Durante el encuentro, realizado el martes 17 de febrero en el Ministerio de Agroindustria de la Nación en la Capital Federal, Buryaile adelantó las medidas que impulsarán para mitigar los impactos ocasionados por la emergencia hídrica que afecta a la región-centro del país, especialmente Santa Fe y Córdoba.
En primera instancia, explicó que se prorrogarán los vencimientos impositivos nacionales, y que se extenderán créditos del Banco Nación “con una tasa del 12 por ciento anual, con cuatro años de plazo más uno de gracia”. Asimismo, explicó que le preocupa la situación de los pequeños productores, "quienes rara vez tienen la posibilidad de estar bancarizados". Se comprometió a “ayudarlos, porque generalmente son los más vulnerables”.
Estas medidas en conjunto con el Banco Nación serán las de más pronta resolución. El resto de los trámites “van a llevar su tiempo porque hay que mantener un protocolo, como la realización de un listado de productores”, explicó el ministro.
Buryaile sostuvo además la importancia de utilizar de forma inteligente los fondos dispuestos por la ley de emergencia agropecuaria. Esto es, no repartirlos a discreción, sino “focalizar el trabajo de acuerdo a las necesidades en conjunto”. Para lograrlo, planteó la conformación de un consorcio compuesto por los ministerios competentes y el comité de cuenca.
En base a este punto solicitó “un plazo de tiempo para planificar las estrategias a ser analizadas”. También se comprometió a ponerse en contacto con los gobernadores implicados (“Miguel Lifschitz tiene buena voluntad”, resaltó) y con Presidencia de la Nación.
La reunión terminó con un detalle de las intenciones de gestión que mantiene el Gobierno nacional. El ministro dijo que “las políticas a largo plazo se caracterizarán por ser previsibles”. Esto es, que siempre se buscará “la apertura al comercio internacional, el financiamiento, la baja en la presión impositiva, y el brindar infraestructura al productor”. Y añadió: “No creo que tengamos que ser el árbitro de una compulsa entre mercado interno-externo, sino que tratamos de dirigir a través de políticas y no con decisiones arbitrarias”.