Lalo Falcioni
[email protected] En Newell's se anunciaba el viernes la vuelta del fundamental zaguero Cristian Lema, después de su lesión. También se remarcaba la presencia de la dupla Pablo Pérez-Julián Fernández en la mitad de la cancha, como garantía de garra y neurona para tratar de vencer a Patronato de Paraná. En el ataque, Juan Manuel García, el héroe de la victoria en el clásico, encendía la ilusión de los hinchas por gritar muchos goles. Pero la noche venía complicada, las ideas no aparecían y la impaciencia se apoderaba de las tribunas y de las piernas de los futbolistas. Hasta que aparecieron dos protagonistas inesperados, dos invitados de último momento, que salvaron la fiesta.
El joven delantero Ramiro Sordo, con su gol, y el arquerito Franco Herrera, con sus tapadas en el final del encuentro, se robaron los flashes y las tapas de los diarios.
El atacante oriundo de Las Rosas ingresó en el entretiempo y a 10 minutos del final hizo explotar al "Coloso" con su derechazo fuerte y cruzado tras una gran jugada colectiva. Lo del arquero de apenas 18 años nacido en Bandera, localidad de Santiago del Estero, fue increíble: tuvo que entrar a poco de finalizar el primer tiempo, por la lesión de Ramiro Macagno, y en el epílogo del juego tapó un mano a mano que seguramente no olvidará jamás.
De villano a héroe Ramiro Sordo, el goleador del viernes por la noche en el Parque Independencia de Rosario, es el mismo que en el clásico con Central fue lapidado por los hinchas de Newell's, tras fallar un mano a mano increíble con el arquero Gaspar Servio. Todo eso ya quedó atrás con el gol que le da a la "Lepra" la chance de meterse entre los equipos con aspiraciones de lograr la clasificación a los play offs -entran cuatro por cada zona-.
"Era un triunfo muy buscado, no pudimos en el partido anterior con Unión y por eso apostamos todo a ganar de nuevo de local contra Patronato y por supuesto lo pudimos sacar adelante", describió Sordo luego de su golazo y de la victoria. "El clásico marcó un antes y un después; luego de ese triunfo nos pudimos acomodar y pisar fuerte en el campeonato", agregó.
Con la voz casi quebrada por la emoción, el nacido en Las Rosas expresó: "Para mí y para mi familia es una emoción muy grande haber hecho este gol y poder darle el triunfo a esta hinchada que es impresionante como nos apoya".
"Nosotros apostamos a clasificar, pero para lograr eso tenemos que ir partido a partido, sin pensar en Racing o en River que están arriba en la tabla. Tenemos que hacernos fuertes, somos un gran grupo humano y profesional que va a seguir hasta el final", describió.
Casi un niño Franco Herrera nació en Bandera, en Santiago del Estero, el 19 de septiembre de 2003. Tiene apenas 18 años y jamás olvidará la noche del Viernes Santo de este 2022, cuando por una lesión del arquero titular Ramiro Macagno, tuvo que calzarse los guantes y salir a dar la cara por Newell's. Y le fue muy bien, ya que ayudó de manera determinante a ganar un partido muy importante para el objetivo "rojinegro" de la clasificación.
De pequeño se supo que el fuerte de Franco eran sus manos. Comenzó jugando al básquet en Tostado, ciudad del norte de Santa Fe, y cuentan que era muy bueno, al punto que llegó a ser convocado a la selección juvenil de Santa Fe. Pero al final el fútbol le tiró más y así llegó a Newell's.
En muy poco tiempo, pasó de ser el cuarto arquero de la "Lepra" a su debut en primera, por la lesión de Ramiro Macagno contra Patronato y también por la partida de Alan Aguerre y por el problema físico y el bajo nivel del colombiano Iván Arboleda.
"Esto significa un montón, lo más importante fue ganar este partido y estoy muy contento. Y después tengo sensaciones hermosas, desde que llegué a la pensión del club desde mi pueblo soñaba con debutar en primera y se me dio", contó Franco Herrera.
"Se dan muchas situaciones en un segundo, se cruzan muchas sensaciones pero por suerte pude estar bastante tranquilo y sacar ese mano a mano en el final que nos permitió ganar", cerró el arquerito de Newell's, que en el final se impuso al delantero Jhonatan Herrera en una situación comprometida para él.
En un equipo con muchos jugadores de experiencia, Sordo y Herrrera fueron los chicos de la tapa del fin de semana para Newell's. Queda mucho camino por recorrer, para el equipo y para ellos, pero ya encendieron el motor de la ilusión leprosa.
