El juez de Garantías de Paraná, Julián Vergara, resolvió este jueves 8 de febrero prorrogar la prisión preventiva en la Unidad Penal Nº 1 de Paraná a Diego Garcilazo, imputado como autor del crimen de Adrián Martínez, que fue ultimado de un disparo en la espalda el miércoles 8 de marzo del año pasado, en la esquina de El Rodeo y El Boyero, en barrio San Agustín, en el oeste de Paraná.

El hasta ahora único imputado por el hecho cumplió una pena de nueve años de prisión que caducó el 18 de noviembre de 2022.

En la audiencia, el fiscal, Juan Francisco Ramírez Montrull, y el defensor de Garcilazo, Marcos Rodríguez Allende, notificaron al juez que habían acordado la prórroga de la prisión domiciliaria en la cárcel. Las partes consideraron que el juez de feria, Elvio Garzón, en una audiencia que se realizó el 8 de enero, resolvió revocarle a Garcilazo la prisión domiciliaria que le concedió el juez del Tribunal de Juicio y Apelaciones, Rafael Cotorruelo, y vencía este jueves 8.

Ramírez Montrull sostuvo que están aún vigentes los riesgos procesales de peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación. Reseñó que aún no se encontró el arma que se usó en el hecho, que los testigos que deberán declarar en un eventual juicio tienen miedo, que podría haber otras personas involucradas y que la pena en expectativa que podría aplicarse es alta.

Por su parte, la defensa destacó que Garcilazo tomó conciencia del proceso, no se opuso a la prisión preventiva en la cárcel y que han avanzado en la posibilidad de dirimir el conflicto mediante la celebración de un procedimiento abreviado. En este sentido, precisó que su defendido ya firmó la documentación correspondiente. No obstante, Rodríguez Allende manifestó que, si la prisión domiciliaria se dilataba más allá de los 45 días acordado sin que se realice la audiencia de remisión a juicio o de juicio abreviado, el temperamento iba a ser otro.

Fiscalía sostiene que Garcilazo fue la persona que le disparó a la víctima por la espalda, por un ajuste de cuentas por un robo a mano armada al local comercial del imputado. También que cometió el hecho en compañía de otra persona que aún no fue identificada. Así, se acusó que el imputado y su cómplice descendieron de una Eco Sport armados y que Garcilazo le dijo a la víctima, según el testimonio de testigos presenciales, “viste cómo te agarro, ¿qué vas hacer ahora?”.

El motivo de la búsqueda, encuentro y ajusticiamiento de un disparo por la espalda, sería el robo a mano armada del drugstore de Garcilazo, ocurrido el 25 de enero, de donde los autores se llevaron entre 10.000 y 15.000 pesos y el celular de la hija de aquel. Garcilazo enfrenta acusaciones de Homicidio agravado por el crimen de Martínez, y dos hechos por Amenazas calificadas, presuntamente realizadas en el contexto del crimen.