Desde el 26 de junio de este año, Claudio Rivera, contador público por la Universidad Católica de Santa Fe, es el director de la Escuela de Negocios de Letonia, Riga Business School (RBS), creada por la New York University at Buffalo, la University of Otawa y la Riga Technical University.

Letonia es uno de los tres países bálticos que se independizó de la Unión Soviética en 1991. Hoy es uno de los 40 países más desarrollados del mundo, forma parte de la Unión Europea, de la zona Euro y de la OTAN. "Es un país pequeño con una cultura milenaria, donde la gente es muy trabajadora", destaca Rivera.

¿Qué llevó a un santafesino a desplegar su carrera profesional en uno de los países bálticos? Quien hoy tiene un MBA (Master in Bussines Administration) por la Stockholm School of Economics, y un PhD en Management y Leadership por la Latvijas Universitate (Universidad de Letonia), egresó de la Facultad de Ciencias Económicas de la UCSF en 1999 y aún tiene frescos recuerdos de su etapa universitaria.

En 2015 la UCSF rubricó un acuerdo de cooperación internacional con la Universidad Técnica de Riga en orden a potenciar el intercambio de docentes, investigadores y estudiantes; así como de material, publicación e información académica y de investigación; y la realización de investigaciones y reuniones conjuntas.

"Disfruto de muchas cosas"

Tras casi 20 años viviendo en el país de Europa oriental, a orillas del Mar Báltico, Claudio comparte que "durante el invierno los días son cortos, el sol aparece por sólo un par de horas, y en verano los días son muy largos, a veces casi sin noche. Esto afecta las rutinas pues con días más cortos y fríos hace falta dormir un poco más y esforzarse más para tener vida social".

Claudio trabaja en RBS desde el año 2012, donde ha impulsado diplomaturas y cursos en liderazgo y comportamiento organizacional. A partir del año 2019 estuvo más implicado en el desarrollo estratégico de institución, e incursionó activamente en temas de política educativa, involucrándose en la reforma de educación de Letonia, como parte del equipo que trabajó en una reestructuración del ecosistema universitario.

Desde que es director de la Escuela de Negocios letona, Rivera confiesa que su trabajo cambió solo en parte: "Mi día a día es coordinar la implementación de la visión que tenemos para RBS, y representar a la Escuela a nivel nacional e internacional".

Los partners y proyectos que la institución mantiene a lo largo y ancho del mundo han llevado a Claudio a recorrer, durante las últimas semanas, Estados Unidos, África, China y Oceanía. Sin embargo, destaca que "una parte importante de mi trabajo es liderar los distintos equipos de la escuela de negocios y también, en cuanto puedo, estar con los estudiantes para motivarles y entender sus necesidades".

Claudio comparte que los meses laborales se suceden llenos de reuniones y eventos, con dos o incluso más presentaciones y discursos que debe preparar por semana. En el ir y venir de los días, el director de RBS confiesa que disfruta de muchas cosas.

"Mi trabajo me lleva a tratar gente muy inteligente de todo el mundo, eso ayuda a aprender mucho y también a disfrutar de distintas culturas", señala Rivera, y añade que otra fuente de alegría es para él "ver a los estudiantes y colegas creciendo y alcanzando metas e implementando proyectos ambiciosos".

"No tuve un plan"

El egresado de la Católica confiesa que no tuvo un plan para llegar a donde está hoy, sino que fue tomando decisiones, "y la vida te va abriendo puertas y presentando dilemas". "En mi caso, de un lado, siempre quise trabajar en educación, especialmente en el ámbito empresarial, con la convicción de que de este modo puedo tener impacto en el mundo", señaló.

Fue así que, al terminar sus estudios de grado en la UCSF, postuló y consiguió entrar a trabajar en el Escuela de Negocios de la Universidad Austral. Allí comenzó a insertarse en el mundo de los altos estudios especializados en negocios.

A su vez, comparte que la decisión de echar raíces en Letonia se debe a que "la institución de la Iglesia Católica a la que pertenezco, el Opus Dei, iba a comenzar allí y hacía falta gente que quisiera ir a dar una mano".

Rivera destaca que esas dos determinaciones fueron clave y luego hubo muchas decisiones grandes y pequeñas que le llevaron a consolidarse en el escenario de la educación y los negocios.

La etapa universitaria

Desempolvando memorias, el director de RBS asegura: "UCSF es mi alma mater. Me acuerdo mucho de mis profesores, de mis compañeros de estudio, de los apuntes de la fotocopiadora y de algunas materias que fueron especialmente intensas como Matemática Financiera y Auditoría". Sobre la tesina final de carrera, recuerda agradecido: "Todavía estoy muy orgulloso, me dio el gusto por la investigación y los estudios interdisciplinarios".

Al pensar en los alumnos que hoy atraviesan sus estudios universitarios, Rivera los anima a que "disfruten el tiempo de estudio, es único. Y que estudien mucho. Al fin y al cabo, a uno lo contratan por el diploma, pero progresa en base a los talentos que ha cultivado. El mundo se está volviendo cada día más globalizado y la tecnología se desarrolla a un ritmo sin precedentes, en el largo plazo competiremos todos a un nivel global y con una demanda de habilidades cada vez más avanzadas".

Graduados UCSF

A través de las redes humanas y virtuales, el área de Graduados de la UCSF se acerca a todos aquellos que egresaron de la Casa de Altos Estudios. Cada año, entre sorpresas y emociones, se reencuentran quienes cumplen sus 25 y 50 años de ejercicio profesional. Mientras que, para quienes recién comienzan su carrera laboral, la Universidad ofrece un Portal Empleos que vincula puestos de trabajo con perfiles profesionales. Los interesados pueden comunicarse a [email protected], seguir en Linkedin a Universidad Católica de Santa Fe, o comunicarse por teléfono al +54 342 4603030, int. 170.