En el marco de las directivas desplegadas por el Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Fe, el pasado jueves se realizó el traslado de 10 detenidos alojados en la Alcaidía de la Unidad Regional XVIII ubicada en la ciudad de Sastre. Así, la dependencia de la cabecera del departamento San Martín que llegó a alojar 40 personas en un espacio con capacidad para 12, redujo a la mitad su población carcelaria. "Era algo que estábamos esperando hace mucho tiempo. Dentro de lo malo que es continuar con más gente de la permitida, estamos con un funcionamiento más natural. Nunca se respetó el espacio de esta dependencia, lamentablemente, que es de 10 masculinos y dos mujeres. Hoy tenemos 19 detenidos en total", le dijo a este medio José Luis Molineris, jefe de la UR XVIII.

En la continuidad de los procedimientos para que la Policía provincial recupere la operatividad y los internos sean alojados bajo la órbita penitenciaria, la Alcaidía de la Unidad Regional XVIII fue la elegida por el Ministerio de Seguridad para oxigenar un establecimiento que solicitaba desde hace mucho tiempo un poco de aire. El límite llegó a superar el triple de internos alojados respecto a la capacidad habilitada. En el medio hubo una serie de Recursos de Amparo presentados por la Defensora Pública, Patricia Hidalgo, que tenían como eje la reubicación de los detenidos luego de denuncias por hacinamiento. "Más allá de mejorar la situación, sigue quedando chica. El espacio común tiene un metro y medio por diez, que es el frente del ingreso a las celdas. Cuando llegamos a un pico de 40 detenidos estaban asignados de determinada manera que dormían ocho personas en un espacio de dos por dos. Descansaban dos por colchón, tirado en el suelo", remarcó Molineris.

En la dependencia de la cabecera del departamento San Martín se encuentran alojados reos con perfiles determinados. "Acá se encuentran quienes tienen causas por abuso sexual y violencia de género", explicaron desde las fuerzas de seguridad.

Sin embargo, a pesar del hacinamiento en los reducidos espacios, son los propios reclusos quienes solicitan permanecer en la Alcaidía de Sastre hasta que no recaiga una orden firme para liberar el lugar o reubicar detenidos. "Los reclamos para ser trasladados estaban, pero las personas que están por abuso se resisten a ir a la cárcel. Siempre estuvo ese mito de que quienes llegan por abuso son abusados. Pero en realidad quienes van a esos lugares se alojan en pabellones con personas que están en su misma situación", indicó Moineris y agregó: "También consideremos que estando en la Alcaidía tienen más cercanía con los familiares, ya que aquí hay gente que es de la región".

Así, las recomendaciones constantes de quienes está al frente de la UR XVIII son reconsiderar los traslados y pedir su reubicación. "Yo les digo que vayan a la cárcel porque van a tener espacio común, un lugar para hacer deporte, talleres para realizar. Tienen un desarrollo más humano, más allá de que están privados de libertad. Acá están literalmente encerrados, sin esparcimiento y sin espacio para circular".

Con la reducción de la población carcelaria en Sastre, la operatividad de la Alcaidía se volverá un poco más natural. La dependencia de la cabecera departamental debería funcionar como un lugar transitorio para personas detenidas mientras se resuelva su proceso judicial. "Después de que se les dicta Prisión Preventiva o tienen condena ya no tendrían que estar más acá", remarcó el jefe de la UR XVIII.

El operativo desarrollado en las primeras horas del jueves 11 de enero fue encabezado y dirigido por el jefe de la Unidad Regional, subdirector de Policía José Luis Molineris, acompañado por el subjefe de la misma, subdirector de Policia, Daniel Almada, y la jefa de Orden Público, subdirector de Policia, Flavia Sosa.