Finalmente, la cruz de la cúpula de la parroquia San Lorenzo Mártir está terminada. Aquella, de 9,5 metros de alto que se cayó el 16 de enero de 2022 en una tormenta, tras custodiar el cielo de El Trébol durante 90 años, ya tiene su reemplazo. Construida por industriales, artesanos y fieles de la ciudad, se realizó una réplica exacta a la que se colocó en 1932 en lo más alto de la iglesia local.

Se utilizaron materiales originales y algunos nuevos. Hubo que reemplazar bronce que fue robado cuando la cruz se cayó y se sumó acero inoxidable, para la base de la cruz.

El resultado es una copia exacta, con el pararrayos y la veleta en forma de “gallito” incluída, de 600 kilos, que habrá que subir 50 metros, hasta la cúpula de la parroquia.

El pasado 10 de agosto, la cruz, recibió también su bendición. Fue en una misa, pautada en la vereda de la iglesia, en el día del santo patrono de la ciudad: San Lorenzo Mártir.

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En la ceremonia tomó la palabra la intendente municipal, Natalia Sánchez, que emocionada dijo: “Lo que vivimos hoy, marca la esencia de una ciudad como el que vivimos. Esta cruz, custodió el cielo de El Trébol desde el año 1932, durante 90 años. El viento, el clima y el paso del tiempo, la derribaron, como muchas cosas se caen en algún momento. Sin embargo, lo bueno está en volver a levantarse, en volver a empezar. Eso nos hace fuertes. La endereza de una ciudad, de su gente y de sus trabajadores, volvió a poner de pie un símbolo que pinta nuestra historia, nuestros orígenes, nuestro pasado. Hoy vivimos un hecho histórico. Más allá de la maravilla de esta restauración, simbólicamente, le mostramos a los que nos sucederán, lo que es volver a empezar, volver a estar de pie. Hoy vivimos y festejamos el afianzamiento de nuestra historia, de nuestro ayer, para así, poder mirar juntos, hacia un mañana mejor”.

Seguidamente, el arzobispo de Santa Fe, bendijo la cruz, que lucía acostada, en la puerta de la iglesia. “Le pedí a Claudio –el cura local– que no dejara de llamarme cuando la cruz estuviese lista y así fue y acá estoy. No puedo no estar emocionado y me pongo en el lugar de toda la ciudadanía y lo que siente en este momento”, señaló Fenoy tras la bendición de la flamante cruz.

La ceremonia, fue seguida por la presencia de unos trescientos fieles, que no quisieron perderse detalles de semejante hecho histórico para la ciudad.

Resta aún saber, cuándo se colocará la cruz, en la cúpula del templo católico, a 50 metros de altura. Se habla, que el ascenso sería mediante la utilización de un helicóptero. “Estamos gestionando y golpeando puertas para poder terminar con lo que empezamos. Ya reconstruimos la cruz, ahora hay que subirla a lo más alto” explicó el cura párroco Claudio Bianculli.