Aldana Badano
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Luego de más de 60 días del inicio de la cuarentena, comenzamos a preguntarnos por los efectos del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio en nuestras vidas. Teletrabajo, reuniones por video llamada, clases virtuales, compras por delivery, redes sociales y medios digitales forman parte de este nuevo lenguaje cotidiano.

Eugenio Montenegro, licenciado en Comunicación Social (UNER) y fundador y gerente de Grupo Comunicar compartió con MIRADOR ENTRE RÍOS su perspectiva sobre los cambios que trajo esta nueva forma de relacionarnos en nuestras vidas.

–¿Qué cambios introdujo el aislamiento social obligatorio en las relaciones laborales?

–Al haber sido tan disruptivo e instantáneo, todo aún está en movimiento, no hay un “protocolo” estable, se están acomodando y en general prevalece la flexibilidad y la posibilidad concreta que cada empresa en particular tenga y pueda implementar. Así, tenemos casos de soluciones mixtas que van evolucionando. Actualmente hay situaciones laborales que están yendo de un home-office total, otras a un sistema mixto, viendo qué actividades son imprescindibles para la continuidad en forma presencial y otras que definitivamente quedarán fuera del ámbito de la oficina, por lo menos hasta que la pandemia termine. Pero siempre quedará de aquí en más, el tema de las personas de alto riesgo. En estos casos, las soluciones que se implementen serán de muy largo alcance.

–¿Y en las relaciones interpersonales?

–Los humanos somos gregarios, buscamos el encuentro. El impacto ha sido trascendental. Y tenemos los dos extremos, gente que se angustia extrañando, y otros que por tener que convivir todo el día entran en un hastío de la relación. Como dijimos antes, las consecuencias aún están por verse. Estamos aún en la mitad del río. La evaluación llegará bastante más adelante en el tiempo.

Modificaciones

–¿Qué cambios introdujo la cuarentena en nuestra rutina?

–Hemos podido vislumbrar situaciones muy interesantes. Hemos revalorizado el tiempo, el compartir, el estar presentes. Por eso, hay una nueva mirada en cómo utilizamos el tiempo, con quién nos gusta relacionarnos. Hay relaciones que se han fortalecido a las que antes no le dedicábamos tanto tiempo y otras que definitivamente quedarán en el olvido –a las que si le dedicábamos espacio en la agenda–. De la misma forma, hemos revisado nuestras costumbres y hemos encontrado que actuábamos casi automáticamente; ahora, con esta experiencia, luego de la pandemia, seguramente cambiaremos muchos hábitos y relaciones.

–El teletrabajo, ¿ofrece más posibilidades que el trabajo presencial?

–En realidad se está consolidando “de prepo” un formato que se había empezado a utilizar ya hace varios años, con la arremetida de los millennials y su deseo de no trasladarse para trabajar, o elegir espacios más informales, o bien, quedarse en sus casas. La tecnología se movió y mueve en esa línea, generando un sinnúmero de soluciones que facilitan el trabajo colaborativo y virtual que incluye la posibilidad de contar con talentos fuera del territorio.

En la actualidad esto es lo real, el teletrabajo permite acceder a profesionales, empresas, soluciones, grupos de conocimiento que de otra forma (en el trabajo presencial) podríamos decir que sería imposible. Aquí hay una posibilidad muy cierta de aumentar la productividad.

–¿Las relaciones están cada vez más atravesadas por la virtualidad? ¿Cuáles creés que son los cambios que acarreará esta forma de relacionarnos cada vez menos presencial?

–Creemos que habrá una revalorización de la oportunidad de estar presentes, y por ende, estas actividades deberán justificarse, tendrán que “valer la pena” ya que cualquier reunión, hasta tanto no aparezca una vacuna, requerirá un gran esfuerzo en prepararse para asistir, en asegurar sanitariamente el lugar donde se llevará a cabo y luego seguir con los protocolos durante la misma.Y en definitiva, esto no asegurará que el contagio no se pueda producir, sólo reduce la probabilidad.

Entonces, las reuniones presenciales, tienen que justificarse para que una persona haga todo ese esfuerzo. Sin embargo, y como dijimos antes, somos gregarios, y a pesar de todo, buscaremos la manera de volver a estar juntos.

Soluciones a medida

Con más de 15 años de trayectoria, el Grupo Comunicar cuenta con experiencia regional y conocimiento del mercado local, lo que le permite ofrecer servicios innovadores y a medida. Con un amplio e interdisciplinario staff profesional, ha acompañado a más de 300 organizaciones y miles de personas de la región a alcanzar su visión.

Se destacan en la gestión de las organizaciones: con servicios como definición de estructura formal, evolución digital, programas de mejora continua y RSE, entre otros. Brinda servicios de marketing digital, organización de eventos corporativos, promociones, medición de satisfacción de clientes, clínicas de ventas, entre otros. Potencia el talento humano de las organizaciones, con servicios como búsqueda laboral, clima organizacional, incubadora de líderes, entre otros.

“Actualmente hay situaciones laborales que están yendo de un home-office total, otras a un sistema mixto, viendo qué actividades son imprescindibles para la continuidad en forma presencial y otras que definitivamente quedarán fuera del ámbito de la oficina”.
Eugenio Montenegro