Diego Montejo


Este viernes y sábado a partir de las 20 en la Usina Social (Jujuy 2.844, Rosario), la banda rosarina de tango fusión San Telmo Lounge, presentará con dos conciertos su séptimo disco Tango Animal, un álbum conceptual donde cada canción alude a diferentes conductas humanas por analogía con algún animal.

En este trabajo la banda rompe con su universo de tango electrocool para ofrecer un concepto más visceral, rupturista y contundente que atraviesa mundos que pasan, sin intermezzos, de la nostalgia extrema hasta la más sórdida ensoñación. No es casual que este disco cuente con la producción de Acho Estol, quien aporta un concepto sonoro más cercano al de banda en vivo con destellos de aires criollos y una búsqueda instrumental orgánica, en la línea de Tom Waits y Nick Cave. Martín Delgado, fundador de esta agrupación, dio detalles a Mirador Provincial sobre este disco y su presentación este fin de semana.

-¿Creen que su tango es una forma también de demostrar nuestra identidad cultural desde una postura vanguardista?
-El tango está en el ADN de la música argentina, tal vez no lo percibimos, pero si uno agarra las canciones de Fito Páez, Charly García, Andrés Calamaro o Luis Alberto Spinetta, está lleno de tango eso. Lo nuestro no diría que es desde el lugar de la vanguardia, más bien desde el lugar de las fusiones y porque somos una generación que se hizo escuchando música de muchos géneros y eso está a la vista en cada una de las propuestas que hacemos.

-¿Sobre este disco, qué podrían destacar, podrá decirse que es un formato conceptual o solo una elección azarosa?
-Es querer hacer algo un poco diferente a lo que nosotros hacemos, es decir que ante un nuevo desafío de hacer un disco y recopilar canciones, más allá de la temporalidad, buscamos motivar a la escritura, en otro momento fuimos por un formato más electrónico y de a poco fuimos virando hacia las canciones con un disco en vivo, después un disco doble y ahora esta ocurrencia de una obra conceptual que trabaja sobre las conductas humanas y su relación con los animales.

-¿Por qué son los animales los que aparecen, qué relación tienen con vos y con cada uno de los integrantes de la banda?
-Al principio eran muchos porque empecé este trabajo con más de 20 canciones de las cuales el productor eligió 11 y de esas quedaron nueve. Ninguna de ellas tiene que ver con nosotros, pero sí tienen una inspiración en la literatura como en libros de Roberto Bolaños, Emmanuel Carrère y otros autores que a mí me gustan para usar como fuente de inspiración.

-¿Crees como impensado esto de plantear músico de rock o músico de tango, no es como un cliché decir estas cosas que separaron a la música?
-Esto de identificar a los músicos con sus géneros me divierte. Por ejemplo, que el tanguero tenga una conducta de pertenencia a un barrio. Igual pueden ser muchas otras cosas, que el tanguero tenga mucho de rockero o el caso de los músicos de folclore que suelen estar acostumbrados a tocar en peñas e improvisar muy bien. Otro es el caso de los músicos clásicos que su ámbito los hace leer mucha música, pero al fin de cuentas todos sentimos el mismo amor por la música y a los músicos suele gustarnos todo. Creo que el que sabe apreciar las cosas buenas no divide los géneros.

-¿Cómo fue grabar en ION y qué sensaciones te produjo estar en un estudio donde grabaron artistas de la talla de Piazzola y Charly García?
-Fue una idea del productor. Más allá de las místicas de los estudios, donde uno piensa que por acá pasó todo el mundo, uno también piensa en las cuestiones técnicas y operativas. Es linda la magia de un lugar así, ION es un estudio que tiene por sobre todas las cosas una acústica impresionante y si uno busca determinado sonido debe ir allí, pero después uno no deja de ser quien toca esa música.

-Acho Estol es el productor, un tipo con mucho recorrido en el género. ¿Qué cosas les propuso y cómo se dio esa comunión entre músicos y productor?
-Es la primera vez después de muchos discos que trabajamos con un productor. En los trabajos anteriores esa tarea estuvo a mi cargo, pero esta vez me dieron ganas de delegar algunas funciones con la idea de lograr cambiar el resultado del disco con alguien que tenga una mirada externa o pudiese hacer algunas críticas más allá de las que hacemos nosotros los músicos. El caso de Acho en este rol lo pensé desde el primer momento que surgió la idea de grabar este disco porque es un tipo que es parte del género y siempre suele estar en las cosas más nuevas. Además sabía que no le gustaba el tango electrónico y también fue un poco a propósito. Y terminamos en un disco que no es de tango electrónico. Es otra cosa diferente.

Integrantes de la banda

Martín Delgado (en guitarra, composición y arreglos), Maximiliano Natalutti (en violín), Ariel Aguilar (en bandoneón), Laura Cardini (en voz), Sebastián Mamet (en batería), Tutu Rufus (en bajo eléctrico) y Danae Mamet (en piano).