Libro Luz azul

Beatriz Vignoli: 8/34


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El libro de poemas de Beatriz Vignoli, Luz azul (Bajo la Luna, 2017; reeditado en 2022 como parte de Viernes, poesía reunida 1979-2021) se divide en dos partes. La primera lleva el título de tapa; la segunda, Carne extraña. A la primera pertenece el poema “Dos flores azules”, donde la voz propia detalla el mármol, los números y las flores que caracterizan un nombre desaparecido. Frente a una tumba, en la lectura de la inscripción en una lápida, una mezcla de palabras con colores se acerca a la definición de los tonos designados con números como en la carta de colores de la peluquería. Si bien estamos frente a un poema conducente hacia una segunda persona con cierto tinte de lo privado, quizás autobiográfico, en lo cual Cuidamos tu cabello peluquería & libros no debiera inmiscuirse, nos permitimos el libre albedrío en la interpretación de estas estrofas: “Nunca te dije que para mí sus números / venían de colores. / Yo los leía al revés: / el doble seis de oro, blanca la o de octubre, / caoba el nueve y el dos azul oscuro”. Traducción para la peluquería: caoba es el número cinco que va al lado de un tono natural, por ejemplo, el 7/5, es rubio-caoba. Una especie de rojo amarronado tal cual se presenta el tronco del árbol de caoba. El “doble seis de oro” es el 6/33, un rubio-oscuro-dorado-doble que intensifica al máximo el oro, como encontrar en medio de un soleado médano egipcio un trozo de oro. Como intentar también desanudar los interrogantes de la muerte.

La luz azul funciona como un corte degradé de capa por capa, que se inicia en la explosión de la bomba atómica del epígrafe con un rojo intenso que tornará a verde y finalmente azul. Esos efectos de bombardeos atómicos y sus consecuencias inquietantes, sensoriales, podrán leerse en varios poemas: la melancolía de la pérdida, imágenes dolientes y los elementos naturales del mundo. Como si las capas del corte degradé quedaran muriéndose en el piso. Por eso la mirada implacable ante el horror pareciera aumentar los colores hasta aplacarlos.

Archivo.



Ese juego de colores continúa en “Alba cobalto”, un poema crudo como la carne quemada que asoma en las estrofas de una catástrofe, al amanecer final sobre una batalla de la Primera Guerra Mundial: “Si fuese al fin azul feroz cobalto el alba, / si una alegría mineral fosforeciera… / de cascos putrefactos y ectoplasmas… / El corresponsal encontró un muerto por metro. / Y sin embargo el alma, la decimonónica todavía / entre tanta carne trozada incomestible / valsea su vaivén”.

Con menos dureza el poema “La verdad”, se muestra con la implacable sinceridad de un mapa de investigación, de las voces preguntando, las miradas. Debajo del título y entre paréntesis, este poema anuncia Leipzig 1901, en referencia a Paul Schreber, quien gracias a su libro “Memorias de un neurópata” logra salir del manicomio en donde estaba internado. Como si el libro hubiera sido su defensa a la libertad, pero que a su vez, dejó un testimonio anticipatorio para las siguientes generaciones: “Cuando todo lo que queda por leer es un mapa / voces que preguntan por la razón de un nombre… / la verdad es una playa distante, la verdad es el hueso sin carne, / es el cuerpo ya sin tiempo y arrojado, / son las cuerdas sin música ni sentido, / la verdad es el cielo quemado”.

En “Oda al alfarero Winkler”, en Carne extraña, llega la esperanza del barro cocido renovándose a diario ante las certeras estrofas: No hay un cuerpo posible / sin un hueco en el centro. La alfarería que luego de ser amasada para dar forma a la vida misma, muere en el piso luego de su uso, pero la reposición constante de la obra del alfarero no cesa: “Cántaros donde cabe / la luna llena trae al mundo crudos / Winkler el alfarero…/ Brocados de la roca, / grecas que el tiempo mirará por años / les marca en un instante. Y la esperanza sigue a la renovación: Sólidas ánforas que albergarán lo vivo / el alfarero Winkler multiplica. Mientras / las estrellas claras de sus ojos brillen / habrá, entre nosotros, / la alfarería, el oficio de alfarero”.

En una conversación sobre el libro, Beatriz contó que dos poemas, “Gualeguay” y “Rincón”, surgen de paseos, de recorridos por territorios en donde habitaron otros poetas. Entre encuentros y festivales de poesía y recorridos de gira por el interior, surge la inspiración ante las charlas con colegas. Productos de experiencias vividas en la patria chica de Juanele Ortiz, Gualeguay, provincia de Entre Ríos. O desde la clara alusión a la ciudad de San José del Rincón, y frente a la casa donde vivió Beatriz Vallejos, surge el poema “Rincón”. “Bella Vista” nace de una caminata por el barrio de ese nombre en la ciudad de Rosario. Y de un paseo por el barrio de La Sexta –el de Winkler, quien, de paso, es casi vecino de Cuidamos tu cabello peluquería & libros, situada en el contiguo barrio del Abasto– también surgen una
entrevista, una charla amena y las posibilidades de concretar tanto una oda como una crónica.

Aquí un link de Spotify, para escuchar las voces que leyeron el poema y opinaron sobre Beatriz:
 https://open.spotify.com/episode/3axOdQk3kOJu6GYlk7l3Y4?si=J1GCb0PaTIOmW47W43Iseg&nd=

Al cabello ondulado de Beatriz se lo considera tan dócil que permite cualquier tipo de color. Las propuestas desde Cuidamos tu cabello peluquería & libros, han sido aceptadas sin cuestionamientos. Por lo tanto, las pruebas pasaron desde el 4/51, un castaño natural con ribetes caobas y cenizas que la oscurecieron más de la cuenta hasta aclarar al nunca pacifico 8/43, que lleva aplicándose estos últimos tiempos. Es que el ocho es un rubio claro, el cuatro que continúa es cobrizo y por último, el barra tres, el dorado de los médanos egipcios cuyos efectos del sol pueden hasta encandilar. Una fórmula explosiva de un naranja intenso que suele ser calmado con un 7/35, rubio mediano-dorado-caoba, que por alguna causa de las pigmentaciones a veces inexplicables de mezclas, suele amarronar como el río Paraná, los naranjas excedidos de Beatriz.

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Lila Siegrist: 6/34



Beatriz lleva la cuenta de los veintiún días estimativos en que deberá volver a teñirse. En Luz Azul, dio cuentas claras del fenómeno de Cuidamos tu cabello peluquería & libros. Fue un día cualquiera de esos en que en la espera de la tintura y la paciencia visual frente al espejo o a un florero, la capacidad de observación hizo de las suyas:

En la peluquería de Biglardi

Hay cinco flores blancas en medio de todas las palabras,
blancas casi verde silencioso.
Copiado al espejo triangular son diez diamantes
y eso significa.

Alrededor sostienen la tarde como pueden,
van soportando el tiempo
con palabras sencillas por donde respira
el aire de los cuerpos.

Tratan de olvidarse de la muerte, del sol que resplandece
allá afuera después de la tormenta.
Pero hay un silencio que rompe con todas las cosas.
Cinco flores blancas casi verdes lo recuerdan.

Beatriz Vignoli nació en 1965 en Rosario (Provincia de Santa Fe), donde vive. Es poeta, periodista cultural, traductora, docente y editora. Es colaboradora de Rosario/12 (suplemento local de Página/12) desde 1991. Desde 2003 da clínicas de obra (en plástica y en poesía) y desde 2018 coordina talleres literarios de escritura de sueños. Entre 1993 y 1995 vivió en Buenos Aires y colaboró en The Buenos Aires Herald. Ha publicado, entre otros libros de poesía: Almagro (Rosario, EMR, 2000), Viernes (Bajo la Luna, 2001), Árbol solo (Rosario, Iván Rosado, 2017; Premio Provincial de Poesía José Pedroni edición 2019 en la categoría éditos), Luz azul (Buenos Aires, Bajo la Luna, 2017), Viernes, poesía reunida 1979-2021 (Buenos Aires, Nebliplateada, 2022) y Expreso (Rosario, Editorial Biblioteca, 2022). En narrativa, es autora de varias novelas, entre ellas Reality (Rosario, EMR, 2004; Buenos Aires, Bajo la Luna, 2014, Segundo Premio Municipal de Narrativa Manuel Musto, edición 2004). También publicó el libro de cuentos Mi gato interior (Rosario, Libros Silvestres, 2021), el libro de crónicas Kozmik Tango (EMR, 2009; 2018, adaptado al cine en un cortometraje de 2013 con dirección de Lucas Cosignani) y de las novelas de no ficción Lemuria (Buenos Aires, Mansalva, 2022) y Reverie (Iván Rosado, 2023). Codirige con Julieta López desde 2021 el sello AlfonZina editoras. Es clienta de Cuidamos tu cabello desde 2010.

* Pablo Bigliardi montó una biblioteca en su peluquería desde donde fomenta la lectura sugiriendo escritores tanto emergentes como conocidos a cuya obra también se las reseña en redes sociales, diarios y revistas culturales.

 


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