El Ente de Coordinación Metropolitana (ECOM) fue creado en agosto de 2010 a través de la unión de la Municipalidad de Rosario y otros 18 municipios y comunas de esta región. Inicialmente fueron 19 estados locales que entablaron conversaciones para ensamblar políticas públicas en el área más poblada de la provincia de Santa Fe. En la actualidad, ya son 30 los que integran el ente.
La arquitecta Mirta Levin cedió la dirección ejecutiva del ECOM en febrero de este año a su colega Ricardo Kingsland. Kingsland habló con Mirador Provincial sobre los ejes principales del ECOM en estos meses.
-¿Cuáles son las tareas más importantes del ente?
-La idea nuestra es trabajar sobre tres ejes. Uno que es el equilibrio territorial porque pensamos que el área metropolitana tiene una ciudad central muy fuerte y municipios y comunas mucho más débiles en cuanto a cantidad de habitantes. Cuando uno piensa que la ciudad es una ciudad ampliada tiene que pensar que esa matriz, esa estructura del área metropolitana, está algo desequilibrada. Nuestra idea es generar proyectos de nueva centralidad territorial que tienen que ver con ese reequilibrio. Uno podría tener centro en el arroyo San Lorenzo y abarcar todas las localidades del cordón norte. Otro tendría su punto nodal en Villa Constitución. Tendríamos dos grandes proyectos. Uno en el norte y en el sur sobre los que estamos trabajando. Estamos haciendo los preliminares. Nuestra idea es tomar contacto con las municipalidades para intercambiar ideas y ver cómo podemos avanzar programáticamente con esos proyectos.
Un tercer proyecto más vinculado a Rosario que es el tema del aeropuerto segunda ronda, que comunica a Rosario, Funes, Ibarlucea y Pérez. Este programa tiene componentes muy diversos. Desde el propio aeropuerto. Los proyectos de acceso que tiene la municipalidad. La interacción con Funes. La estación del tren de cercanía. Y la segunda ronda que comunicaría el aeropuerto en una especie de circunvalar con el área industrial de Pérez. Junto con eso hay proyectos más puntuales que tienen que ver con la descentralización, la posibilidad de mejorar, consolidar determinadas áreas a través de la reconversión o de la construcción de viviendas que están dispersas por toda el área metropolitana.
La segunda línea es la del desarrollo integral de políticas metropolitanas. Es decir, políticas que abarcan la totalidad del territorio metropolitano. Como puede ser suelo y hábitat. Estamos trabajando con ambientes y paisajes. Estamos largando una encuesta que tiene que ver con gestión de residuos para poder avanzar en un plan metropolitano de residuos. Estamos trabajando con el tema periurbano y también el tema normativo general. Las reglas mínimas a acordar sobre el suelo urbano, sobre el suelo no urbano, sobre el suelo especial, sobre las infraestructuras.
Después hay dos políticas más que tienen que ver con esto, con las infraestructuras. Y otra que tiene que ver con movilidad y transporte. Y ahí estamos colaborando con el tren de cercanía. Estamos pensando en desarrollar un sistema de bicisendas a nivel metropolitano. Es una demanda de muchos municipios y últimamente el Concejo de Rosario por ordenanza planteó la necesidad de hacer un estudio al respecto.
El último punto es el fortalecimiento institucional. Ahí estamos trabajando con la firma de varios convenios con la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Junto con ello la búsqueda de financiamiento. Aparte de los municipios y comunas trabajamos muy fuertemente para renovar el DAMI 3 y otras fuentes de financiamiento que nos puedan ser útiles para el desarrollo de programas.
-¿Cuál es la cuestión más urgente a resolver en cuanto a planificación en la región?
-Hoy el tema de la política de suelo es muy importante. El Observatorio Federal Urbano para el conurbano de Rosario tenía que las partes urbanas habían crecido en los últimos 30 años un 56 por ciento y la población había crecido un 19. Es decir que el crecimiento de loteos, urbanizaciones es excesivo respecto a la demanda real poblacional que existe. Si bien hay ciudades que tienen un crecimiento exponencial como Baigorria, hay otras que prácticamente no crecen. Cuando hacemos una proyección de esto nos da que hay localidades que van a estar 150 años para ocupar toda el área que se proponen urbanizar. Hay localidades que están un promedio de 50, 60 años. Cinco períodos censales. Lo cual nos parece un despilfarro del recurso suelo, un impacto sobre el ambiente escandaloso, muy preocupante. Eso sí es un tema que nos preocupa mucho.
El otro tema es el de residuos. Tenemos que terminar de implementar el GIRSU en Villa Gobernador Gálvez, que si bien está funcionando el consorcio, no tiene un funcionamiento pleno. También tenemos que desarrollar un plan metropolitano de basura. Tratar de reconducir a que realmente haya una gestión integral de residuos.
-¿Qué puede aportar el ECOM para el tren de cercanías de Rosario a Cañada de Gómez?
-Ahora se demoró un poco por el calendario electoral. Estamos tratando de colaborar con un estudio de las obras complementarias que tengan que ver con paradores, las conexiones urbanas, las obras adyacentes a los paradores, la intrusión de las trazas, los cruces ferroviarios, algunos temas ambientales. Es un proyecto de la Nación porque las vías son de la Nación. Tenemos armado un programa de estudios y de desarrollo de este proyecto donde participaría el Instituto de Estudios de Transporte de la UNR.
-¿Cómo viene la ampliación de las bicisendas en el Gran Rosario?
-Una primera cuestión tiene que ver con las ciudades pegadas a Rosario. Baigorria, tal vez Ibarlucea, Funes, Pérez y Villa Gobernador Gálvez. La extensión del sistema de bicisendas de Rosario con la compatibilización de lo que se pretende en cada localidad.
-¿Cómo viene la implementación de los planes urbanos locales planificados por el ente?
-Los planes locales lamentablemente no han sido mayoritariamente, en algunas localidades creo que sí, aprobados por los concejos de cada localidad. Sin embargo, creo que sirven como información y como referencia para la toma de decisiones sobre otros aspectos. Como el tema de los residuos. Nos sirve de soporte para la política de suelo y el reconocimiento de áreas disponibles para implementar programas de viviendas. Sean privadas o públicas. Los planes son una herramienta insoslayable más allá de que hayan sido aprobados por los concejos locales o no.
