El cementerio de la ciudad de El Trébol volvió a tener una mañana triste y no por lo que en sí, significa el lugar, sino por la visita de bandidos nocturnos que una vez más vandalizaron y saquearon tumbas. Este 12 de mayo, este lugar de supuesta paz y recogimiento, que tiene esta ciudad del departamento San Martín, repitió una vieja historia que ya es moneda frecuente en los últimos años.

Utilizando barretas de hierro, extraídas de un pequeño casillero donde los empleados del sector tienen sus herramientas, se dieron maña para arrancar placas, jardineras y extraer cuanto objeto de valor creían tener enfrente suyo. Tal fue la brutalidad y la rudeza del accionar, que hasta rompieron mármoles y arrancaron pedazos de mamposterías para lograr sus viles cometidos.

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“Se robaron un caño que utilizamos para revolver la cal y lo utilizaron como barreta. Rompieron un montón de cosas y mancharon con cal varios nichos. Buscaban bronce y se llevaron lo que tenía valor y el resto lo dejaron tirado”, señaló a este medio Luis Lazzo, encargado del cementerio local.

Accionar repetido
No es la primera vez que el cementerio de la ciudad de El Trébol, sufre este tipo de destrozos y despojos. Desde hace algunos años, la historia se repite en diferentes sectores del lugar. Al principio los robos se producían en los antiguos nichos del ala sur y en las viejas tumbas que ya tienen décadas. Ahora el accionar tiene lugar frecuentemente en el sector nuevo.

“Ya hace cuatro o cinco años que viene pasando esto. Hacemos denuncias pero nunca pasa nada. A veces creo que el cementerio es un territorio de nadie”, señaló Lazzo y agregó: “Es doloroso para los familiares que vienen a visitar a sus seres queridos y se encuentran con los nichos rotos y las placas robadas”.