El Concejo santafesino volvió a debatir -de momentos en ásperos términos y por unas dos horas- la problemática de la inseguridad en la ciudad. Y el disparador fue un pedido de informes con un texto acordado entre un concejal oficialista y dos opositores, solicitando que se realicen gestiones ante Nación y Provincia para que se informe el detalle de "la cantidad de personal de Gendarmería y de equipamiento que se enviará al territorio provincial, y su distribución; y la creación de un comando para coordinar la seguridad en la provincia, sus funciones, objetivos y emplazamientos o no en esta capital".

También, se requirió saber sobre la instalación de un nuevo destacamento fijo de Gendarmería; "la existencia de nuevos juzgados federales en la ciudad; y la cantidad de personal perteneciente a las fuerzas federales enviadas, desde el período comprendido entre octubre de 2021 y el 30 de abril de 2022". Asimismo, se solicitó el "urgente incremento de efectivos de las fuerzas federales de seguridad en la ciudad de Santa Fe", reza el texto sancionado. 

Pero el foco de las polémicas dentro del recinto se corrieron hacia la "no invitación" del intendente Emilio Jatón a la reunión realizada para definir políticas antidelito entre el presidente Alberto Fernández, el gobernador Omar Perotti y el intendente rosarino Pablo Javkin, días atrás en Buenos Aires.

Desde la oposición exigieron más "personalismo y liderazgo" del primer mandatario local para enfrentar la inseguridad en Santa Fe; por otro lado, la defensa a la actual gestión vino del interbloque oficialista, donde se cargaron las tintas por el "destrato" del presidente nacional hacia el intendente, y la "falta de federalismo".

Minimización y destrato

Hugo Marcucci (UCR-Juntos por el Cambio) recordó como "un lamentable dato" que la tasa de homicidios cada 100 mil habitantes en esta capital es casi similar a la de Rosario. Y aludió a la reunión entre Fernández, Perotti y Javkin, a la que no fue invitado el intendente santafesino. "La ausencia en esa reunión nos hace inferir que se esté minimizando el problema de la inseguridad en esta capital", dijo.

"Sabemos que hay 80 ó 90 efectivos federales hoy en la ciudad, cuando en otras épocas hubo el doble o el triple (de ese número). Santa Fe tiene que, en la figura del intendente, reclamar enérgicamente más efectivos: la seguridad es una de las prioridades de los vecinos", subrayó el edil.

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Para Adriana “Chuchi” Molina, también del interbloque de Juntos por el Cambio, la preocupación es la ausencia del principal representante del Ejecutivo municipal de la capital provincial, algo que tiene una “carga simbólica muy fuerte, más allá de una foto” en la que Jatón no apareció. “Lo más importante es encontrar un acuerdo sobre esta compleja problemática. La seguridad pública es un derecho humano, y es central el rol del Estado”, reforzó su concepto.

El presidente del Cuerpo, Leandro González (FPCyS) tomó una banca y pidió la palabra. Defendió muchas de las iniciativas en marcha impulsadas por la Municipalidad, recordó que la GSI está "en reestructuración" y aseguró que se colocarán más cámaras de seguridad, "dentro de lo que el municipio puede hacer, en orden a sus competencias", aclaró.

Pero cuestionó la "falta de federalismo" por parte del Jefe de Estado; enfatizó en la "concentración de recursos y decisiones en Capital Federal", en detrimento de esta capital y del interior. "La comunicación desde Nación con el municipio local ha sido de destrato; ni siquiera el presidente tuvo el tino de enfocar en la capital de la provincia: Fernández se enfocó en enviar 300 gendarmes a Rosario", fustigó el edil.

Laura Mondino (PS-FPCyS) llamó a asumir responsabilidad ante el tema, y sobre todo, ante las expresiones (algunas muy fuertes) que se usaban en el recinto. “Dejemos de lado las mezquindades o la búsqueda de algún rédito político ante un tema tan sensible como la inseguridad”, requirió. Y luego empezó a “sumar porotos” para la gestión Jatón.

“La seguridad fue planteada por el intendente en un sentido más amplio, no sólo por el tema de las fuerzas”, dijo Mondino. Habló de las intervenciones sociales y con obras en los barrios más vulnerables, “todo lo cual suma en la lucha contra el delito. Así que digamos todo…”, invitó a sus pares de la oposición.

El debate se fue extendiendo por unas dos horas, con cruces muy tensos sobre los "éxitos" en materia de inseguridad en la anterior gestión nacional y municipal, y los "intensos esfuerzos" para enfrentar el delito que se llevan adelante hoy desde las jurisdicciones municipal y provincial. Hubo epítetos de todo tipo, interrupciones, datos arrojados a viva voz de dudosa fuente, quejas y autocríticas ("no resolvimos un carajo de nada sobre el delito en nuestra ciudad", se lamentó un edil).

Todo se circunscribió al gravísimo problema de la inseguridad que ya se ha cobrado 145 homicidios en toda la provincia, 96 en el Depto. Rosario y 32 en La Capital. La frutilla del postre: para cerrar, Saúl Perman (Mejor) se sumó a la solicitud de extremar los pedidos de más fuerzas nacionales, pero recomendó: "La única forma de terminar con la violencia en todas sus formas es enseñar y educar sobre técnicas de meditación". Su particular aporte despertó la sonrisa de varios concejales.