José Prinsich
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La trayectoria de Hugo Mena con la música es intachable y digna de admirar. Con sus 50 años, el guitarrista gualeyo tuvo el honor de subir infinidad de veces a un escenario para demostrar lo que sabía hacer con las cuerdas. Fue así como llegó a presentarse en los convocantes festivales de Cosquín, Corrientes y Jesús María, en el prestigioso Luna Park o en el aclamado "El Ateneo" de Buenos Aires, sin contar las giras por el exterior.

Más allá del fructífero currículum artístico del entrerriano - que compartió gratos momentos con referentes de la talla de Ramona Galarza, Mario Boffil, Víctor Velázquez, Argentino Luna, Antonio Tarragó Ros y Luis Landriscina, hay una faceta que lo define como persona y que lo ha marcado por completo durante todo este tiempo: la docencia. Su amor y afecto por los gurises de las Islas del Ibicuy es inconmensurable. La dedicación puesta en cada clase no tiene comparación ni siquiera con los discos publicados, los reportajes periodísticos o los miles de personas que puedan entrar en un auditorio.

El ímpetu y esas ganas locas de generar contenido en pos de la cultura hicieron que Mena no se quede quieto un segundo, aun así en tiempos de pandemia. Después de tres años de intensa labor, el fruto de esas hermosas jornadas áulicas -cargadas de charlas, risas y amistad- confluyó en un material discográfico denominado "Ecos del Río 2".

Para el disco participaron 1.300 alumnos y ex alumnos, muchos de ellos pertenecientes a 26 escuelas de Islas del Ibicuy, Villa Paranacito, Ceibas Gualeguay, Federación, Federal y Paraná. Además de la colaboración de profesores, Roberto Romani y Antonio Tarragó Ros dijeron presente con sus voces y recitados. Dichos registros fueron logrados en el 2018 y remasterizados dos años más tarde.

Sobre el proceso de creación del CD, Mena explico que "los junté en las islas, en las aulas y en las aguas. Me propuse darles vida y acá están. Son gurises que conozco, quiero y admiro desde siempre. Muchos fueron mis alumnos, otros conocí a través de tantos años y algunos eran siempre muy recomendados por los profesores. Entonces, los convoqué al fogón y al son de mi primer acorde vinieron decididos".

"Con entusiasmo fuimos enredándonos en jornadas musiqueras, de esas que unen y abrazan. Ahora ya es un disco, que se inició conmigo, acá a mi lado y fue chapaleando con empeño desde que era la nada misma. Le costó muchísimo, caminó y caminó juntando chispitas, tratando de alcanzar la luz, creció y creció", dejó en claro a Mirador Entre Ríos. Y agregó: "Recuerdo que a su corazón le fui dando golpecitos con mis latidos hasta que un día, para mi alegría, oí que arrancó. Entonces esas lágrimas contenidas en mi pecho se treparon triunfales a llorar felices en mis ojos, debe ser por el peso del cariño que con cada uno de los gurises le hemos puesto".

A grabar se ha dicho

La relación con los niños y niñas del sur de la provincia comenzó a gestarse en 1997, cuando Hugo hacía sus primeras experiencias como docente de música. El hombre de Gualeguay tenía la noble tarea de enseñarles guitarra. La adhesión del grupo fue total lo que les permitió conformar una pequeña orquesta para presentarse en la región. Al poco tiempo, con el objetivo de inmortalizar sus voces en el tiempo para dejar un granito a arena a la comunidad educativa, Mena comenzó a registrar algunas canciones. De la mano de su portastudio, una grabadora multicanal a cinta, daba sus primeros pasos.

"En Islas no es como en el pueblo, que van caminando los gurises. Allá tenés un movimiento de lanchas. Fuimos con un estudio de grabación y nos juntamos en Ibicuy, Paranacito, Gualeguay y grabamos las voces de chicos de 20 escuelas. Ahí empecé con esto de las grabaciones. Ese disco se llamó "Viento en Popa", donde estuvo colaborando Antonio Tarrago Ros. Eso fue en el 2003", expresó.

Ese fue el puntapié inicial de un montón de producciones sonoras y audiovisuales que llegaron más adelante y que convocaron a miles de chicos y chicas de todo el territorio provincial, entre las que se atesoran "El Alma Entrerriano", "Bien de mi pueblo", "Ecos del Ríos <0x2014> Volumen 1", "Compañía Luz", "Escenario de los sueños", entre otros. Este último material convocó no sólo a 4320 alumnos sino también a referentes de la música provincial como Hugo Spiazzi, Damián Lemes, Marcos Pereyra, Pajarito Silvestre, Mariela Campodónico y Juan Bernigaud.

"Todas estas cosas se hacen a pulmón. Como nunca recibí apoyo, me costaba armar algo con toda esta situación de la pandemia. Yo no tengo otro tipo de ingreso más que el de la escuela. Antes daba clases, tenía talleres de guitarra, de canto, grabaciones en mi estudio de grabación, las actuaciones con Antonio Tarrago Ros. Pero ahora no tengo nada de eso. Entonces me costaba sacarlo al disco", sostuvo el reconocido guitarrista, quien contó en esta oportunidad con la participación de su hijo, Celestino Mena.

Sensaciones

-¿Qué te genera cantar con los chicos?

-En los gurises está la pureza, la claridad porque sus voces son lo más genuino. Es hermoso entrar a una cancha de futbol y que todo el mundo cante tu canción. Con los gurises pasa algo así cuando cantan con vos. Es algo muy puro y transparente, que está muy lejos de la maldad. Es algo sublime escuchar sus voces, más allá del resultado final. Yo no tengo tiempo para ir a preparar un coro, les paso las canciones. En eso caigo yo con mi máquina para grabar con todos los ruidos que pueda haber en la escuela. Cuando es el recreo tengo que parar. Es una satisfacción emocional para mí. Esto me conmueve.

-El río es un denominador común en la música de los entrerrianos

-Soy de Gualeguay, pero desde el 97 que ando en islas y me hice pescado de esa zona. Laburé muchísimo en escuelas de islas, que están en continuo contacto con el agua. En el primer disco "Ecos del Río" todas las canciones tienen que ver con el río. Ahora, con este volumen 2, si bien las canciones se fueron un poco del río, todos los intérpretes tienen una relación con el río, el agua y la zona. El río forma parte de la vida del isleño. Yo me considero un isleño que nació en otro pago. Amo y defiendo esto porque me gusta esto. El río era mi cable a tierra. En Paranacito vivía en una casa que estaba a 10 metros del río, en el medio de la isla. Me pasaba horas guitarreando. Era una comunión entre el río, el agua y la música, los pájaros, la soledad. Era un ritual, una misa que me encanta hacer.

-¿Qué significó Antonio en tu carrera profesional?

-Una de las cosas más importantes de la vida fue encontrarme con Antonio. Era admirador de él. Un día conseguí su teléfono, lo llamé y lo invité a grabar en uno de mis discos, que se llama Viento en Popa. No tenía un mango y él vino a grabar con los gurises. Ahí nos encontramos y continuamos hasta hoy. Llevo 27 discos grabados con Antonio. Hace 15 años que estoy con él. Aprendí muchísimo de editar, arreglar. Es muy abierto, me ha enseñado a producir, cómo grabar. Muy predispuesto. Acá en mi casa es uno más. Somos una familia. A parte de ser mi patrón, es un amigo. Es un honor que me pase esto con él.

-¿Tienen algo en carpeta juntos?

-Estamos por hacer un disco con canciones de amor que él tiene. Me habló para conformar un cuarteto con bandoneón, dos guitarras, un contrabajo y su acordeón. Esta semana estuvimos en Villa Elisa (Buenos Aires) tocando. Estamos haciendo algunas cositas y retomando poco a poco, pero desde febrero que no tocamos en ningún lado.

Detalles del disco

A diferencia de la primera edición, lanzada en el 2015, este volumen 2 contiene 19 canciones entre las que se destacan Chamarrita, milonga, chamamé, vals, zamba, tango y rasguido doble. El repertorio de "Ecos del Río 2" está integrado por las siguientes canciones: "Para cantar chamarritas" de Miguel Ángel Morrelli, "María va" de Antonio Tarragó Ros, "La leyenda de las golondrinas" de Roberto Romani, "Entre Amigos" de Pedro Risso, "Navidad Islera" de Néstor Basini, "Motivos" de Abel Pintos, "Honrar la vida" de Eladia Blazquez, "Mi pueblo Ibicuy" de Eduardo Díaz, "Quiero ser tu sombra" de Héctor Quattromanos, "Zamba del carnaval" de Gustavo 'Cuchi' Leguizamón, "Que tango hay que cantar" de Cacho Castaña, "Pedro Canoero" de Teresa Parodi, "Ya no hay forma de pedir perdón" de Elton John y Bernie Taupin, "Juan del Gualeyán" de Juan Carlos Mondragón y Vicente Araoz, "Alfonsina y el mar" de Ariel Ramírez y Félix Luna, "Volver a amar" de Kike Santander, "Por el río volveré" de Teresa Parodi, "Tambor de la libertad" de Roberto Romani y "El gurí Atamá" de Hugo Mena y Roberto Romani.