De mayo a noviembre se vendió lo que nunca hubieran imaginado. Algunos empresarios, inclusive, se animan a admitir que, en el primer trimestre de la pandemia en el 2020, llegaron a vender lo mismo que en todo el 2019. Así de atípico fue el año que acabó de culminar y que explotó como nunca el mercado online, principal medio de consumo tras la irrupción del Covid-19.

La mayoría de los tecnólogos aseguran que estos cambios de hábito en el consumo se venían dando de manera progresiva y lenta, pero con la pandemia se aceleró el proceso y, actualmente, la venta online supera la demanda en comparación con las compras en los comercios que se ubican históricamente en las peatonales y los shoppings.

De hecho, la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) informó que el E-Commerce o comercio electrónico creció un 106% en el primer semestre del año pasado (comparado con el mismo período del 2019). Para el 2021, según datos de WorldPay, se estima que en América Latina el comercio electrónico generará ingresos por 118.000 millones de dólares.

“Para nosotros fue un desafío enorme, estábamos acostumbrados a crecer un 50% entre año y año, pero en 2020 los rubros que no estaban como alimentos y bebidas, crecieron entre un 70% y 80%”, algo que también se notó en los electrodomésticos, señaló a Mirador Provincial el director de la Comisión del Litoral de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), Daniel King.

Pese a las ventas fructíferas que se vieron impulsadas por el confinamiento y a la posibilidad de consumir vía online, el nivel de demanda comenzó a desplomarse sobre final de año y no logra levantar cabeza en el inicio del 2021. Por eso estiman que el verano será “muy tranquilo”.

No hay “veranito” para el frío

Los electrodomésticos que comúnmente se los reconoce por ser de “frío”, porque se caracterizan principalmente por refrigerar, no vienen teniendo un buen comienzo de año. De hecho, las ventas de noviembre a diciembre cayeron hasta un 40% en algunos productos. Con precios elevados, estiman que el verano no será tan rentable como el 2020.

“La verdad que en aires acondicionados la situación está demasiado tranquila”, aseguró a Mirador Provincial el gerente de ventas de Calatayud, Germán Fabricini. “Pese a que la gente está utilizando muchísimo la tarjeta, los precios no están tan accesibles y muchos no logran acceder”, detalló.

Por ejemplo, un aire acondicionado “barato” ronda los 60 mil pesos. Se trata de un equipo de unas 3 mil frigorías que, en caso de pagarlo en Ahora 12, tiene un interés del 15%, con lo cual se termina abonando un total de 70 mil pesos.

Los aires más ecológicos que son los de tecnología Inverter, se ubican en torno a los 80 mil pesos de contado y con un 15% de recargo en caso de hacerlo en 12 cuotas. “Por eso muchas personas se volcaron a comprar ventiladores de pie y turbos, porque los aires están muy costosos”, explicó el gerente.

“Estos aparatos, a diferencia de los aires, son mucho más económicos y se están vendiendo muy bien”, puntualizó y agregó: “Los turbos rondan entre 5 mil y 8 mil pesos, mientras que los ventiladores de pie oscilan entre 5 mil y 13 mil, según el tamaño y la calidad”.

El gerente de Calatayud admitió que “en los primeros tres meses de la pandemia (mayo, junio, julio) llegamos a vender lo mismo que durante todo el 2019”. Inclusive, “el buen nivel de ventas se mantuvo hasta noviembre, pero ya en diciembre el desplome fue rotundo: hasta un 40% cayó la demanda”.

Por eso, haciendo una proyección a futuro de cara a lo que será el verano 2021, estiman desde la firma que serán meses muy “tranquilos”, porque la economía está atravesando una situación muy delicada por la pandemia del coronavirus y “no creemos que se vuelva a repetir lo del 2020”, afirmó.

Algunos números

Los últimos datos del Indec sobre la Encuesta de Ventas de los Comercios de Electrodomésticos y artículos para el hogar correspondiente a junio dieron cuenta de un monto de operaciones equivalente a sólo 23,5 millones de dólares al tipo de cambio libre, apenas el 2% a 3% del total de las compras de dólar ahorro por parte de unas 5 millones de personas; aunque claramente mejor que el mínimo de transacciones por menos de 4 millones de dólares que se declararon en abril, cuando el efecto pleno del segundo y tercer módulo de 14 días de aislamiento social preventivo y obligatorio que se decretó desde el 21 de marzo.

En el caso de la línea de frío, frente a un volumen de ventas de 616 mil unidades en 2017 se contrajo a 451 mil en 2019 y se contrajo al equivalente de 160 mil en abril último, y avanzó a la zona proyectada de 385 mil unidades en junio.

Por su parte, el agregado de cocinas a gas y eléctricas, la contracción fue similar en los últimos dos años al que acusó la franja de heladeras, pero con la llegada del ASPO tuvieron una reacción dispar, aunque con la flexibilización posterior, tendieron a equipararse en mayo y junio, y ambos rubros quedaron, como la media del mercado de artefactos para el hogar muy lejos de los niveles de tres años antes.