Hagar Blau Makaroff


En su 43ª edición, los Premios Konex 2022 de Artes Visuales, cuyo jurado preside el artista Luis Felipe Noé, dieron a conocer la nómina de un centenar de artistas, escultores, diseñadores, colectivos, ilustradores, arquitectos y humoristas gráficos reconocidos por sus aportes al campo de las artes, en la última década, mientras que las menciones especiales por trayectoria fueron para Liliana Porter y Rubén Fontana, y el Konex de Honor, para Quino. Marta Minujín en la disciplina Arte en Espacio Público; Gabriel Chaile por sus obras en Arte con Fuego; Magdalena Jitrik en Pintura; Adriana Bustos en Dibujo; o Claudia Fontes en Escultura, son algunos de los artistas de esta edición de los Konex de Artes Visuales, que distingue la tarea desarrollada en distintos campos entre 2012 y 2021. En total, son 100 los hacedores premiados, de los cuales se seleccionan cinco por cada una de las 21 disciplinas.

Los nueve rosarinos
Los Premios Konex diplomas al Mérito, se entregarán el martes 13 de septiembre y allí los recibirán nueve artistas rosarinos en sus respectivas disciplinas, y ellos son Nicolás Campodónico (Arquitectura), Leo Battistelli (Artes del Fuego), Claudia del Río (Dibujo), Max Cachimba y María Luque (Humor e Historieta), Guillermo Decurgez (Ilustración), Ana Gallardo (Performance), Eugenia Calvo y Adrián Villar Rojas (Instalación).

Max Cachimba es autor de historietas cómicas y trágicas, ilustrador de libros, revistas y pintor de caballete dominguero. Desde 1985 su trabajo se focaliza en el dibujo y la narración, tanto en ámbitos de prensa o editoriales como autor de historietas e ilustrador de libros (algunas incursiones esporádicas en el dibujo animado y el teatro de objetos). Participa en circuitos de artes visuales con una producción alternativa de pinturas, dibujos y collages.

Claudia del Río es artista visual, educadora y curadora. Vive y trabaja en Rosario, donde estudió la licenciatura en Bellas Artes por la UNR y da clases. En 2002 cofundó Club del Dibujo, un espacio de pensamiento y acción y, desde 2006, el proyecto Pieza Pizarrón (Lehrstück), dispositivo de dibujo, teatro y pedagogía, proyecto que continúa. Es representante argentina en diferentes bienales y residencias internacionales. Sus obras se encuentran en colecciones públicas y privadas del país, y del extranjero.

Guillermo Decurgez es reconocido por su seudónimo “Decur”. Es historietista e ilustrador de fuerte carácter autodidacta, fue albañil y operario de una fábrica automotriz. Logró cambiar ese mundo gris que lo deprimía por otro pleno de colores. Su obra está inspirada por el trabajo de Quino, Caloi, Fontanarrosa, Liniers, Jorge González y Atak. Ha publicado cinco libros de su autoría, y exhibido sus ilustraciones en Francia, España, Chile, Bolivia, Colombia y Argentina.

María Luque tiene una vocación por lo artístico desde pequeña, dibuja todo lo que le resulta interesante, desde obras de un museo, libros, objetos de una casa, entre otros. Estudió Bellas Artes en la Universidad Nacional de Rosario. Publicó su novela gráfica Casa transparente, un relato autobiográfico que obtuvo el Premio de Novela Gráfica Ciudades Iberoamericanas que organiza la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI). Realizó la muestra Lejos de Internet en la Galería Mar Dulce, en el barrio de Palermo, en Buenos Aires, donde incluyó una selección de 28 pinturas. Sus trabajos son exhibidos en museos y galerías de Argentina, Chile, Perú, México y España.

Eugenia Calvo cursó la licenciatura en Bellas Artes. Realizó clínica de obra con Claudia del Río (2000) y Daniel García (2003). Concurrió al workshop El Levante (2003-04). En el 2004 fundó, junto con otras cuatro personas el espacio Roberto Vanguardia. Trabaja en proyectos de diversos formatos, entre otros fotografías, videoinstalaciones, instalaciones e instructivos. Su relación entre los objetos y el espacio es una constante en su trabajo. Su obra forma parte de las Colecciones Institucionales: Museo Castagnino+macro, del archivo audiovisual de la Mediateca de La Caixa, Cifo (Cisneros Foundation) y de la colección permanente de la Fundación ArteBA.

Los proyectos de Adrián Villar Rojas, producidos colectiva y colaborativamente, son concebidos como instalaciones site-specific a gran escala, imponentes y frágiles. En su práctica, una mezcla entre escultura, dibujo, video, literatura y gestos performáticos explora las condiciones de una humanidad al borde de la extinción o ya extinta, en una era pos-antropogénica en la cual pasado, presente y futuro convergen. Participó en las Bienales de Gwangju, Estambul, Sharjah, La Habana y Venecia, y en Documenta, entre otras.

Ana Gallardo es autodidacta, de padres artistas, hereda la capacidad de atravesar las prácticas artísticas. Vivió en México desde finales de los '80 y principios de los '90. Trabajó en paralelo a su obra, en una serie de proyectos independientes dirigidos a dar visibilidad a prácticas que no ingresan a los circuitos hegemónicos y a vincular artistas mujeres, principalmente y de distintas generaciones. Le interesan los procesos de trabajo, darle valor a todos aquellos estados que generan dudas, incertidumbre, malestar. Aborda diferentes planos de la violencia, entre ellos la violencia del envejecer.

Nicolás Campodónico es arquitecto por la Universidad Nacional de Rosario (medalla de plata). En 1996 trabajó y continuó su formación en España. En 2000 estableció su estudio profesional en Rosario. El desarrollo de sus proyectos es, en esencia, una reflexión sobre luz, espacio y materia, inmersa en la realidad físico-cultural latinoamericana. Dichos elementos se entrelazan y se ubican en el primer lugar a la hora de describir su idea sobre la arquitectura.

Leo Battistelli estudió Bellas Artes en la Universidad Nacional de Rosario. Esculturas, pinturas, instalaciones, fotografías, diseño y curadurías de exposiciones son parte de su quehacer artístico, en el cual la belleza no es una armonía visual ni formal, sino una forma de energía, una intensidad tan sutil como poderosa, que transforma las cosas, las relaciones y las situaciones. Cada una de las obras es una puesta en escena ritual y también una celebración pagana.