Juan Chiunmiento
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Ante versiones crecientes de desabastecimiento y retención de stocks en la construcción, desde la siderúrgica Gerdau -que destina el 80% de su producción a ese sector- aseveraron que trabajan al máximo de sus capacidades y vincularon la situación a un recalentamiento de la demanda antes que a conductas especulativas. Así lo explicó su CEO, Guilermo Maglieri, que repasó con Mirador Provincial la actualidad de la firma radicada en Pérez, que se encamina a cerrar un muy buen segundo semestre, con expectativas de iniciar un 2021 aún mejor.

"Nosotros estamos trabajando desde junio a máxima capacidad. No veo una actitud especulativa de la cadena, aunque por supuesto que no puedo saber qué hacen los 1.000 clientes que tiene Gerdau. De nuestra parte, estamos con niveles de stock de los más bajos de la historia", indicó el ejecutivo, que tiene a cargo más de 650 empleados en una de las principales industrias del Gran Rosario.

Para Maglieri, las situaciones de desabastecimiento se dieron como efecto del fuerte repunte de la construcción en los últimos meses, que no le dio tiempo a la oferta de reacomodarse. "Uno entiende que para el primer trimestre de 2021 eso se va a equilibrar", pronosticó. Entre los factores que influyeron para este veranito de los ladrillos, tomó en cuenta la demanda reprimida que hubo durante los primeros meses de la cuarentena, el impulso que imprimió el Estado a través de la obra pública y la histórica sensación de refugio que brinda el sector, en un contexto marcado por la restricción cambiaria.

"Más allá de eso, lo cierto es que una vez equilibrada la oferta con la demanda, uno observa que la construcción puede ser un driver de crecimiento muy interesante para el año próximo, acompañado por otros sectores donde también vemos una recuperación, como toda la industria ligada al negocio agropecuario. En base a esto uno no deja de ser optimista, aunque supeditado por supuesto a la evolución del virus", reflexionó Maglieri, que se expresó en sintonía con lo dicho por el secretario de Industria Claudio Mossuz, que en los últimos días vertió declaraciones en el mismo sentido.

Optimismo
Con las plantas trabajando a full, Gerdau se encamina a cerrar un año que había comenzado tibio y que la pandemia mandó al freezer por casi 40 días. La actividad en Pérez recién comenzó a retomar operaciones normales en mayo, luego de introducir una serie de protocolos que permitieron disminuir al mínimo los casos de contagio y garantizar la continuidad de la operatoria, que ya para junio estaba en niveles "muy altos", según dijo Maglieri. "A partir del segundo semestre se empezó a trabajar a máxima capacidad. Para darte una idea de cómo se está moviendo, hoy nuestra cartera de pedidos pendientes se multiplicó por cinco, comparado con el promedio que teníamos el año pasado", acotó.

De cara al 2021, el ejecutivo pronosticó que será "mejor" que este año, aunque ello dependerá que el gobierno nacional acomode algunas cuestiones de la macroeconomía, que tienen en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un primer hito a resolver. En base a ello también se definirán posibles nuevas inversiones. Vale recordar que la empresa desembolsó hace tres años 240 millones de dólares para concretar la nueva acería, que le permitió una gran mejora en los costos y darle competitividad en el mercado internacional.

"Si a nivel nacional se resuelven algunas cuestiones, y teniendo en cuenta la intención oficial de que la construcción sea el motor del crecimiento, veo buenas oportunidades, tanto en lo que es obra pública como privada", cerró Maglieri.

Entre los factores que influyeron para este veranito de los ladrillos, tomó en cuenta la demanda reprimida que hubo durante los primeros meses de la cuarentena, el impulso que imprimió el Estado a través de la obra pública y la histórica sensación de refugio que brinda el sector, en un contexto marcado por la restricción cambiaria.

Nuevos desafíos

Asociado tradicionalmente al género masculino, la siderurgia parecía un terreno prohibido para las mujeres. Sin embargo, a partir de este año la empresa se incorporaron cinco al área operativa, en el marco de una estrategia que se profundizará en los próximos años. "Fue romper un paradigma. Uno pensaba que la actividad nuestra no era apta para las mujeres, pero lo cierto es que ello era un mito. La idea es fomentar el trabajo femenino en la planta", comentó Maglieri.

El otro de los desafíos a trabajar tiene que ver con el teletrabajo, un aspecto que se tornó obligatorio por la pandemia pero que seguramente dejará marcas una vez que haya quedado en el pasado.

Hoy la firma sigue con todo su personal administrativo trabajando a distancia y si bien ya se encuentra habilitado para volver a planta, prefirieron dejarlo así por el momento para que en planta sólo esté el personal esencial.

"Creemos que a futuro habrá un esquema más flexible, más moderno, más adaptado a los nuevos tiempos, en función de los aprendizajes que esto nos trajo" concluyó Maglieri.

Sobre Gerdau

Gerdau el próximo 16 de enero está cumpliendo 120 años de historia. Es la mayor empresa brasileña productora de acero y una de las principales proveedoras de aceros largos en las Américas y de aceros especiales en el mundo. En Brasil también produce aceros planos, además de mineral de hierro para consumo propio.

La compañía opera 31 unidades productoras de acero, 75 tiendas de Comercial Gerdau, 2 minas de mineral de hierro y una base forestal de plantación de eucaliptos de más de 250 mil hectáreas.

Es considerada la mayor recicladora de chatarra ferrosa de América Latina, transformando anualmente en el mundo 11 millones de toneladas de chatarra en acero. Cuenta con operaciones industriales en 10 países y sumando casi 30 mil colaboradores directos e indirectos en el mundo. Cotiza acciones en las Bolsas de Valores de San Pablo, Nueva York y Madrid.

Gerdau está presente en Argentina desde 1998. Su planta de Laminación y la Acería están localizadas en la ciudad de Pérez, provincia de Santa Fe y se dedican a la producción y comercialización de productos de acero, destinados a la construcción civil e industrias metalmecánica, automotriz y rurales. La nueva acería que fue inaugurada en octubre de 2017, sustituye importaciones de materia prima por 100 millones de dólares anuales, generando 800 puestos de trabajos entre colaboradores directos e indirectos.

"Si a nivel nacional se resuelven algunas cuestiones, y teniendo en cuenta la intención oficial de que la construcción sea el motor del crecimiento, veo buenas oportunidades, tanto en lo que es obra pública como privada".
Guillermo Maglieri
CEO de Gerdau