Gisela Mesa redaccion@miradorprovincial.com


Para los amantes del tango llega todos los domingos de abril a las 20 en el Centro Cultural Casa del Tango, un espectáculo teatral que hace homenaje al tango y al cabaret argentino como emblemas nacionales. Una obra musical que repasa la historia del tango desde sus orígenes, y hasta convertirse en Patrimonio Cultural de la Humanidad.

La propuesta que se renovó con el ingreso de nuevos artistas al elenco, y la reestructuración del lugar emblemático en el que tendrá lugar la nueva temporada, busca constituirse como el show sede del tango y la cultura en la ciudad Cuna de la Bandera. Mirador Provincial dialogó con Franco Veneziano, productor/coreógrafo de la obra para conocer el comienzo de esta obra teatral musical que viene pisando fuerte en el ámbito teatral.

-¿Cómo surge la obra Cabaretango?
-Cabaretango nace en los comienzos del 2021, cuando todavía estábamos en plena pandemia, los teatros cerrados y una gran incertidumbre por parte de los artistas que estaban sin poder trabajar. Es en esa época en la que nos contactan desde Turquía para armar y llevar un espectáculo de tango argentino con cantantes y bailarines, pero luego de varias negociaciones no se pudo cerrar el contrato, por lo que decidimos armar igualmente el espectáculo para estrenarlo en la ciudad de Rosario. Así que llamé a Leandro Maccagno, el autor del libreto y director general para que empezara a trabajar en la dramaturgia del espectáculo y, en conjunto, fuimos seleccionando las canciones que íbamos a interpretar y las coreografías que íbamos a utilizar.

-¿Qué desafíos encontrás a la hora de producir un espectáculo con una temática histórica como es el tango y el cabaret?
- El principal desafío es no solamente el diseño de la puesta en escena, sino también cuando se trabaja con cantantes y bailarines. La articulación entre estas disciplinas para que el espectáculo y la historia fluyan de principio a fin. Cabe mencionar que Cabaretango sorprende al espectador por la gran versatilidad que tienen todos los artistas del elenco haciendo que, de repente el cantante pasa a formar parte de la coreografía o el bailarín participa de una escena junto con los demás personajes, y ese fue el mayor desafío que tuvimos a la hora de montar este espectáculo.