Si bien el virus no afecta la salud humana resulta perjudicial para los cultivos de tomate y pimiento, lo que motivó la formación de un equipo de trabajo interinstitucional.

Para ello trabajan el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), y el municipio de Villaguay, entre otras entidades. Se realizó un muestreo en el vivero del productor hortícola Ángel Miller y en la Escuela Agrotécnica “Justo José de Urquiza” mediante el cual, en colaboración con la Dirección Municipal de Producción, se busca detectar la presencia del virus y desarrollar estrategias de prevención efectivas.

El equipo está conformado por el Ing. Agr. Pablo Flores, supervisor de Protección Vegetal de Senasa en Entre Ríos; la Ing. Agr. Natalia Schmidt, responsable del área de Protección Vegetal en Paraná; y la Ing. Agr. Anabel Salcedo, agente en esta última oficina.

Este compromiso y la acción conjunta buscan salvaguardar los cultivos de la región, ya que la información recopilada y las acciones planificadas son pasos fundamentales para la protección de la horticultura.

Las prácticas agroecológicas son una forma de salvaguardar el ambiente y ayudar en la salud humana. El apoyo técnico es esencial para poder metodizar los procedimientos y a su vez alcanzar los rendimientos adecuados al esfuerzo de los productores y este caso es uno que demuestra la importancia del trabajo asociado.