Rodrigo Pretto
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Con la intención de la Asociación Rosarina aún latente de jugar algún torneo en el año -si la situación sanitaria lo permite y el gobierno no anuncia un retroceso de fase-, ya son diez las entidades que se dieron de baja por completo y le anunciaron a la Federación Santafesina -que ya había cancelado todos los torneos a su cargo en abril- que la temporada 2020 quedará desierta y no habrá competencia. La Ceresina fue la primera en adelantar el 6 de agosto que no tendría actividad. Luego se sumaron la Interprovincial, la Santafesina, Venadense, Totorense y Sanlorencina. A principios de septiembre la Rafaelina, Casildense, Esperancina, Cañadense y San Martín tomaron la misma postura, aunque algunas se diferenciaron al aclarar que si hay alguna posibilidad intentarán jugar algún certamen.

Con la situación epidemiológica cada vez más compleja y una curva de contagios acelerándose rápidamente y expandiéndose por toda la bota provincial, el fútbol comienza a manifestarse y, de a poco, los directivos resignan las ilusiones de poder armar algún torneo sobre el final del 2020.

Cuando desde el Consejo Federal se anunció que el 7 de septiembre los clubes quedaban habilitados para regresar a los entrenamientos, a los amantes del fútbol le empezó a latir el corazón. Incluso en la liga San Martín hubo una recorrida de su presidente, Juan Dertiano, junto a los directivos de los clubes para exponer ante Municipios y Comunas el protocolo de seguridad armado y poner en marchas las prácticas deportivas.

Pero la pelota se fue pinchando. Los contagios masivos en la provincia volvieron a retrotraer las decisiones. Los entrenamientos previstos para principios de mes quedaron en stand by y regresaron los interrogantes. Así, las ligas empezaron a dejar de lado sus intenciones de hacer competencias sobre finales de año.

Diez instituciones se dieron de baja
Inicialmente fue la Federación Santafesina de Fútbol quien dio el puntapié inicial. En abril hizo oficial que no realizaría ninguna competencia en el año, descartando la organización de la Copa Santa Fe que se venía disputando desde el 2016 de manera ininterrumpida. También desistió de la Copa Federación.

Recién en agosto una liga tomó la decisión de anunciar que la temporada 2020 quedaba desierta. Fue la Ceresina, quien el 6 del mes pasado dejó en claro que no habría actividad. Catorce días después se sumó la Interprovincial de Fútbol, que decidió empezar a pensar en el 2021. "Con la totalidad de los clubes afiliados hemos resuelto la anulación de los certámenes oficiales Temporada 2020, que comprende a las divisiones mayores Primera y Reserva; y las divisiones menores/infantiles Quinta, Sexta y Séptima", anunciaron en el comunicado.

Más tarde la Liga Santafesina comunicó que daba por finalizado el año, una decisión que horas más tarde tomaron en la Galvense. Y en el inicio de septiembre, la Sanlorencina informó que de manera unánime los clubes que componen la entidad adoptaron la decisión de "no realizar ningún Torneo Oficial en la Temporada 2020 en todas sus categorías". La misma suerte corrió la Totorense y la Venadense, que también anticiparon que le bajaron el telón al año futbolístico. Esta última había disputado la primera fecha del campeonato en marzo. El presidente Jorge Bournot abrió una posibilidad de disputar alguna competencia únicamente en divisiones inferiores, siempre que las condiciones sean las adecuadas.

Y el último jueves 3, la Cañadense y la liga San Martín -luego de una reunión vía Zoom con sus integrantes- siguieron la lógica: suspendieron todas las competencias dejando así, el año 2020 sin campeones oficiales.

Las que todavía dudan
Hasta el momento son varias las ligas que esperan novedades y analizan el día a día. No manifestaron, aún, una suspensión pero tampoco dejaron en claro que tienen intenciones de armar algún certamen. "Vamos a esperar y ver cómo avanza todo. Esto es hora a hora", coinciden. La Paivense, Ocampense, Reconquistense, la Liga Deportiva del Sur, Verense y Liga Regional del Sud todavía no tienen una decisión tomada.

Sin campeones oficiales, pero con ganas de jugar
Por el camino del medio van momentáneamente los dirigentes de las ligas Casildense, Rafaelina y Esperancina. Los Comités de las entidades anunciaron que dejaron suspendidos los certámenes previstos para este año en todas las categorías, no habiendo así campeón oficial. Sin embargo, abrieron la puerta ante una posible chance de disputar algún torneo optativo para los clubes a fin de 2020 si la situación sanitaria lo permite.

Una que no pierde las ilusiones

El presidente de la Asociación Rosarina, Mario Gianmaría, ya dejó en claro que esperará antes de dar por finalizada la temporada. La intención del directivo es, al menos, poder jugar algún reducido. Y a pesar de tener la región más complicada de la provincia, mantiene viva la llama de una posible competencia. Así las cosas, adelantó que si el gobierno provincial anuncia el retroceso de fase, como se espera, desestimará toda chance de organizar un torneo en lo que resta del año.