Hernán Alvarez
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Quizás desconocido para algunos, Argentina es uno de los países con mayor presión fiscal del mundo. Esa recaudación no se condice con las contraprestaciones que el Estado argentino, en sus tres niveles, brinda. Algunas veces esos servicios son deficientes o inexistentes.

En este contexto, los contribuyentes, que cumplen con su parte, se quejan de la carga impositiva que deben afrontar. Muchos de ellos, en la provincia de Santa Fe, critican al Estado provincial por los tributos que deben pagarle a las arcas de la administración distrital. También abundan los reproches a nivel local. En ciudades como Rosario se suelen escuchar críticas hacia los dos estados subnacionales (Provincia y Municipio) por este tema.

Los números reales de recaudación impositiva en los tres estratos estatales no se condicen con el pensamiento colectivo instalado de que Santa Fe y sus municipios y comunas recaudan una gran parte de la torta impositiva. Según números proporcionados por el Cippec (Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento) de Buenos Aires, la presión tributaria en 2016 fue del 75,7% por parte del Estado nacional, 21,4% de los estados provinciales y 2,9% de los municipales. La misma organización estimó para el año pasado esta división: 74,46% federal, 22,16% provincial, 3,38% local. Estos números muestran a las claras que 3 de 4 pesos recaudados se quedan en las arcas de la administración nacional. Los estados subnacionales se apropian de 1 de 4 de esos pesos.

La visión de Saglione
Gonzalo Saglione, ministro de Economía de la Provincia, habló con Mirador Provincial sobre esta cuestión. El funcionario público marcó dos puntos a ser revisados y modificados. “Hay una fuerte concentración en materia de recaudación de impuestos en el nivel nacional de gobierno, en detrimento de las provincias, y de los municipios y comunas”, afirmó. “Una primera cuestión que debe revisarse es la fuerte concentración en el nivel nacional de gobierno. A contramano de lo que sucede con las funciones gubernamentales. Cuando uno le pregunta a cualquier empresario qué impuestos tiene más presente, le va a contestar el IVA, el impuestos a las ganancias, el impuesto al cheque. Cuando se le pregunta a la misma persona cuáles son las funciones que le exige al Estado, la respuesta suele ser educación, seguridad, salud, mantenimiento urbano que son funciones que tienen los gobiernos provinciales y municipales o comunales”, comentó.

El segundo elemento que Saglione puntualizó es la composición de esa presión tributaria. “En Argentina, tenemos una tendencia a gravar el consumo mucho más que la riqueza”, remarcó. “Eso hace que la estructura tributaria sea regresiva porque los impuestos al consumo impactan mucho más en las clases sociales de menores ingresos que son las que no tienen capacidad de ahorro y el 100 por cien de su ingreso es consumido. En cambio, los sectores de más altos ingresos que tienen capacidad de ahorro pueden ver un menor impacto de los impuestos al consumo respecto de su nivel de ingresos”, sostuvo el titular de Economía. “En los países desarrollados, la implicancia que tiene dentro de la estructura tributaria la recaudación de impuestos a los ingresos más altos y a la riqueza es mucho mayor que lo que tienen los impuestos al consumo o a la actividad económica. En Argentina, es exactamente al revés”.

La patente automotor llega más cara
La patente automotor que vino con aumentos también despierta las quejas de los que la pagan. “Hace muchos años que no cambia el esquema de cálculo de la patente automotor en la provincia de Santa Fe que es una alícuota ya definida en una ley. Lo que se hace es fijar sobre qué monto aplica esa alícuota. Y el monto sobre el cual aplica es el precio que informa AFIP. Las alícuotas en Santa Fe no han cambiado. Lo que ha cambiado del año pasado para éste es el monto de los vehículos como consecuencia de la crisis inflacionaria en la cual está inmerso nuestro país”, comentó Gonzalo Saglione.

El titular de la cartera económica agregó que 90 de 100 pesos recaudados con este impuesto van a los municipios y comunas, y 10 al Estado santafesino. “De los cuatro impuestos provinciales es el que menos le aporta al gobierno de la Provincia”, agregó.

Santa Fe, en el penúltimo puesto

El ministro Saglione también se refirió a los fondos federales discrecionales que recibe el Estado provincial, además de la coparticipación automática. “Santa Fe hace largos años que ha quedado rezagada. En 2018, cuando uno hace el análisis per cápita, nos encontramos en el puesto 23 dentro de las 24 jurisdicciones. Santa Fe estuvo rezagada antes de 2015 y ha seguido rezagada de 2015 para acá”, comentó.

El ministro sostuvo que la administración santafesina cumplió con las exigencias del consenso fiscal de 2017. “Es necesario disminuir la presión tributaria sobre la producción y sobre el consumo que impacta sobre el conjunto de la población”, consignó.