Mario Cáffaro | [email protected]

Este domingo 14, el electorado santafesino define sus tres senadores para los próximos seis años y nueve de sus diecinueve diputados para cuatro años posteriores.

Las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias dejaron conformadas las grillas en cada frente electoral. Tuvieron mucha mayor virulencia que en esta campaña final donde los candidatos parecen trabajar para fortalecer el piso alcanzado para luego intentar crecer. En el medio, una ciudadanía apática y con mucha desconfianza en su sistema político. No es para menos ante los graves indicadores sociales y los problemas económicos agravados por la pandemia.

Juntos por el Cambio, el Frente de Todos y el Frente Amplio Progresista (Fap) tienen la mayor expectativa en quedarse con las doce bancas en juego en nuestra provincia. Los restantes espacios políticos parecen estar muy lejos y en uno de ellos -Primero Santa Fe- estallaron las diferencias entre Jorge Boasso y Luis Contigiani que hicieron que éste renunciara a la disputa por la banca en la Cámara Baja.

Un dato relevante es que desde 1983, en la provincial el PJ -con sus diferentes frentes- prevaleció en la elección de senadores nacionales. Ya sea por la elección indirecta o -a partir de la reforma constitucional de 1994- en la elección directa. Está invicto desde la designación, en 1983, por la Legislatura de Angel Celestino Marini y Liliana Gurdulich de Correa hasta Omar Perotti y María de los Angeles Sacnun en 2013. El radicalismo santafesino hace desde 2003 que no ocupa un lugar en la Cámara Alta. Allí terminó su mandato Horacio Usandizaga y luego la silla de la minoría la ocupó durante dos períodos Rubén Giustiniani representando al socialismo. Seis años atrás, la minoría fue para Carlos Reutemann desde la escudería Pro.

Juntos por el Cambio nacionalizó la elección y reforzó, con los principales dirigentes de la coalición, la campaña en Santa Fe para respaldar al joven binomio de Carolina Losada y Dionisio Scarpin. En tanto Perotti encabezó la campaña del Frente de Todos. En la Paso logró constituirse en jefe indiscutido del peronismo y puso a las puertas del senador al rosarino Marcelo Lewandowski.

En el FAP, tras la Paso, el peso de la campaña recayó en el socialismo y especialmente en las dos mujeres que encabezan sus listas: Clara García y Mónica Fein, ésta última con grandes chances de volver a la Cámara de Diputados tras una década.

La elección de legisladores nacionales se completará con la de intendentes, concejales y presidentes comunales. Del análisis de los números que arrojen las urnas, la política empezará a pensar 2023. La ciudadanía pedirá una pausa y que la política se encargue de bajar los decibeles de confrontación y empiece a trabajar en mejorar las condiciones de vida de una conflictuada argentina.

Intendentes

Además de la elección de senadores y diputados nacionales, en Santa Fe se harán en forma simultánea las elecciones para elegir 14 intendentes de otras tantas ciudades, la renovación de la mitad de los concejales en cada municipio, a excepción de dos que integrarán su primer cuerpo, y de todas las autoridades comunales.

En cada localidad de la provincia la elección se vive de manera diferente y con mayor énfasis en las 14 ciudades que eligen sus intendentes por cuatro años. De esas 14 ciudades, en 13 sus intendentes van por la reelección. Con dos salvedades, en el caso de San Vicente y de Sauce Viejo será la primera vez que se elegirá intendente y los actuales jefes comunales, Rodrigo Aira (Frente Progresista) y Pedro Uliambre (Frente de Todos) aspiran a seguir al frente de los ejecutivos. La otra excepción es San Guillermo donde Romina López (Cambiemos) ocupa el cargo tras el fallecimiento de Daniel Martina (PJ) en agosto de 2019. Las elecciones para completar el mandato quedaron suspendidas por la pandemia y la concejala está al frente de esa administración desde hace más de dos años.

El único intendente que no va por la reelección es Fernando Almada quien lleva varios años al frente de la Municipalidad de El Trébol (dpto San Martín). A la hora de definir candidaturas adujo cansancio. El justicialismo que siempre administró esa ciudad quedó dividido en dos sectores.

La elección de intendentes de esta catorce ciudades obedece a que lograron la categoría de ciudades desde 1983 a la fecha y utilizaron las elecciones de medio término para constituir sus concejos y sus ejecutivos. En forma simultánea, San Vicente y Sauce Viejo definen sus seis primeros concejales mientras que en las doce restantes se designarán tres ediles por cuatro años.