BELÉN FEDULLO
[email protected]
La noche estaba tranquila, el descenso de temperatura hizo que las calles se vieran vacías, y en medio de esa escena los gritos desesperados de una madre advirtieron al efectivo de la Policía de Entre Ríos, Mauro Altamirano, quien se encontraba cumpliendo tareas de custodia en la zona de calle Odiard al 2500 de la ciudad de Concordia.
La pequeña por la que la mamá pedía, de casi un año de vida, ya no respiraba cuando el agente acudió al pedido desesperando de auxilio y comenzó a realizar los trabajos de reanimación. Algunos minutos después, la nena rompió el llanto y volvió a respirar.
La madre de la menor y los vecinos felicitaron y aplaudieron el accionar de este agente presta sus servicios en las calles de la capital del citrus.
La bebé se encuentra en buen estado de salud y fuera de peligro.
[email protected]
La noche estaba tranquila, el descenso de temperatura hizo que las calles se vieran vacías, y en medio de esa escena los gritos desesperados de una madre advirtieron al efectivo de la Policía de Entre Ríos, Mauro Altamirano, quien se encontraba cumpliendo tareas de custodia en la zona de calle Odiard al 2500 de la ciudad de Concordia.
La pequeña por la que la mamá pedía, de casi un año de vida, ya no respiraba cuando el agente acudió al pedido desesperando de auxilio y comenzó a realizar los trabajos de reanimación. Algunos minutos después, la nena rompió el llanto y volvió a respirar.
La madre de la menor y los vecinos felicitaron y aplaudieron el accionar de este agente presta sus servicios en las calles de la capital del citrus.
La bebé se encuentra en buen estado de salud y fuera de peligro.
Además tenés que saber:
+ Noticias
En Portada / Entre Ríos
En Portada / Santa Fe