El Secretario de Bioeconomía de la Nación, Fernando Vilella, se expondrá esta tarde en Rafaela ante un centenar de productores y dirigentes del agro, en medio de un marcado malestar a causa de las dificultades que viene padeciendo el sector. A las 18.30hs encabezará una charla abierta en la Sociedad Rural, en la que hablará sobre la chicharrita del maíz; pero antes, a las 16hs, atenderá en las instalaciones del INTA a funcionarios de las provincias afectadas por la plaga.
En la región, y más aún entre los productores lecheros, predomina un estado de nerviosismo -en algunos casos, rayanos con la paranoia- producto de un encadenamiento de factores negativos para las empresas. La disparada inflacionaria en los costos, a causa de las expectativas devaluatorias, sobre fines de 2023; el golpe climático que generaron la pausa en las lluvias más una ola de calor extrema durante 18 días entre enero y febrero; y luego las pérdidas de los maíces, en muchos casos totales, a causa de la chicharrita. A lo que ahora se suman la dificultades para avanzar con la trilla de soja a raíz de la permanente humedad por lluvias recurrentes.

Enojo y más
“Cuando empezás a sumar todo eso, el descontento en los productores cada día que pasa es mayor”, por lo que se potencian las “sospechas” o la desconfianza, indicó el presidente de la Sociedad Rural de Rafaela, Leonardo Alassia, ante la consulta del ánimo entre los empresarios del sector.
En algunos casos, el enojo por las pérdidas es tal que se escucha a productores afirmar que autoridades políticas, técnicos o empresas proveedoras sabían que existía el problema de la chicharrita pero no avisaron.
Para Alassia, las opiniones son “muy subjetivas” y sospechas de este calibre se explican porque “hace 90 días que tampoco hay producción”. Y consideró que, si no se hubieran dado tantos inconvenientes y fuera buena la producción de leche, “tal vez el ánimo y esas conjeturas de los productores no hubiesen existido”.
De todos modos, el dirigente también hizo un “mea culpa” en torno a los daños por la chicharrita. “Desde la producción también tenemos que hacernos cargo; cuando te pedían por favor que se deje de sembrar maíz, y así me lo dijo mi asesor a comienzos de enero, la mayoría de los productores hicimos oídos sordos”. Aunque aclaró que entonces “no había el caldo de cultivo ni la información que hay hoy”.

Hiper negativo
Según el diagnóstico productivo de la rural rafaelina, la situación es variada. Pero “en todos los casos es negativo a hiper negativo”, dijo Alassia. Desastrosa en la agricultura y “en la producción tambera aún más”, porque los análisis de lo poco que se pudo ensilar reflejan que el alimento “está por debajo de lo recomendado nutricionalmente” para las vacas.
El comentario surgió tras un informe del OCLA (Observatorio de la Cadena Láctea Argentina) que muestra una disminución de 462 tambos desde marzo de 2023 (-4.5%) y una reducción del 6.5% (102.654 animales) en la cantidad de vacas lecheras a nivel nacional. El dato es sensible en Santa Fe, que con el 34.5% del total, resulta la provincia con mayor cantidad de tambos.
Por eso, si bien la visita de Vilella se circunscribe a la chicharrita, el dirigente rafaelino anticipó que le harán un planteo concreto sobre el sector lechero, que al golpe del spiroplasma suma los mencionados anteriormente. “Lo tenemos en carpeta y antes de que se entere por otro lado se lo vamos a dar en mano”, dijo Alassia, sobre el diagnóstico del sector. “La lechería va a ser uno de los temas, por fuera de la chicharrita, para transmitir nuestras necesidades”, anticipó.
Ante un impacto económico “muy duro”, el ruralista adelantó: “una de las cosas que vamos a estar pidiendo es un financiamiento acorde a las pérdidas que hubo, producto de una catástrofe natural”.

Un centenar
Para el encuentro, la Sociedad Rural de Rafaela cursó invitaciones a unas 30 entidades pares de Santa Fe, Córdoba y Santiago del Estero; también a la Mesa de Enlace provincial y Carsfe, entre otras. “Los retornos hasta el momento son todo positivos”, dijo el presidente. Al mismo tiempo, más de 50 productores se inscribieron mediante un formulario web para asistir. “Como mínimo entendemos que van a ser más de 100 personas”, estimó.
La principal expectativa, añadió, es que haya alguna réplica a un pedido ya formulado ante el daño de la plaga. La solicitud era una “respuesta contra la plaga y cuáles serían las políticas de Estado para llevar adelante”. Alassia valoró la reacción oficial de conformar un comité de crisis. “Eso es una señal”, dijo, y lo contrapuso al gobierno anterior: “cosa que le sucedía al campo, lo único que hacían era oídos sordos”.
“Ahora entendemos que habrá un diagnóstico de profesionales, que estarán mostrando hoy; es el nudo de la cuestión, ellos dirán cuales son los pasos a seguir”, concluyó.