Lalo Falcioni deportes@miradorprovincial.com


Casi nunca en sus largas y ricas historias a los clubes rosarinos les fue bien cuando se apartaron de sus bases. Le pasó a Newell's en último tiempo, cuando se tiró de cabeza a la aventura de contratar a Germán Burgos y a dos ayudantes españoles, solo porque habían tenido éxito acompañando al Cholo Simeone en un lugar situado a 14 mil kilómetros de Rosario. Con la llegada de Fernando Gamboa a la dirección técnica de La Lepra y de Lucas Bernardi al cargo de gerente de fútbol, se completa la mitad del sentido de pertenencia que estaba descuidada. El otro 50 por ciento está asegurado con la permanencia de Cristian Kily González y su equipo de colaboradores, todos surgidos de la inagotable cantera canalla.

Lo antes expresado no se traduce en un éxito asegurado por el solo hecho de poner a "gente del club" al frente de los puestos más importantes orientados al fútbol. De hecho, el Kily y su cuerpo técnico debieron atravesar varias tormentas en medio del océano de la triple competencia, hasta tocar tierra firme después del clásico de la ciudad y de la brillante clasificación a octavos de final de la Copa Sudamericana. Lo que sí se puede argumentar, es que cuando los que mandan desconocen el devenir de las instituciones, el fracaso queda a la vuelta de la esquina.

Dos castalepras de regreso
El fallecido profe Jorge Castelli, muy querido en Newell's por su inolvidable paso por el club, patentó un término que hoy se ajusta perfecto a esta nueva etapa que inicia la institución: castalepras. Así llamaba a los jugadores nacidos en la entidad rojinegra. ¿Quién puede poner en duda que ese apodo le cabe justo a Fernando Gamboa y a Lucas Bernardi? Quedó muy claro en las conferencias de prensa que dieron esta semana que pasó en el Coloso Marcelo Bielsa, en las que no pudieron evitar los recuerdos, las demostraciones de amor y la humedad en sus ojos.

"Hay momentos en los que hay que estar y ponerse a trabajar. Creo que es el momento y por eso estoy. Vi la oportunidad de hacer algo lindo y en los momentos de dificultad es cuando me apasiona estar", trató de resumir Bernardi cuando le preguntaron por qué regresa a Newell's en el cargo de gerente de fútbol.

Sobre la elección de Gamboa para el cargo de DT, explicó: "Con el Negro tenemos una gran relación. Es un hombre de la casa, tan ligado con nuestro sentimiento, con carácter, sentido de pertenencia, liderazgo y ganas de trabajar. Por todo ello decidimos su contratación y estamos contentos con el inicio de la preparación, se nota algo diferente".

También se refirió a los futbolistas de mayor experiencia y jerarquía, a quienes conoce muy bien porque con varios de ellos fue campeón en 2013 en aquel equipo del Tata Martino: "Hablé con ellos. Quería saber cuáles eran sus necesidades, conocer cómo se sienten y piensan el futuro inmediato del club. Hoy son los actores principales. Siempre hemos luchado por el escudo y nadie está exento de nada ni alejado de lo que buscamos", confió.

Por último, resaltó: "Me voy a brindar para que haya fluidez, constancia y sentido de pertenencia. Necesitamos un equipo unido y que compita todo el tiempo. Mientras más cercanos estemos a nuestra identidad, más felices vamos a ser todos".

El corazón canalla del Kily
El tránsito de este receso es más placentero para Rosario Central, después del gran cierre de semestre que protagonizó el primer equipo. Y al frente de esa ilusión gigante que ya escapa de los límites nacionales y mira de frente al continente sudamericano, está Cristian González. Junto a sus laderos Petaco Carbonari, Rifle Castellano, Pastilla Ordóñez y Mono Gordillo", más los futbolistas que ponen el escudo auriazul por delante de todo, el grupo tiene los objetivos muy claros.

El entrenador de Central reconoció que "hay mucha expectativa e ilusión de sostener o mejorar lo que hicimos sobre todo terminando el semestre anterior, como fue ganar el clásico o la clasificación en la Copa Sudamericana". Y agregó: "Estamos con muchas ganas, sobre todo teniendo de frente un partido mano a mano por la Copa".

En la rueda de prensa virtual, al ex volante canalla le preguntaron por posibles refuerzos: "Somos los mismos del semestre anterior y obvio que el club y nosotros queremos reforzar al equipo en sus líneas, más teniendo en cuenta el desafío por la Sudamericana", dijo.

Con esa última declaración, el Kily pone en lo más alto de su valoración a los muchachos de experiencia que dan la cara por la institución, encabezados por Marco Ruben, Emiliano Vecchio y Jorge Broun. Más los chicos que vienen empujando desde abajo y que siempre tendrán su lugar. Porque de sentido de pertenencia se trata el fútbol de Rosario.