El buque Areti GR, que zarpó de San Lorenzo y llegó a Newcastle, en Australia, con unos 50 kilos de cocaína a bordo.

Los detectives australianos que investigan el hallazgo de unos 50 kilos de cocaína de gran pureza a bordo de un buque que zarpó del puerto santafesino de San Lorenzo y llegó a la ciudad de Newcastle creen que a bordo del barco había en realidad 300 kilos de esa droga.

Al mismo tiempo, los investigadores están detrás de la pista de otro secuestro de 179 kilos de cocaína en el puerto de Java, en Indonesia, que podría tener conexión con el contrabando detectado en la provincia australiana de Nueva Gales del Sur. No hay por ahora datos sobre el hallazgo en Indonesia ni la procedencia del buque en el que llegó la droga.

La policía de Newcastle cree que la clave para descubrir una posible conexión entre ambos casos es James Blee, un empresario de yates que quedó detenido luego de la aparición de un buzo especializado muerto y el hallazgo de casi 50 kilos de cocaína en el buque Areti GR, que había zarpado de San Lorenzo.

Blee fue detenido cuando estaba a punto de subirse a un vuelo con destino a Singapur. Los detectives descubrieron que llevaba consigo 17 mil dólares y que solo tenía pasaje de ida. Aunque pidió ser excarcelado, la Justicia de Nueva Gales del Sur le denegó ese beneficio y por lo tanto sigue detenido, mientras las investigaciones continúan.

La policía y los fiscales que tienen a su cargo la pesquisa están convencidos de que el buzo que apareció agonizando junto al Areti GR estaba descargando cocaína del buque. Hasta ahora no hubo precisiones sobre qué le ocurrió y lo único que se sabe con certeza es murió que poco después de que lo encontraran.

La gran duda de los investigadores es si antes de que algo lo lastimara hasta llevarlo a la muerte, ese hombre ya había descargado más droga del barco y la hipótesis es que a borde tuvo que haber habido más cocaína. La estimación que hace, según trascendió en Newcastle, es que el buque puede haber trasladado unos 300 kilos de la droga.