ALDANA BADANO
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La Feria de Intercambio de Semillas Nativas y Criollas tendrá su primera edición el sábado 16 de octubre en los miradores de Bajada Grande, ubicados en Av. José Manuel Estrada y Av. Larramendi de la ciudad de Paraná. La propuesta, que se desarrollará desde las 10 y hasta las 19, tiene como eje vertebrador la concepción de las semillas como “un bien común, patrimonio de los pueblos al servicio de la humanidad”.

La propuesta es generar un espacio de encuentro y reflexión en torno a la importancia de las semillas para la producción de alimentos a partir de principios agroecológicos sensibilizando sobre la importancia de las semillas como bienes comunes. A su vez, posibilitar el encuentro entre integrantes de Potenciar Trabajo y del Programa de Huertas Comunitarias para intercambiar saberes y conocimientos junto a otras/os actores de la sociedad.

Durante la jornada se entregarán semillas correspondientes de la temporada primavera-verano del Programa Pro Huerta en articulación con INTA y plantines a las huertas comunitarias que integran el Programa. Además, a partir de las 12 se desarrollará un panel de experiencias: “Las semillas, bien común”. Durante la siesta habrá actividades simultáneas: taller de alimentación sobre jugos, taller de bioinsumos, taller de alimentación: “Las semillas en la comida” y taller de juegos para las infancias. A partir de las 16, se desarrollará un taller sobre conservación y almacenamiento de semillas y un panel de experiencias sobre producción agroecológica. A partir de las 18, habrá espectáculos culturales para finalizar el encuentro.

Esta jornada surge a raíz de la importancia que tienen las semillas en la producción. Los organizadores del evento explicaron que “las semillas son fruto de la naturaleza y en ese sentido son consideradas un bien común, son obra y parte de la historia de los pueblos. En esa historia la creatividad, experimentación y el cuidado colectivo de indígenas, campesinos/as, productores/as y comunidades es la que ha permitido que la base fundamental del sustento de las personas se recolecte, almacene, conserve, circule y se comparta”. Justamente, imitando esta práctica ancestral es que se planificó este encuentro que pretende tejer redes entre los vecinos de Paraná para generar otro tipo de producción y, en consecuencia, otra alimentación.

“La interacción de las comunidades con la naturaleza ha creado diversidad biológica y posibilitado alimentar a los pueblos. El surgimiento de la agricultura es en base a ese proceso donde las semillas comienzan a ser distinguidas, seleccionadas, mejoradas en un juego dialéctico que permiten el desarrollo de las agriculturas de un país. En ese sentido son un bien imprescindible, porque son el primer eslabón de la mayoría de las cadenas agroalimentarias y porque todo lo que comemos empieza con una persona que en algún lugar la plantó, posibilitando que ese alimento llegue a nuestras mesas”, indicaron desde la organización.

Organizan esta jornada: la Subsecretaría de Economía Social de la Municipalidad de Paraná, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Secretaría de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.