando que el lector no solo siga la acción del partido, sino también el pulso interno de cada personaje. Esa empatía es, en buena parte, la que sostiene la tensión hasta la última página.
Con “El Fuego Sagrado”, Pi Ediciones suma un nuevo capítulo a su apuesta por el manga local y demuestra que el fútbol, incluso en sus expresiones más barriales, sigue siendo un territorio fértil para contar historias. En un momento en que el manga argentino busca consolidar su identidad, la obra de Valiente captura la pasión desde adentro y la transforma en un relato visual, directo y emocionante. Un partido que, para el lector, recién empieza.
El artista
Guillermo Valiente nació en abril de 1991, vive en Buenos Aires (Argentina) y es ilustrador, diseñador freelance y editor de vídeos. Actualmente se encuentra estudiando animación.
Desde la infancia encontró su pasión por el dibujo, en un principio copiando personajes de series animadas y cómics para luego crear los propios. Esa misma pasión lo llevó a formarse y especializarse en distintas ramas, a través de las cuales aprendió a usar herramientas gráficas y conceptuales que aplica en cada uno de los proyectos que ha afrontado.
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